Totalmente opuestos [Harry Styles]

Capitulo 6.

Había pasado una semana desde el día que Harry consiguió llegar a tiempo y evitar que Rob hubiese hecho lo que hubiese querido conmigo, le había prometido no hacer nada parecido a lo de ese día y así lo hice. Había intercambiado algunas palabras con Harry en el gimnasio, pero nada muy allá. Terminé mi día de trabajo, era viernes por lo que al día siguiente no tendría que trabajar, me despedí de Max y Alex para irme a casa, pero al salir alguien agarró mi brazo por detrás, mi corazón empezó a acelerarse, me di la vuelta y vi al imponente muchacho de cabello rizado.

- Ally me gustaría invitarte a salir, creo que me lo debes por lo de aquel día

- Em..yo, estoy ocupada y, bueno.

- Ally no pongas escusas, me lo debes, tranquila lo pasaremos bien

- Está bien

- Quedamos aquí a las 9:30, a no ser que me digas donde vives y pueda pasar a recogerte

- Nos vemos a las 9:30 aquí Harry

Sonreí de forma juguetona y me fui en dirección contraria para despistarlo, esperé a que él desapareciera y entonces me encaminé a mi casa. Ese chico me volvía loca, había algo que me decía que debía alejarme de él, pero también me decía que tenía que estar a su lado. 

Me arreglé y esperé a que llegase la hora, cuando llegué él me esperaba en la puerta del gimnasio, se veía demasiado guapo. Montamos en su coche y fuimos hasta el centro de la ciudad, pasamos a un restaurante que no estaba nada mal

- Vaya, esto no me lo esperaba

- Estás insinuando que no tengo clase, pensabas que te llevaría a algún pub con música alta y gente bebiendo ¿no es así?

- Exacto

Le sonreí mientras me guiaba dentro del local, sin duda Harry parecía otro en ese momento, era encantador y su sonrisa hacía que eso se duplicase. Estuvimos hablando durante la cena, aunque lo intenté no conseguí que el chico me hablase mucho de él, pero me sentía cómoda a su lado. Después de que pagase la cuenta salimos del local en dirección al parque por el que días antes habíamos cruzado, pero esta vez nos detuvimos allí. Paseabamos juntos, de vez en cuando Harry soltaba algún comentario que me hacía reír.

- Ally, eh, bueno, yo..

- ¿Tú?

Dije insistiendo con la mirada

- Ally tú me gustas

Dijo de pronto, me quedé atónita, no podía creer lo que decía, ese chico alto de mirada hipnotizadora me estaba diciendo que yo le gustaba, yo que para nada debía de ser el tipo de chica con la que Harry se relacionaba, no sabía muy bien que decirle, pero lo cierto es que él también me gustaba, estaba empezando a sentir algo por ese chico misterioso

- Yo, bueno, la verdad es que tú también me gustas Harry

Mientras hablaba él iba aproximándose más a mi, me estaba hasta poniendo nerviosa, entonces uno de sus brazos rodeó mi cintura, mientras los dos nos mirabamos fijamente a los ojos, su mano en mi cintura me ponía nerviosa, cada vez estaba más cerca, notaba su respiración tan agitada como la mía, los dos sonreíamos. Pasé uno de mis brazos alrededor de su cuello, de forma que pude jugar con sus rizos mientras él seguía acercándose cada vez más, estábamos a centímetros, nuestras narices rozaban, cerré los ojos despacio al tiempo que sus cálidos labios se posaban en los míos y empezaban a moverse despacio, yo simplemente me dejaba llevar por ese dulce beso que apenas duró unos segundos, dejándonos con ganas de más. Abrí los ojos y me encontré con los de Harry que brillaban de una forma que no había visto antes, me miraba fijamente mientras mordía su labio inferior, agarró mi mano y tiró un poco de mí para seguir paseando. Los dos andábamos en silencio pero con una sonrisa en nuestros labios, no había imaginado que Harry pudiese llegar a ser tan dulce.

Estuvimos allí un largo rato y finalmente Harry me llevó de vuelta a casa en su coche, lo guié hasta mi casa, después de lo ocurrido sabía que podía confiar en él y decirle donde vivía. Cuando llegamos, Harry bajó del coche para acompañarme hasta la puerta, saqué la llave de mi bolso y abrí la cerradura, al encender la luz de la entrada mi cara cambió, estaba todo patas arriba, alguien había estado ahí, Harry me miró confuso y me hizo entrar detrás de él, entonces un fuerte golpe se escuchó proveniente del dormitorio.