Estaba acostada en mi cama. No podía dormir pensando en Niall. Yo tenía razón al pensar que él había cambiado demasiado. Yo recordaba a un niño no muy alto, con cabello castaño y grandes cachetes. Pero si había algo que no ha cambiado en él, eran sus ojos. Ellos siempre son los mismos.
¿Me recordará? ¿Me habrá reconocido? En ese momento deseé poder leer sus pensamientos.
¿Qué hará cuando descubra que soy la hija del supuesto asesino de su madre? ¿Me odiará?
Recuerdo que después de presentarnos, intercambiamos números y me dijo que era muy simpática... No quiero que me odie.
Honestamente, ahora me estoy odiando a mí misma. Si hubiera sabido el buen chico que Niall es, nunca había aceptado hacerle ese favor a mi padre. Y lo peor de todo es que no le puedo pedir ningún consejo a nadie, nadie puede saber sobre eso.
El sonido de mi celular me sacó de mis pensamientos.
—¿Hola? —Contesté.
—¡Hola, ______! —Respondieron del otro lado de la línea.
—¡Niall! ¿Qué pasó?
—Nada —rió—, sólo que estaba aburrido, y no tengo nada que hacer así que decidí llamarte.
—Ah, ¿okey? —reí—. La verdad yo tampoco es que esté haciendo nada interesante.
—¿Quieres que vayamos a algún lado? —Preguntó, simpático.
—Niall... Son casi las 2 de la mañana, ¿a dónde podríamos ir?
—Mmm... ¿Dónde vives?
—En el número 2 de College Street. ¿Por qué?
—El que hace las preguntas aquí soy yo. ¿Tu cuarto tiene balcón?
—Sí, pero por q... —Iba a seguir preguntando el porque quería saber todo eso, pero Niall me interrumpió.
—Voy para ya —Colgó.
Déjenme ver si entendí. ¿Acaso Niall iba a venir para acá? ¡Wao!
Me levanté de la cama precipitadamente y fui a mi tocador. Pasé el cepillo por mi cabello, tratando de que se me viera hermoso para... Espera, espera, espera. ______... ¿Acaso te importa tanto el hecho de que venga Niall? Bueno la verdad es que si viene, no quiero que me vea con mi cabello como vagabunda. Si, es eso.
De pronto, escuché unos cuantos golpecitos en la puerta de mi balcón. Debía ser Niall.
Fui a abrir, y en efecto, era Niall.—¡Hola, _____! —Saludó alegre y me dio un abrazo. Niall estaba en pijama. Un pantalón para dormir con cuadros color verde, y una playera blanca. Su cabello lo tenía ligeramente despeinado, lo que lo hacía verse más... sexy.
—Hola, Niall —le sonreí. Yo estaba en un short corto color blanco, y una playera de tirantes morada.
—Así que... Este es tu cuarto —pasó adentro. Su vista recorría todo el cuarto.
—Así es.
La vista de Niall se centro en una repisa donde tenía unos pocos, muchos peluches. Había osos, conejos, ranas, koalas, perros, monos, gatos, todo tipo de animales de peluche. También había unas cuantas de mis viejas muñecas barbie. Debajo de esas repisas, había una caja de juguetes, donde tenía todos mis viejos juguetes.—¿En serio? —Niall me miró arqueando una ceja.
—¿Qué tiene? —Encogí los hombros, quitándole importancia—. Me acabo de mudar, hace años que no duermo en este cuarto.
—¡Vaya! Vale que no tienes peluches —dijo. Yo reí.
— Siempre decía que esos peluches me protegían de los monstros que me querían violar por la noche
—¿Violar? —Niall soltó una carcajada—. Tenías una imaginación muy grande.
—¡Que tiene! Uno nunca sabe cuando un monstruo pedófilo y pervertido quiere violar a una inocente niña de siete años. Esos peluches me iban a defender —alegué.
—Eres tan divertida —Niall siguió con sus carcajadas.
—No es un chiste —murmuré.
Niall siguió con la vista vagando por mi habitación. Hasta que se detuvo en otra cosa que igual le llamó la atención.
—¡Tienes una guitarra! —dijo emocionado—. Me dijiste que no tocabas.
—Y no lo hago.
—¿Entonces por qué tienes una guitarra?
—Mi hermano toca la guitarra, y hace años le pedí que me enseñara, y él aceptó a regañadientes porque mi mamá lo obligó. Así que fuimos a comprar una guitarra para mí. Pero Charlie sólo alcanzó a darme dos lecciones de guitarra.
