Mon cher tuteur (Kookmin)

Capítulo 14

- Muy bien Jung, escucha con atención, este pequeño trozo de género blanco junto a este exiguo pedazo de carbón es lo único que tenemos, la anciana Malika hizo lo imposible para poder conseguirlo como favor de una criada blanca de la casona, asique NO LO DESPERDICIES- hablo fuerte e imponente Izac dirigiéndose Jungkook, quien redactaba un mensaje preciso para Jimin, el cual indicaba que iría a buscarlo la noche del día siguiente. Jungkook aprovecharía el envío de una carga de maíz hacia las tierras de la viuda, debido a los intercambios de cosechas, posiblemente el acuerdo entre la vieja y el señor Jung incluía un abastecimiento mutuo de recursos, ya que el traslado de los sacos se hizo día por medio durante toda la semana y según lo averiguado por los esclavos de la hacienda, mañana efectuarían el último viaje hacia la mansión de la condesa.

-Terminé, por favor haz lo imposible para entregárselo a Jimin- dijo Jungkook preocupado depositando el género en las manos de Izac.

-No prometo nada- respondió el joven esclavo a la defensiva mientras caminaba fuera del potero, antes de cruzar la salida giró levemente el rostro y dijo- pero lo intentaré.

Eso fue suficiente para darle fuerzas a Jungkook y mirar con una sonrisa al joven que se retiraba del lugar, Izac era su última esperanza de enterarse sobre Jimin de manera pacífica, de lo contrario tendría que recurrir a la violencia y robar a su pequeño directamente de la mansión, aunque muriera en el intento, Jungkook estaba dispuesto a todo.

- ¿Lo amas?- preguntó la anciana Malinka con una sonrisa sacando a Jungkook de sus pensamientos, este respondió

- más que a mi propia vida- Esperaron durante toda la tarde el regreso de Izac con alguna respuesta, el sol ya se había puesto y la oscuridad caía de manera precipitada en el cielo nocturno. Ya habían pasado las 9 de la noche y Jungkook caminaba de un lado hacia otro sin importarle el dolor en su cuerpo, la infección que había aquejado sus heridas había desaparecido casi por completo, aún quedaban pequeños vestigios que mantenían parte de las pieles de su espalda abiertas sin cicatrizar y con un constante sangrado, debía recostarse y recibir la frescura del aloe vera que extraía la anciana Malinka del interior de la planta, pero Jungkook era testarudo y su nerviosismo acentuaba ese rasgo de su personalidad aún más

- joven Jung, por favor descanse, mañana debe encontrarse repuesto- dijo la anciana mientras Jungkook seguía paseando de un lado a otro y mordía de vez en cuando sus uñas, respondió con preocupación

- esto no está bien, ¿por qué tarda tanto? Las noches anteriores las carretas llegaban en la puesta del sol.

Los nervios no se calmaban hasta que escuchó el ruido de las ruedas de madera y el galopar de los caballos, Jungkook quiso salir corriendo a recibir a Izac para enterarse de las noticias, pero cuando tomó impulso para volar a su encuentro, la anciana le tomó ambas manos y lo detuvo para que esperara pacientemente y no perjudicara más sus heridas. Jungkook comprendió y se tranquilizó, recordó además que si los trabajadores de su padre lo veían fuera, sería golpeado nuevamente.

- Hola a todos!- entro Izac en el potrero saludando como era de costumbre, Jungkook corrió hacia él y le dijo:

-por favor dime que son buenas noticias- mientras se abalanzaba sobre Izac

-cálmate malcriado! Sal de mi espacio personal- respondió el joven esclavo

-no seas así por favor Izac dime que está bien, que no tiene nada fuera de los normal en su cuerpo.

Izac guardo silencio un buen rato mientras sostenía la mirada suplicante y preocupada de Jungkook.

-logré verlo- dijo Izac- y la verdad es que se encuentra bien, debiste haber visto su rostro cuando dije que tenía un mensaje de tu parte para él, comenzó a llorar y a agradecerme incansables veces, ese niño está loco!- exclamó. Mientras, Jungkook lloraba de alegría y reía al escuchar la reacción de Jimin, era tal como se la había imaginado, debía prepararse para el verdadero desafío de la noche siguiente para al fin buscar a Jimin, en el trozo de género le indicaba que esperara en el jardín delantero de la enorme mansión, allí lo buscaría. Jungkook se tendió sobre una cama improvisada de paja boca abajo para cubrir sus heridas de la espalda con más sustancias naturales.