Cuando me levanto temprano siempre se me hace tarde. Pero no es por perezoso, aunque se que Carolina en sus vídeos me ha creado fama de serlo. La verdad es que me cuesta mucho levantarme temprano,debido a mi espíritu curioso nocturno. Soy de los que creen que la noche y la madrugada están llenas de encanto creativo y permiten aflorar los pensamientos.
Mi hora favorita del día son las CUATRO DE LA MAÑANA. Ese es el momento en que puedo escribir con más soltura, en que mi mente esta mas despejada y el silencio de ese lapso me permite ser bastante productivo. Lo fantástico de esa hora, además, es que el movimiento de las redes sociales es muy bajo, entonces puedo concentrarme. El silencio es mi amigo. Siento que el mundo es mio a las cuatro de la mañana.
