La Chica de Rosas Negras [editando]

Capítulo 7: La rosa más bella

Pasaron dos semanas desde aquella...Pues desde ese problema del Festín, todos estaban tensos, claramente Jeff había hablado con el resto y cuando algo le molestaba fuera lo que fuera dejaba las cosas entendidas para que no se repitieran... Y bueno su forma de dejarlo claro asustaba un poco.

De todas formas todo seguía su curso, proxys que vienen y van, Laz con sus problemas pero siempre con una sonrisa y Ben a su lado para compartir llantos y penas, típico en la casa.

Estaba hablando junto a Masky cuando vi por la puerta entrar a un Toby muy coqueto y algo cabreado. Eso solo significaba una cosa, Laz.

-¿Te perdiste muñeca?- pregunte guiñándole un ojo ganándome una mirada asesina.

- Muy graciosa, ve tu si te crees tanto..-se dejó caer en la silla agotado mientras de quitaba los ridículos accesorios que Laz había acomodado en el- Apuesto que no te dejara mejor que a mi...-rió.

No pude evitar sonreír para mi misma con determinación, nadie ademas de mi sabe que bajo sus tontos juegos y cara tierna se esconde una Laz segura de lo que hace y con un gran talento, por lo que, se me ocurrió una buena idea.- Acepto el reto.-Sonreí.- Si Laz logra dejarme mejor que tu.. harás lo que yo te diga por todo un día ¿ te va?- lo miré  sonriendo inocente.

Toby pareció pensárselo mucho, estaba inseguro.

-Miedo a perder contra una mujer Toby?- replicó Masky a su lado.- Vamos a veces hay que jugársela..

-Esta bien..-suspiro-..pero si gano tu harás lo que yo diga y serán dos días.

-Acepto- ambos cerramos la apuesta con un apretón de manos y acto seguido fuimos por Laz.

~15 minutos~

- Ahora mira para el otro costado..- obedecí a las indicaciones de Laz, se tomaba muy enserio eso de la belleza externa y no lo niego, con tan solo verla notas lo dedicada que es para ese tipo de cosas.

Lentamente me acomode  en mi lugar, sabia que tomaría tiempo y bueno sabia que Laz haría su magia conmigo para convertirme en alguien completamente distinta para dejar a todos atónitos, siempre le ha gustado sorprender a los demás. Se que confiarle mi aspecto a una niña es algo...Bueno descabellado..Digo esta en juego mi cara, mi pelo, mi piel...Solo hace falta un error y adiós. Pero ella no es una niña, casualmente es una adulta en un cuerpo diminuto y básicamente es como la hermana que jamas tuve, a excepción de mi bastardo hermano.

¿Que sera de mi tía y mi hermano? ¿De mis amigos? Se acordaran de mi? Pase y repase una y mil veces esas preguntas en mi cabeza y no pude evitar recordar a mi padre, cuando en realidad era mi padre y no el monstruo que me obligue a matar bajo la sed de venganza que tenia por tanto dolor....A veces me pregunto ¿Estarían mis padres orgullosos de la chica que soy ahora? Hago lo mejor por creer que si. Se que lo estarían, necesito pensar que si... Pero acaso se podría estar orgulloso de un monstruo? Si.. No..Tal vez, quien sabe realmente ¿No? La vida es un infierno,  nuestro propio infierno que decidimos construir, no existe un cielo en el cual ser felices pero si hay que saber disfrutar de las pequeñas cosas que nos hacen felices y esto, me hace feliz.

Me había sumergido tanto en mis pensamientos que era incapaz de sentir algo, ni siquiera sentí cuando me perforo, el tiempo paso tan rápido apenas lo note.

Laz suspiro exhausta sacándome de mis pensamientos.- Al fin lo he logrado..-notaba orgullo en sus palabras.

Solo la mire con curiosidad, ¿Habrá hecho esta chica algo por mi como para cambiar esta exótica criatura?

La abrace.- Gracias Laz.-Sonreí levemente apoyándola sin importar lo que me hubiera hecho, eso hacemos las hermanas nos apoyamos ciegamente, eso es confiar en tu familia y hacerte cargo de las consecuencias, además lo peor que podía pasar era cocinar todo el día para el glotón de Toby y jugar con el en el bosque.

- De nada Rose..-se limito a decir con un leve sonrojo- mejor ve a mostrarte, quiero que ganes esa apuesta..-rió- sin dudas quiero ver a Toby obedeciendo tus mandatos...

Me levante con cuidado como si las cosas pudieran cambiar con un movimiento brusco, todos estaban en la cocina. Todos se petrificaron al verme y juro por lo que haya tras la muerte que la mandíbula de Toby llego hasta el piso.

No dude un segundo más y fui a mi habitación debía ver en que me había transformado pero cuando llegue al espejo quede perpleja. No era yo..Era una chica completamente distinta, mi pelo negro y negro fue reemplazado por un rojizo sangre con puntas desmechadas, mi labio al igual que mi nariz presentaban perforaciones resaltando mi rostro de una llamativa, una delicada pero bien armada sombra negras en mis ojos remarcaban y agrandaban mis ojos grises. No tenía palabras por lo que veía enfrente de mi...Bueno si una en realidad.

 Gané.