La decisión final (I)

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CHRISTAL

Ya han pasado dos meses desde que todo empezó, hace poco fui a hablar con Magnus sobre lo que podía estar pasándome, nos hemos pasado noches en vela buscando entre sus libros, me va ha salir otra marca ¿como lo se?, la zona se está volviendo negra, saldrá en mi muñeca izquierda por eso la oculto, últimamente ya he recibido la visita de Sebastian, me ha dado muchos sustos e incluso me ha esperado para acompañarme a algún lugar, creo que no es tan malo pero si lo es a la vez, cada vez me lía más todo esto. Luego está Jace y Clary, se notan que se aman pero no lo quieren aceptar, ya sé porque, creen que son hermanos pero lo dudo mucho, son muy diferentes, Clary tiene unos ojos marrones muy alegres y es pelirroja pero su tono es muy llamativo, como el fuego, ella es una chica muy hermosa, en cuanto a Jace el es rubio pero un rubio dorado como el sol, sus ojos son azules como el cielo que parecen ser transparentes pero son impenetrables, muchas veces me quedo mirando esos ojos, casi siempre está serio, su cuerpo es muy musculoso y fuerte, miré el techo de mi habitación, ¿por qué no puedo dejar de mirarle ansiosa de ver una de sus bonitas sonrisas?, ¡no! No sólo son bonitas son magníficas, maravillosas como si fuera el ser más hermoso que existiría jamás.

-Dios Christal para ya-me dije a mi misma.-

Miré el reloj y ponía las seis menos cuarto, maldije y rápidamente me levanté de la cama, cogí mi bolso de deportes y salí corriendo de mi habitación, conseguí salir del instituto y corrí al campo de volleyball ya que hoy era la final, hablando de finales tenía que coger una decisión con respecto a todo esto.

Tengo tres opciones.:
1.Dejar todo atrás e irme a otro país.

2.Unirme a los cazadores de sombras hasta que termine todo.

3.Irme con Sebastian.

La tercera no parece muy buena opción, la segunda seria razonable y la primera es muy tentativa, pero tenía que dejar eso de lado el campeonato era mucho más importante que todo este rollo, al llegar fui a los vestuarios me cambié y salí.

Miré a todos lados por costumbre y me impactó bastante lo que ví, a la derecha de las gradas escondido estaba Sebastian y a la izquierda Jace, ellos se vieron y temí lo peor, no me habían visto todavía y el pánico me paralizó. Una de mis compañeras me ayudó a salir del trance. Comenzó el partido y yo jugué con todas mis ganas.

JACE

Tenía un gran problema, Clary y yo no podíamos estar juntos, somos hermanos, también me preocupa saber que Sebastian sin ser visto ni nada ha estado entrando y saliendo del instituto pero todavía no he averiguado que hace, también Alec pronto se casará y todos estamos felices o casi todos, yo se que él no la quiere y que lo hace por su madre. Chris ha estado muy rara últimamente, la miró y quita la mirada, si estoy cerca se marcha con algún pretexto, no sale de su habitación o se va con Magnus, tiene ojeras en los ojos aunque no se le nota mucho, no come mucho y siempre está entrenando, la he pillado varias veces y he tenido que llevármela arrastras a su habitación para que durmiera, no se porque ahora estoy aquí pero estoy en la final del campeonato de volleyball y justo al otro lado estaba Sebastian y la estaba mirando a ella.

Porque negarlo se veía bonita, su pelo estaba en un moño cuando siempre se pone una trenza, una camisa de asillas y pantalones cortos, unos tenis y llevaba una cinta ceñida al cuello azul, sus ojos estaban más vivos que nunca, estaba sudorosa y no le molestaba parecía que le importaba más el deporte que ella misma, me quedé embobado cuando sonrió, sus ojos obtuvieron un brillo de emoción, felicidad y agitación, sus mejillas obtuvieron un leve tono rojizo y sus labios parecían tentativos. Miré a Sebastian que también vio lo mismo que yo, desde luego ella era bonita, su pelo negro da un brillo infinito a sus ojos como un pozo, te caes y nunca tocarás el suelo pero es una sensación agradable, las mechas dan brillo a su pelo como si la luz y la oscuridad se tocarán, su piel parecía suave y tersa, su cuerpo no es ni muy alto ni muy bajo la estatura perfecta, casi todo en ella lo era, ahora podía verlo claramente.

El marcador ponía 46-57 su equipo iba ganando, parecía que eso la impulsará a dar lo mejor de ella, acabo y ella ganó, cuando la vi sonreír feliz se abrazó a una chica y lloraron de alegría, eso hizo que sintiera compasión.

La Reina De Las NievesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora