no caere en tu juego (gemeliers)

capitulo 23 (cap final)

(último cap) (falta el epilogo en un cap aparte)

*Una semana después*

Me tumbo en el césped del precioso lugar en el que nos encontramos. Es un simple parque lleno de hierva fresca y de un color verde que parece darle vida al parque, y un gran lago en medio de el, el cual, sorprendentemente tiene el agua bastante cristalina.

Notó como Dani se tumba a mi lado, y sin necesidad de.irarle se que esta sonriendo.

Me giro para poder observarlo bien; y, efectivamente, esta sonriendo.

Le acarició suavemente la mejilla y el aumente sus sonrisa para después mirarme tan sólo unos segundos y después girar su cuerpo hacia mi.

Me mira con esos profundos ojos marrones, esos que han llenado en mi vacíos inmensos, esos que me han hecho reír y llorar, pero a la vez esos ojos marrones que tanto me gustan, y de los que amo la forma en la que se achinan cuando sonríe.

Me besa la punta de la nariz y yo sonrio, y, sin duda alguna, puedo decir con toda mi certeza, que está es una de las sonrisas más sinceras de mi vida. Por que realmente es así el estar con él. Es como si destruyese la barrera de metal que me he dedicado a crear durante años con una sola mirada, como si me dejase totalmente desnuda ante el mundo y el viniese a cubrirme.
Realmente a sido siempre así, nunca me ha fallado, y, quizás, sea ese uno de los motivos por lo que le quiero tanto.
Aún que ahora que lo pienso, si, me falló una vez. Aún no me creo que se acostase con tal perra, pero, en fin, lo echo echo esta.

Me pongo de pie y le ofrezco mi mano para ayudarle a levantarse, y el la coge con gusto para este charla con fuerza segundos después, lo que me hace sonrreir, quizás excesivamente, pero me siento demasiado bien como para no sonreír.

Después de andar tres pasos escasos tira de mi mano hacia el y me pasa el brazo con el que tenía agarrada mi mano por el hombro, aún con nuestras manos entrelazadas.

-- ¿a donde me llevas? -- la curiosidad invade mi cuerpo y mi sonrisa aumenta cuando responde con un estupido "sorpresa" seguido de un beso en mi mejilla.

Después de unos diez minutos andando me encuentro ante las grandes puertas de un restaurante, pero no un restaurante cualquiera, si no mi restaurante favorito.
Es un poco caro pero la comida que hacen es realmente deliciosa.

Es un restaurante de carne, especialmente a la barbacoa.

Entramos y nos asignan una mesa.

Nos sentamos uno enfrente del otro y echo una ojeada rápida al menú, dudando en por que lo hago si se dé sobra lo que quiero.

Veinte minutos después el camarero se encuentra trayendo nuestra comida e interrumpiendo nuestra animada conversación.

Deja las costillas a la barbacoa enfrente de mi y empiezo a comerme las costillas a una velocidad incalculable, al igual que Dani sus costillas con miel.

Me tumbo en la cama y me tocó la tripa hinchada por las costillas, y Dani repite mi gesto.

Me mira y sonríe.

-- creía que no caería en tu juego -- me río.

-- ¿mi juego? -- me cuestiona.

-- si, tu juego.

-- ¿y que clase de juego era?

-- deberías saberlo tu lo creaste.

-- tu nunca has sido ni serás un juego.

Sonrio al escuchar su dulce voz y le acarició la mejilla.

-- para el mundo somos una pareja más pero si de verdad supieran...

-- la vida es tan sólo un juego -suspiro.

-- lo se -se ríe y me besa.

Y es que así funciona la cosa, yo caí en su juego, y el en el mío, y, algún día, todos caeremos en el juego de alguien.

Si señor hemos llegado al último capítulo de esta historia.

Espero que os halla gustado, pero aún falta el epílogo a su que paciencia.

Se que el final ha sido muy anticipado pero necesitaba acabar esta historia ya por que tengo unas seis historias en borradores y quiero subir alguna a si que necesitaba acabarla.

Muchas gracias a todos por leerla

Xoxo

Att: patri