Capítulo 8-Parte 1: "Hora de la fiesta"

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  El día siguiente se pasó más rápido de lo que hubiera deseado. Pasé todo el día con Ale tratando de decidir que llevar a la fiesta del viernes. Ella quería ir extremadamente linda para ver a Zayn. Yo le dije que estaba exagerando, y ella dijo que no.
Pasamos el día en el centro comercial, buscando el vestido perfecto para la ocasión. Yo lo encontré rápidamente, pero Alejandra se tardó un poco. Según ella, tenía que estar más linda que la "rubia plástica" novia de Zayn.
Y luego de horas y horas, Ale finalmente encontró el vestido perfecto.

[...]

—Estoy nerviosa —admitió Ale.
Estábamos en camino a la casa de Zayn. Le había pedido el auto a mi abuela y yo conducía. Ale llevaba un hermoso vestido con diferentes tonos de azul que le llegaba a las rodillas. Mi vestido era strapless, color blanco con pequeños destellos plateados, y, al igual que el de Ale, me llegaba a las rodillas.
—Llegamos —anuncié aparcando frente a la casa de Zayn.
Desde ahí podía escuchar el sonido de la música resonar fuertemente mis oídos. Me baje del auto junto con Ale. La pobre temblaba de los nervios. En la puerta había un letrero que decía "¡Pasa y disfruta de la fiesta de este sensualón!" (abajo había una foto de Zayn). Ale y yo reímos y entramos a la casa. La casa de Zayn era todo menos pequeña. En la sala había una televisión de plasma, tenía un nintendo Wii, un equipo de sonido de última generación y varias fotos en unas repisas. Los sillones era de cuero color carne, y las paredes eran blancas. Del lado izquierdo estaba la puerta a la cocina, y del lado derecho estaba la puerta al patio trasero. Por lo que pude ver, ahí tenía una piscina, fuente de sodas, mesa de golosinas y un bar en la esquina.
—Vamos —me indicó Ale. Me tomo de la manó y atravesamos esa manada de gente para llegar al patio trasero. ¿Y qué había? Mucha más gente—. ¡Ahí está Zayn! —gritó emocionada, pero apenas la pude oír por el sonido de la música—. Esa mecha es inconfundible —me guiñó un ojo.
Caminamos hasta llegar al bar, dónde se encontraban dos chicos. Uno era moreno, estaba vestido con unos jeans y una de esas chaquetas universitarias color azul con blanco. Tenía el cabello negro con unas mechas rubias. El otro chico era Harry.
—¡Hola, Zayn! ¡Hola, rulitos! –saludó Ale.
—Alejandra... Tengo 18 años, ¿no crees que estoy un poco grande como para que me sigas llamando rulitos? –dijo Harry.
—Déjame pensar... —Ale hizo una cara pensativa—. No –sonrió. 
—Hola, Ale —dijo Zayn. Ale se acercó a él y depositó un beso en su mejilla.
—Bonita fiesta, por cierto –carraspeé para llamar la atención.

— ¡Oh, lo siento! Zayn, ella es ______ ¿la recuerdas?, _______, él es Zayn.

—Un gusto –dije ofreciendo mi mano. Zayn la tomó y me jaló hacia él para que le diera un beso en la mejilla.

—Hola, _______ —dijo cuando nos separamos.
—Hola, preciosa —saludó Harry. Yo le dí un beso en la mejilla. No piensen mal, él desde que teníamos cinco años me dice así.
Pasamos un tiempo hablando con los chicos. La verdad eran muy divertidos. A Zayn nunca tuve la oportunidad de conocerlo muy a fondo, y espero que ahora que volví, pudiéramos ser buenos amigos.
—Y... ______, ¿irás a la Universidad pública con nosotros? –preguntó Zayn.
—Sí –sonreí.
—¡Genial! –dijo Harry–. Así podré defenderte de cualquier estúpido que se quiera pasar de listo contigo—dijo serio.

