A Punto De Morir

La Fiesta.

Entré al instituto y de costumbre saludé a todos.

Las horas pasaban lentas mientras yo esperaba el timbre del descanso, Astrid sabía que algo me pasaba y me preguntó
+Hey Ayden ¿que ocurre contigo hoy?
-Astrid, bueno, no sé, no me he sentido bien, solamente quiero una cajetilla de cigarro para desahogarme.
+Ayden, vamos, se que tienes algo por dentro que necesitas sacar, es más. ¿quieres ir a una fiesta conmigo este sábado? Habrán chicas lindas. Decía mientras sonreía y se abrían sus hoyuelos en la cara.
-Está bien Astrid, iré, pero no quiero estar preocupándome de que alguna chica me esté mirando, iré para desahogar todo y ya.
+Vaya Ayden eres una persona difícil, pero vale lo que dijiste, será en un lugar alejado, en un bosque para ser más exactos.

Ése día no quería estar allí sentía que todo el techo de una cueva de 500 mil años cayera sobre mi. Estaba muy pesado, no sé sí era estrés o tensión. Pero tendría una fiesta el día sábado y no tenía ropa para ponerme, Dios, no pregunté a Astrid como era la vestimenta. Pero me iré con algo cómodo.
Los días pasaron lentos y llegó el día de la fiesta, faltaban 9 horas para que Astrid y Zeke vinieran por mi, ése día decidí a dar una vuelta a una playa cercana, después de todo vivir en Milán no era tan malo. Pasé por una tienda y compré 2 cajetillas de Marlboro.
Habían cambiado al chico que siempre veía al comprar, ¿qué habrá pasado con Ismael?
Llegué al mostrador y ví a una chica de unos 15 o 14 años sentada detrás de él, definitivamente ella no trabajaba allí, era de color moreno con cabello negro carbón, ojos cafés y vestida casual, unos Jeans ajustados azules, unas Vans rojas y una blusa blanca con un panda en ella, de veía simpática y notó mi presencia. Volteó a verme y sonrió, le devolví la sonrisa, y una mujer de unos 37 años la llamó diciendo: Katherine, ¿hay clientes, sí los hay atiende tú, yo estoy ocupada? Ella respondió: Está bien mamá, ya Atiendo.
Se acercó a mi y me preguntó que quería.
-Ehmm buenos días, me podrías vender 2 cajetillas de Marlboro.
+¿No eres demasiado joven para fumar? Me miró extrañada y con el ceño fruncido.
-No, no lo soy. Respondí claramente sin sonar muy estúpido ni sonar arrogante.
+Ehmm, toma aquí tienes.
-Gracias linda. ¿En serio? ¿La llamé linda?
+Jeje, y como te llamas, ¿eres de por aquí? Yo soy nueva en ésta parte de la ciudad, me llamo Katherine Miller.
-Yo soy Ayden, Ayden Mendez, sí vivo a unas cuantas cuadras de aquí.
+Ah igual que yo, jajaja que coincidencia.
-Jajaja si, ehm oye, disculpa pero me tengo que ir, quizás vuelva para comprar algunas cosas.
+Está bien Ayden, cuidate, es más ¿si quieres intercambiamos números? Digo, para hablar durante la tarde. Sí es que quieres.
-Está bien Katherine, cuidate igual. Intercambiamos números y salí de ahí, ¿en serio había conseguido un número así cómo así?

Pasé la tarde en la playa viendo el atardecer cuando ví la hora, faltaban 3 horas para ir a la fiesta. Regresé a mi casa y pasé por la tienda como le dije a Katherine. Y ahí estaba, cambiada pero igual de radiante.
+Hola Ayden! Cómo te encuentras, ehmm espero que bien, pero te quería preguntar sí querías ir a una fiesta conmigo, es que no he conocido a muchas personas desde que llegué
-Hola Katherine! Ehm sí estoy bien, y que lástima, me comprometí con mis amigos, pero si quieres salir mañana a comer helados y a dar una vuelta a que conozcas más sería un placer, sí quieres.
+Ahm bueno Ayden me parece buena idea, y que se te ofrecería para comprar.
-Yo te escribiré Kath, ¿puedo llamarte así? Y bueno, no vengo a comprar, venía a hablar contigo para distraerme antes de irme a la fiesta.
+Ah, jajaja Ayden me sonrojas. Se ruborizó al frente mío. Pero sí quieres vamos por donde vivo para acompañarte a tu casa.
-Está bien Kath, vamos.

Yo iba rumbo a mi casa cuando ella me preguntó
+¿Ayden me has estado siguiendo?
-No Kath, sí te conocí fue hoy. ¿Por qué?
+Porque está es mi casa. Señalo a la casa de mi derecha.
-¿En serio? Ésa es la mía, señalé a la de la izquierda.
+Ayden...somos vecinos... Decía mientras una carcajada salía con fuerza.
-Qué coincidencia Kath, demasiada.
+Oye Ayden, seguro que no quieres ir a la fiesta, me vendrán a buscar en 2 horas.
-Seguro Kath, yo voy con mis amigos en 2 horas igual, voy a ducharme y a arreglarme, aunque nos vemos, cuidate Kath.
+Oh, igual Ayden.

Se despidió y pasé a mi casa a arreglarme. No había nadie en casa porque mis padres siempre trabajaban viajando y ésas cosas. Coloqué a todo volumen la canción de "Heart Like Yours" de Willamette Stone.

Cuando ya estaba vestido, no elegí ropa para la ocasión, me coloqué mis Jeans ajustados negros, mis adidas azules y una camisa negra. Llegaron Astrid y Zeke por mi. Y nos fuimos a la fiesta con música de Ed Sheeran con volumen moderable y hacia frío con neblina afuera.
Llegamos a la fiesta en el lugar y encontré a la persona menos esperada para mi. Katherine...