Encerrada © [EDITANDO]

Capítulo 13: ¿Canciones?

Narra Addeline

El saco de boxeo se movía en círculos mientras le propinaba una que otra patada.

No podía dormir y pensé que era buena idea que practicara un poco.

Alexandro me llevó a la habitación de invitados que tenía la gran casa y volvió a la habitación donde le esperaba Yiyianna.

No tardé en salir de la habitación de nuevo. Estaba muy agobiada, no sabía como le iba a decir a Mike lo que está haciendo Freya.

Después estaba Alex. Definitivamente estaba con Yiyianna. Minutos después de que entrara, se empezaron a escuchar gemidos.

Mi cara era toda un poema: Tenía bajo los ojos unas grandes bolsas por la falta de sueño. Pero también tenía irritados los ojos, tanto que veía borroso.

Suspiré golpeando el saco con menos fuerzas.

Tenía mis manos desprotegidas pero ahora estaban totalmente rojas.

Roan se metió en la habitación de Alexandro, pero cuando empezaron los gemidos se salió rápidamente.

Ya que Alexandro le abrió la puerta.

Roan aún estaría en mi cama durmiendo.

Sé que lo hizo adrede, la habitación de Alexandro y Yiyianna era la puerta de enfrente.

Seguí pegando el saco con todas mis fuerzas. La rabia me consumía. Mis ojos estaban entrecerrados.

Una mueca de dolor se instaló en mi cara al ver que mis manos comenzaban a sangrar.

-Me recuerdas a Alexandro -Una voz a mis espaldas habló que poco a poco se acercó a mi-

-¿Y a mi eso, que me importa? -Un tono totalmente sarcástico salió del fondo de mi garganta -

-No tienes porque estar a la defensiva conmigo, yo no te hice nada -Se sentó en el suelo-

-Chris, todo lo que tenga que ver con Alexandro apesta. -Me sinceré-

-No seas idiota, sabes que no es así.

Me quedé callada mientras seguía golpeando el saco. La sangre cada vez era más pero no me preocupaba.

-Todos estamos preocupados por ti. -Volvió a hablar Chris-

-No entiendo el porqué.

-No eres la misma. -Me reprochó-

-Si viniste aquí para reprocharme cosas te invito a que te vayas. No estoy para aguantar las gilipolleces de nadie.

-No me puedo creer esto. -Negó con la cabeza- ¿Por qué este cambio tan repentino?

-Estuve encerrada, me maltrataron, casi morí de hambre y vosotros no hicisteis nada. ¿Por qué cambié? ¿Te respondí a tu pregunta?-Solté con sarcasmo-

-¿Nos lo vas a reprochar siempre? Estábamos entre la espada y la pared, Addeline.

-Yo si fui capaz de dar mi vida por vosotros. Os pensaba mis amigos pero eso quedó en el pasado. Ténganlo claro todos.

-Sabíamos que eras terca y que te iba a acostar mucho entendernos. -Hizo una breve pausa- Pero ya te estás pasando con todos nosotros. Nosotros también la pasamos muy mal cuando te entregaste así por así. Quisimos buscar una solución y no la encontrabamos. Pero si solo guardas el rencor de todo lo que hemos pasado todos juntos, no hay quien cambie tu opinión.

Chris se levantó y salió del pequeño gimnasio donde estaba acomodada.

Sé que a lo mejor ellos no tuvieron la culpa. Pero ni corazón ni remordimiento tuvo Alexandro, que me cambió por Yiyianna.