—Harry... Sé defenderme sola, tranquilo.
—Está bien. Pero aún así te estaré vigilando –hizo un gesto gracioso y todos reímos.
Luego de media hora me encontraba yo sola sentada en la sala. Ale se fue con Zayn a no sé donde, Harry se fue a bailar con una chica que conoció en la fiesta. Y yo, yo acá como toda una forever alone.
Decidí ir a la cocina por un poco de agua y cuando me estaba sirviendo, escuché que alguien decía mi nombre:
— ¿_______? –Me volteé a ver quién era. Y cuando vi a esa persona, me sorprendí demasiado.
—¿Niall? ¿Qué haces aquí? –pregunté.
—Eso te iba a decir yo —rió—. ¿Qué no ibas a ir a una fiesta con tu amiga? —preguntó confundido.
—Y estoy aquí, esta era la fiesta. 
—¡Wao! Yo te iba a invitar a la misma fiesta. Menuda coincidencia, ¿no lo crees? —rió.
—Sí –sonreí–, ¿con quién viniste? —Empecé a tomar un trago de mi vaso con agua.
—Con mi novia –sonrió–, te invité a ti para que la conocieras. —Y sin poder evitarlo escupí toda el agua que tenía en mi boca.
—¿Qué? –dije seria y, si mandíbula no estuviera pegada a mi cabeza, ya estaría en el suelo—.¿Tienes novia? —Claro, un chico como él no podría estar soltero.
—Claro que... —Niall retuvo una carcajada—. ¡No! –comenzó a reír como loco–, ¡era una broma! ¡Hubieras visto tu cara! —y sin poder evitarlo, comencé a reír yo también.
Y así estuvimos varios minutos, riendo sin razón alguna. Salimos de la cocina y fuimos a la sala
—No, ya, en serio –dijo Niall calmando su risa–. La fiesta es de Zayn, mi amigo.
—¿Conoces a Zayn? –Me sorprendí. 
—Sí, ¿tú lo conoces? –Yo asentí con la cabeza–. ¿De dónde?
—Pues, hace años iba conmigo a la escuela. Él y mi amiga se hicieron amigos, y mi amiga me trajo aquí.
—¿Eres de Mullingar? –preguntó más sorprendido que antes–. Creí que eras de Londres.
—¿Por qué?
—No lo sé, tu estilo parece de allá.
—Pues no. Soy de aquí –sonreí–, pero me mudé a Londres a los ocho años y ahora regresé acá.
—¿Por qué te mudaste?
¿Qué le digo ahora? "Pues verás, porque a mi padre lo metieron injustamente a la cárcel porque se supone que mató a tu madre. Y no aguante las burlas así que me fui a Londres. Por cierto, ¿tienes hambre? ¡Yo sí! Hay que ir por una pizza" ¡Obvio que no le diría eso!
—Por la escuela –mentí.
—Okey –dijo no muy seguro.
—¡Niall! ¡_____! ¡Veo que ya se conocieron –dijo Zayn apareciendo de repente junto a Ale. Niall saludó a Zayn con uno de esos "saludos de machos", y Ale me miró con cara pícara al ver a Niall ahí.
—Veo que tuviste buena compañía en mi ausencia –susurró Ale en mi oreja.
—En realidad, Zayn, ya nos conocíamos desde hace unos días –dijo Niall y Zayn lo miró sorprendido.
—¡Vaya! Trabajas rápido, duende.
—Presenta, maldita maleducada –me volvió a susurrar Ale. Yo suspiré.
—Niall –llamé su atención–, ella es Alejandra. Ale, él es Niall.
—Un gusto —dijo Niall y le ofreció la mano a Ale. Ella la aceptó con una sonrisa.
—Igualmente, Niall. ¡______! Acompáñame al baño, por favor —me tomó de la mano y antes de que pudiera protestar me dirigió al baño.


Novela escrita por Meetzly Espinosa [wattpad: Meeetzly]

Kill or die of love [ADAPTADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora