—¿Perdona?
Pone los ojos en blanco.
—No voy a repetirlo. Solo respóndeme.
Miro sus profundos ojos, que al verle mas cerca, y a pesar de la lluvia, puedo lograr encontrar un matiz de color miel alrededor de su iris.
Nado en la miel y avellanas de sus ojos olvidando por completo que me ha estado preguntando algo.
No me sorprende.
Cállate.
—Yo...eh...
Suelta un suspiro exasperado.
—Solo di que sí y ya.
Sí, claro que iré contigo.
¡No!
¡Vamos! Si hasta se te cae la baba, por el tío buenorro.
¡Se ha burlado de mí!
No sería la primera vez.
¡Cállate!
¿Por qué supone que voy a contestarle afirmativamente? ¿Después de lo que me ha hecho?
No soy una persona resentida pero esto es un pisotón a mi dignidad.
Niego rápidamente con la cabeza intentado acallar a mi consciencia que asiente frenéticamente sin pensarlo dos veces.
—No —mi voz sale como un susurro, casi insegura de mi desición.
Sus ojos buscan los míos rápidamente mientras una mueca de confusión de instala en su rostro. Parece que a don buenorro, jamás le han negado algo.
—¿Qué has dicho? —exige.
Me armo de valor para repetirle con mayor seguridad lo antes dicho.
—No iré contigo al baile.
Levanta las cejas.
—Y... ¿Se puede saber por qué? —inquiere con el shock todavía en su sistema.
Wow.
Estoy divertida internamente por haberle sorprendido, y lo más importante es que si hasta parece que le importa.
—Ya tengo pareja.
Su sonrisa de suficiencia cayó por un segundo pero yo lo vi.
—¿Qué?
—Tengo pareja, Hunter.
—¿Con quién irás?
—Con un amigo de la ca... ¿Por qué te interesa saber?
—Me vale mierdas con quién vayas. Quiero saber si mientes.
La lluvia empeora cuando un viento fuerte empieza a alborotar algunos árboles.
Quito mi cabello de la cara.
—Es Trent.
—No le conozco.
—Lo que es un gran punto para él.
Sonríe.
—Claro. Si no le conozco quiere decir que es un pringado. No frecuento ese tipo de gente.
Me cruzo de brazos desafiándole.
—¿Y qué haces en mi puerta entonces?
El silencio que nos invade es algo incómodo. Pero es un gran punto... ¡le he dejado con la boca sellada!
Hasta que vuelve a hablar.
—Por... Lástima.
Mi corazón se detiene por un segundo al escuchar salir eso de sus labios.
—¿La...Lástima?
Asiente con una mueca de superioridad y con las gotas de su cabello chorreando por su rostro.
Estilizo mi columna para parecer intimidante.
—¡Genial! Eso me demuestra que he elegido bien mi pareja del baile. Alguien que no me tiene lástima y que me aprecia de verdad.
Sus facciones se endurecen y entrecierra mis ojos al ver que ya he encontrado mis llaves.
Abro la puerta rápidamente y antes de cerrarla en sus narices, no puedo evitar detenerme en su figura prepotente que ocupa casi toda la altura de mi puerta principal.
Sus ojos me observan de pies a cabeza a la ropa pegada totalmente a mi cuerpo y me sonrojo bajo su escrutinio.
—Sabía que eras una perdida de tiempo.
Y con sus últimas palabras hirientes se retira, desapareciendo bajo el agua que cae fuertemente.
Dejándome con un dolor en el pecho.
Totalmente paralizada.
***
¡Hola!
Tengo una mala noticia para ustedes.... No voy a poder actualizar sino hasta el VIERNES!!!! De verdad estoy saturadisima con las pruebas y subo esto mientras estoy cenando para que ustedes vean!!😂😂
👉🏾No olviden dejar sus votos y comentarios!👈🏽
Espero que lo disfruten! Y q conste q lo subí para no dejarlas tanto tiempo con la intriga😁
Beso
💜
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En Secreto
RomanceMi nombre es Holly. Holly Evans. Tenía 18 años cuando todo empezó; cuando mi vida dio un giro totalmente inesperado. Acostumbrada a vivir en la compañía de su soledad, sin amigos y sufriendo de los maltratos de su peor abusador Hunter Stone. Sus bro...