—¿Por qué? ¿Qué pasó? —preguntó Niall intrigado.
—Es que se fue de la casa —susurré.
—Lo siento —Niall hizo una mueca—. ¿Quieres hablar sobre ello?
—No, por favor.
—Está bien, no quiero que te sientas incómoda. —Yo sonreí.
Sé que tal vez dirán "Supéralo ya" pero la verdad no es fácil superar una partida. Sé que tal vez Charlie y yo peleábamos casi todo el tiempo, pero seguía siendo mi hermano, y lo amo. Y lo diré, lo extraño, lo extraño demasiado y me duele saber que no sé donde está. No sé si está bien, no sé si está vivo o muerto. No sé nada de él desde que tenía ocho años.
Si ustedes alguna vez han perdido a alguien que amaban, me deben de entender completamente.
—¡Hey! —dijo Niall—. Quita esa cara de nostalgia, ¿si? No me gusta ver a los demás tristes.
—Está bien —sonreí.
—Así me gusta —Niall me guiñó el ojo.
—¿Y ahora qué hacemos?
—Mmm... —Me miró con las cejas levantadas—. Estamos aquí los dos, a las dos de la madrugada, solos, en tu cuarto, con una cama... ¿Qué podemos hacer?
—¡¿Qué estás insinuando?! —Lo miré con la cara desfigurada. Niall me siguió viendo fijamente, subía y bajaba las cejas, y yo no quería ver mi cara en ese momento. Y de un segundo a otro, Niall estalló de la risa.
Yo sólo lo miraba, sin saber cómo reaccionar. Y como cinco minutos, después, dijo:
—¡Hubieras visto tu cara! ¡De verdad te la creíste! —Soltó otra risa—. ¡Eres tan graciosa! —y aquí vamos otra vez, ¿se ríe de mi o conmigo?
—¿Quieres ver una película? –Pregunté.
—¿Cuáles tienes?
—Tengo un cuarto lleno de películas, pero si vamos podríamos despertar a mi abuela, y no queremos eso, así que tendremos que conformarnos con la película que planeaba ver pero que al final no vi.
—¿Cuál?
—Búsqueda implacable.
—¡¿Enserio?! —preguntó emocionado— ¡Esa es mi película favorita!
—¡La mía igual!
—¿Qué rayos esperas? ¡Ponla!
Coloqué la película en el DVD y encendí el televisor. Niall y yo nos sentamos en la cama, recargados en la cabecera de esta. Del cajón de mi mesita de noche saqué un paquete de Sabritones grandes, lo abrí y le ofrecí uno a Niall, él, con una sonrisa en su cara, lo aceptó.
Estaba concentrada viendo la película. Por si no la han visto, trata sobre una chica, que quiere irse con su amiga a parís de vacaciones, pero su padre no la deja, diciendo que era muy peligroso y todo eso. Al, final, el padre acepta, pero ella y su amiga son secuestradas el primer día que llegan a parís, y su padre cuenta con sólo horas para poder rescatar a su hija, antes de que no pueda volver a verla. ¿Se entendió?
La película estaba en la parte en la que Kim y su amiga llegan a parís. Siempre he dicho que fueron tan estúpidas, al aceptar la ayuda de un completo extraño, y lo peor, que le dieron casi toda su información. Luego que no se quejen si las secuestran. Okey, eso fue muy cruel, pero es cierto.
En la segunda mitad de la película me comenzó a dar sueño, y yo sólo sentí como Niall pasaba su brazo por encima de mis hombros, y yo recargaba mi cabeza en su hombro, y él recargaba la suya en mi cabeza. De seguro cualquiera que nos viera en ese momento pensaría que éramos novios, pero no. Éramos sólo amigos, y no quería involucrarme con él, ya que sabía que al final tendría que pasar lo inevitable, y yo no me podía enamorar de él. Simplemente no podía.
Pero por esa vez, y sólo por esa vez me dejé llevar. Cerré los ojos y caí dormida en los brazos firmes de Niall. Y esperaba al día siguiente despertar con ese hermoso chico a mi lado.
Novela escrita por Meetzly Espinosa (wattpad: Meeetzly)
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Kill or die of love [ADAPTADA]
Fanfiction«Matar o morir por amor» "Si tuvieras que elegir entre matar a la persona que amas o morir, ¿qué elegirías?... ¿Estás seguro?" Es una fanfic de Niall Horan, pero la trama está buenísima y por eso decidí adaptarla; la novela está escrita por Meetzly...