Amor Prohibido

Capítulo 4

No lo podía ni creer. Ése día que le había dicho que sí estábamos tan felices cuando íbamos de camino hacia mi casa nos acercamos y yo no sabía ni que hacer ya que era mi primer novio y oficial.

-Te veo mañana si... Te quiero mucho y gracias por decirme que si Vanesa-- me dijo con sus ojos marrones con una tonalidad clara. Sus ojos eran entre miel y marrón. Solo sé que le brillabas cada vez más los ojos.

-De acuerdo te veo mañana...Yo también te quiero Cris-- nos fuimos acercando hasta que nos besamos. Oh Dios, sus labios eran tan perfectos no me esperaba un beso tan rápido pero pues ya éramos novios. Sentí como su lengua entró y jugaba con la mía. Era el mejor beso del mundo.

-Nos vemos-- me dijo al separarnos con la respiración un poco entre cortada y yo le respondí lo mismo con una sonrisa.

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Estaba en mi cama en la noche y sólo podía pensar en ése beso tan hermoso y tan apasionado a la vez. Él me había volvido loca con tan solo besarme.

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Al día siguiente nos encontramos en la hora de almuerzo y caminabamos por la escuela agarrados de la mano y en cuanto mis amiga nos vieron me preguntaron luego al haber entrado a la clase.

-¡¿Son novios?!-- preguntó Jenifer sorprendida.

-Si Jenifer...lo somos-- le dije con una sonrisa.

-¡Oh Dios que emoción ya tengo cuñado!-- dijo emocionada.

Todo el mundo estaba preguntandome sorprendidos de lo que había pasado. Nadie me había visto tan feliz. Al salir de la escuela caminamos hasta mi casa a pies y nos despedimos como siempre con un beso tan rico como sólo él lo sabía dar. Yo no podía creer que fuéramos novios. Antes de ser su novia quería besarlo pero sabia que no eramos nada pero ya no hay que aguantar ya es mi novio oficialmente. Recuerdo cuando me daba abrazos aún no siendo nada. Todos esos abrazos empezaron porque yo necesitaba uno ya que estaba pasando por una situación difícil y ahí fue que mi confianza creció hacia él y la de él hacia a mí. Cada beso en la mejilla, cada beso cerca de mis labios me hacía temblar. Pero ahora no sólo serán abrazos de amigos sino de novios.

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Cada día que pasaba me enamoraba más y más de él y yo sé que él también lo estaba. Cada día que pasaba lo conocía más. Pude conocer sus sentimientos y su carácter. Era celoso pero por protegerme no porque era súper sobre protector. Y por eso fue la primera pelea pero pues como siempre ambos nos pedíamos perdón y eso era bueno ya que ambos reconocíamos nuestros errores.