Honey Bee: XXX.

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En el camino hay un cambio de planes y deciden, por ende, ir a casa de Paul, que en sí era mejor, siempre estaba bastante vacía —Sin contar con las sirvientas chismosas— por lo que facilitaba un millón de veces más el explicar por qué Paul y John iban a la habitación. Entran y John se quita su chaqueta, dejándola colgada en el perchero junto a la puerta, mientras que Paul le jala de la mano para que se apresure. Sobre el oscuro cabello de Paul yace un lindo beanie color café claro, apenas pintado, pareciendo más un blanco olvidado, y John sonríe, dado a que ese gorritoComo él le llamaba a aquel precioso beanie— lo había tejido Mimi para sí misma en las vacaciones de navidad de hace dos años; le hacía mucha gracia el ver a Mimi tratando de hallar el gorrito perdido.

John toma la mano de Paul y la entrelaza con la propia, sonriendo, "En serio lo siento" se disculpa nuevamente.

Paul baja su mirada para no resbalar en los escalones y sonríe, para luego elevar su mirada. Al estar en el segundo piso le lleva a su habitación, jalándole de la mano, apresurando su paso, y al estar dentro de la habitación, Paul tapa la boca de John, mientras le estampa contra la puerta blanca de su habitación.

"Tengamos sexo" pide Paul en un susurro suave.

Éste siente como bajo su mano la piel ajena se calienta rápidamente, y sabe que John se ha sonrojado, por ello Paul sonríe amplio, y al quitar su mano le da un beso en los labios, es acelerado, es sensual y descarado.

John logra apartar por un segundo a Paul, "Dios, ¿Qué sucede contigo ahora?" pregunta tomándole de la cadera y comenzando a besar su cuello.

Hay suaves gemidos saliendo de la boca de Paul, quién sonríe amplio abrazándose a John, "Te necesito" es todo lo que murmura, antes de tomarle del rostro de una manera algo ruda, "No puedes gemir fuerte ni por casualidad, las sirvientas están en casa" susurra y John abre sus ojos de par en par.

"¿Cómo planeas que no gima con esta belleza frente a mí?" pregunta apretando de manera fuerte el trasero de Paul.

John empuja a Paul a la cama, mirando en todo momento a los ojos ajenos, y Paul sonríe de manera inocente, retorciéndose suavemente. John le saca de manera lenta la camiseta a Paul, para luego bajar sus besos desde sus labios hasta su pecho de manera lenta, y en donde sabe que ha dejado besos húmedos sopla aire de manera lenta, sintiendo como la piel de Paul se eriza. Rápidamente John se levanta, y comienza a desabotonar su camisa blanca, mientras Paul se quita sus shorts negros de manera veloz y en menos de dos minutos ambos están sólo en ropa interior. John se abalanza sobre Paul en otro fiero beso, metiendo su mano dentro de la ropa interior ajena y acariciando de manera torpe el miembro ajeno.

Hay un pequeño gemido agudo que hace que John se detenga y se separe de aquel fiero beso, mirando a los ojos de Paul, "Te haré arrepentir de no poder gemir fuerte" jadea y le sonríe de lado, "En cuatro, Paul" ordena de manera suave pero a la vez firme.

Paul acata ordenes, mientras la ropa interior de manera floja se desliza sobre su pequeño trasero, a lo cual John sonríe amplio y da un pequeño beso sobre la parte expuesta de piel.

"Baja tu cabeza" susurra John de forma baja y discreta, "Manten las caderas arriba y baja todo tu cuerpo" murmura y Paul hace su intento, terminando con su rostro sonrojado enterrado en la almohada.

John suavemente quita la ropa interior ajena y al dejar completamente desnudo al otro se dedica a quitarse su propia ropa interior, y no pasa mucho rato antes de que John esté posicionado entre las piernas de Paul.

"Ready?" murmura bajo, con la punta de su miembro rozando la entrada ajena.

"Yes, Johnny" susurra Paul y luego entierra con fuerza su rostro en la almohada.

Lo siguiente que se escucha es un fuerte y agudo gemido opacado por la almohada de parte de Paul, a lo cual John ríe un poco, apenas suspirando, metiendo de la forma más lenta que puede su miembro, escuchando los distintos gemidos de su casi novio.

John se detiene como suele hacer con Paul y decide pedirle algo al otro que cree nunca ha hecho, "Quiero que ruegues" murmura.

Paul apenas levanta su cabeza de la almohada, mientras se sujeta con fuerza de las sábanas, apoyando su mentón sobre la almohada, "¿Qué dices?" pregunta algo aturdido, con sus ojos entrecerrados y sus labios rojos contrastando de manera agresiva contra su piel blanca.

John ríe un poco al escuchar el tono aturdido de Paul y asiente con un uhmhum, "Quiero que ruegues" repite de manera relajada.

Paul suspira y suelta un poco su agarre de las sábanas, "Por favor cójeme durísimo, haz que me arrepienta y que me duelan las caderas" gime en un tono ligeramente desesperado.

John comienza a moverse de manera lenta, saliendo de su cuerpo de la misma forma, entrando de manera rápida y profunda, provocando que Paul gima fuerte al instante, llegando a aquel punto sensible que el menor poseía. John le toma de manera algo fuerte de las caderas, haciendo pequeños "huff" al entrar al cuerpo de Paul, y por parte de éste, se siente en la gloria, sujetándose fuertemente de las sábanas, gimiendo lo más bajo que puede, pero le es inevitable que el sonido, por más que sea acolchonado por la almohada, retumbe contra sus paredes. John, algo cansado ya, decide comenzar a moverse a un ritmo rápido y constante, entrando y saliendo de su cuerpo muy rápido, pero llegando igual de profundo que en la velocidad anterior. De esta manera Paul no puede evitar correrse en pocas estocadas, mientras que John decide salir del cuerpo de Paul —Porque no quiere ensuciarle nunca, es su bebé limpio— y comenzar a masturbarse frente al mismo, moviendo su mano de manera rápida.

"¿Quieres tragar o puedo correrme en tu cara?" pregunta John de manera acelerada.

Paul se sienta sobre sus piernas y cierra sus ojos, esperando el semen de John sobre su rostro, "En mi cara" es lo único que susurra, otorgándole el permiso a John de hacerlo.

John no para de mover su mano rápidamente sobre su miembro, hasta que se corre sobre el angelical rostro de Paul, y verle cubierto de semen le excita, mucho, por lo que decide recordar aquella imagen en su mente, guardarla en su memoria y atesorarla como uno de los mejores días hasta ahora. Mejillas rojas cubiertas de una no-tan-fina capa de semen, labios sojos cubiertos de lo mismo, al momento en que Paul abre sus ojos y nota la mirada fija y penetrante de John sobre sí, se relame los labio, haciendo que John casi pueda sentir su erección volviendo al instante.

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HABÍA DESESPERACIÓN POR PARTE DE UNA FAN cofcofOnlyJalicofcof y ya escribí, que lo disfruten bebitas de mi jart. ♡

—Mr. McCartney. ♡

Honey Bee { McLennon }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora