-¡Cris pon la mesa, tu padre está a punto de llegar!- ordenó mi madre desde abajo.
-¡Vooooooy!- acababa de terminar con mi ropa, no podía quitarme de la cabeza a ese chico misterioso, ¿quién sería?
Bajo a toda prisa y pongo la mesa, mamá está preparando unos filetes de pollo a la plancha con una salsa de nata y roquefort. Papá acaba de llegar, me da un beso en la frente y va en busca de mamá.
Está empapado, normal, con este tiempo, es normal que lo esté. Llaman a la puerta y era Louis, mi hermano pequeño, el pobre llegó a casa y tal como llegó soltó su mochila y se fue a la ducha.
Cuando ya todos por fin estábamos sentados en la mesa para comer , mi madre nos apartó a cada uno nuestro plato.
Lo primero que dijo al sentarse fue: -Tenemos vecinos nuevos, la señora Ryan y su hijo, un chico encantador- dijo y me miró cuando replicó lo último. Lo único que se me vino a la cabeza fue si el chico misterioso era el hijo de la señora Ryan.
-¿Está separada?- preguntó Louis con risita picarona.
-No, es viuda- dijo mamá mientras se servía un poco de agua.
Pobre mujer, es un palo ser viuda tan joven, además ella valía muchísimo, pelo rubio, ojos castaños y un cuerpo envidiable.
-¿Cómo sabes tanto de su vida mamá?- pregunté matándome la curiosidad.
-Esta mañana cuando bajé de tu cuarto, escuché un golpe en la calle, abrí la puerta y me encontré a la señora Ryan tirando cajas y sujetando como podía el paraguas. Fui a ayudarla y me invitó a pasar. Me agradeció mucho que la ayudase, ya que su hijo no estaba, había ido a la universidad, y ya pues me presenté , ya sabéis como soy- y casualmente papá, Louis y yo pusimos los ojos en blanco, mamá era así, le gustaba más una charla que a un tonto un lápiz.
- Y ¿ por qué dices que su hijo era encantador si no estaba alli?- pregunté de nuevo.
-Pues dió la casualidad de que cuando me iba, llegó a su casa y la señora Ryan me lo presentó, del nombre no me acuerdo muy bien, creo que se llama Noel ,pero lo que sí me acuerdo es que era monísimo y muy educado, no como los críos que hay hoy en día- miró con el ceño fruncido a Louis y éste empezó a reirse.
Cuando terminamos de comer, papá se quedó dormido en el sofá y Dogo a sus pies. Louis se fue a clases particulares y mamá lo acercó, porque si iba andando, acabaría empapado de nuevo.
Tormentas y más tormentas, ¿parará de llover en todo el día?. Aburrida en el salón, subí a mi cuarto, me puse a tocar mi guitarra en mi cama y para inspirarme miraba la lluvia que caía.
Cansada de escuchar sólo la guitarra, abrí la ventana y empecé a tocar a ritmo de la lluvia. Me salió un tono de voz muy bajo, quería cantar alto, llevaba todo el día encerrada en casa y no podía salir con este tiempo.
Me concentré y empecé a tocar mi canción favorita de Taylor Swift, "Everything has changed".
Toda la letra era perfecta, cuando conozco a alguien y me resulta atractivo, siempre intento concordarle una canción, y esta era perfecta. Me había encantado ese chico misterioso, o quizás Noel, no sabía si era él, quizás sería un amigo del hijo de la señora Ryan, pero todo apuntaba a que era él, Noel.
-"All I know is a simple name, everything has changed, and your eyes look like coming home"- cantaba y seguía cantando, estaba super relajada y con los ojos cerrados mientras cantaba.
Mi sorpresa fue que al abrir los ojos, allí estaba él, apoyado sobre su ventana escuchándome cantar.
-Lo haces muy bien, ¿eres cantante?- me preguntó.
-Eh..mmm..yo...no..- dije temblando de la vergüenza.
¿Qué hago ahora? Me muero de la vergüenza...
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No todos los chicos salen rana.
Teen FictionCris es una estudiante de universidad de 21 años, según ella, la suerte no existe. El mundo se le viene encima cuando se entera de que Dani, el chico que le gusta, tiene novia. Cris no sabe lo que le espera cuando conozca a Noel, un chico nuevo en s...