Capítulo 4

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—Pasa por aquí bonita.

Entré detrás de la dulce señora con uniforme de enfermera que aparentaba aproximadamente unos sesenta años de edad.

El hospital tenía dos accesos, el principal y el de emergencia. Yo había entrado por el segundo por obvias razones (no podía tener contacto con ningún paciente).

Llegamos a la  oficina de la Dra.Martina Clement (amiga de Lenny) y la enfermera dulce de nombre Olive, me dijo que esperara ahí, que en un momento la doctora  llegaría para que habláramos del empleo.

—Buenos días señorita Porter—escuché a la doctora decir mientras cerraba la puerta de su oficina.
—Buenos días.

Estreché su mano.

—Bien,Olive me ha dicho que vienes por el trabajo de ayudante de cocinera.
—Exactamente Dra.Clement.
—La Sra.Vega me ha hablado de ti, dice que eres una chica responsable, puntual y muy solidaria. Te ha recomendado.
—Liv...bueno, la Sra.Vega ha sido muy considerada.
—Deberías darle las gracias —sonrió y comenzó a escribir algo en un formato —¿Has traído el permiso firmado por tus padres?
—Si—saqué el pequeño papel de mi bolso café y se lo entregué a Clement.
—Bien...parece que todo ya está en orden...¿Cuándo empezarás a laborar?
—Mientras más pronto mejor Dra.Clement.
—Empezarás el lunes.
—Perfecto.
—Trabajarás lunes, martes y miércoles.
—Me parece bien.
—Y hablaremos de tu sueldo en cuanto vea tu desempeño.
—Okay.
—Olive, además de ser enfermera, es la cocinera de aquí, así que ella será tu compañera.

Me alegró que una persona tan dulce y simpática fuera a acompañarme todo el verano.

—Bueno señorita Porter eso era todo, disculpe si esto fué muy breve, mi hospital suele mantenerme ocupada y en este momento debo checar el avance de un par de pacientes. Que tenga un excelente sábado.
—Igualmente.

Volví a estrechar su mano con una ligera sonrisa, salí de la oficina y posteriormente del hospital.

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