Embriaguez

51 8 1
                                    

Cerraste los ojos,

suspiraste,

él gruño,

y más se acercó,

tu aroma le embriago,

y le mareo.

La puerta se abrió,

la rubia grito,

y de él te separó,

Frío te entro,

temblaste,

él la vuelta se dio,

y [de nuevo] se acercó,

pero no te toco,

pues la chica le empujo.

Él la aparto, 

y te cargó.

Nadie te tocará

y menos de él te apartarán.

ARIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora