"...Dangerous..."

Maldito aterrizaje.

Hola. Esta es mi primer historia sobre DBZ, espero les guste. No olviden dejar su voto, ayuda mucho a que la historia crezca. Si es de tu agrado no dudes en compartirla con tus amigos fans de DB. La historia comienza luego de la batalla de Frezzer.

Saludos!!

Me encontraba dentro de una nave, vagando por el espacio, sin lugar a donde ir. Mi planeta había sido destruido, había perdido todo lo que alguna vez tuve.

Sentada en el pequeño sillón de la nave, note como mi cuerpo estaba totalmente dañado a causa de la intensa batalla en la que había participado. Con las pocas fuerzas que aun poseía, me puse de pie, y rebusque en un pequeño baúl en busca de un poco de medicina y algunas vendas. Para mi suerte había algunas inyecciones, vendas y cinta. Sin pensarlo mucho tome una jeringa y la inyecte, sin titubear, en mi pecho, debía hacer que el dolor se fuera rápido. Con un poco de dificultad, vende mi pierna, la que tenía un pequeño pero profundo corte, continúe con mis brazos y por ultimo mi abdomen, donde estaba la herida que mas me preocupaba.

Volví al sillón de la nave, debía buscar algún buen planeta para aterrizar, sabía muy bien que no duraría mucho aquella nave en el espacio, y sobre todo, no sabía si mi cuerpo resistiría mucho tiempo más.

Luego de unos minutos, visualice en la pantalla algunos planetas, no podía saber en cual me convenía aterrizar, por lo que me decidí por el más cercano. Voltee la nave, y acelere lo más que pude. En cuanto golpee la atmosfera, mi pequeño transporte comenzó a prenderse fuego por la fricción.

—Maldición...aguanta, no te desarmes ahora. —rogaba que no explotara conmigo adentro, si eso ocurría, ese sería mi fin.

Apague el motor en cuanto me di cuenta que el planeta tenia gravedad. Abroche mi cinturón y me prepare para el gran golpe que se avecinaba, odiaba los aterrizajes.

Luego de atravesar las nubes de aquel lugar, vi que me dirigía directo hacia un gran lago, aquello me genero una gran molestia, el salir de la nave abajo del agua sería bastante dificultoso, mas con las heridas que llevaba.

En segundos, la nave golpeo con toda su fuerza, la superficie del agua. El impacto me hizo gemir de dolor, mi cuerpo había sufrido una sacudida bastante molesta para mis heridas.

Cuando la nave toco fondo, solté las correas que me aprisionaban al asiento, y tome mi espada, era hora de salir de allí. Solté un suspiro y sin esperar mas abrí la puerta, inundando en segundos aquella maquina, ahora inservible. Tomando mi costado, y usando solo una mano, nade hasta la superficie.

Al sacar mi cabeza, tome una gran bocanada de aire, tosiendo un poco. Me arrastre como pude hasta quedar tumbada boca arriba en el verde césped.

Me preguntaba en que planeta estaba, si se encontraba habitado, y si así era, como serian sus habitantes?

—Espero que sean amigables, no creo poder soportar otra pelea. —luego de tomarme unos minutos y recobrar el aliento, me puse de pie.

Me adentre en un lugar que estaba repleto de plantas y grandes árboles, ese lugar era muy parecido a mi planeta. Continué por un par de horas, hasta que llegue a una pequeña casa. No sabía qué hacer, si golpear y pedir ayuda, si seguir, pero mis vendas estaban completamente mojadas y bastante llenas de sangre.

Con desconfianza me acerque hacia la puerta y golpee muy despacio.

—Ni fuerzas para golpear tengo. —susurre para mí. Jamás me había sentido tan inservible. Sin darme cuenta, caí de rodillas, me dolía mucho el vientre, allí donde había sufrido el peor ataque.

Pronto vi como la puerta se abrió, pero solo pude ver unos pequeños pies, todo se desvaneció luego, era indudable que mi cuerpo había colapsado.