Capitulo 4

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May Leen pov'

Después de que Finn entró a la casa, salí a dar un paseo. Camino por el bosque, hasta que llego al reino fuego, a donde esa tipa se fue después de casi espiarlo. Me alejo de regreso al bosque. A medio camino, un tipo de fuego se me acercó.

- Hola...

- ¿Qué quieres?

- Vi como seguías a mi hermana ayer, y hoy vienes a mi reino de nuevo... Parece que alguien está interesada en ella.

- ¿Y tú quién eres para juzgarme?

- Aquel que te puede ayudar contra mi hermana...

- ¿y por qué carajos crees que quiero ir contra tu hermana?

- Porque te gusta Finn, ¿no? Pero a él le gusta mi hermana... Y eso siempre será un problema para ti...

- ¿y qué es lo que quieres?

- Un trato... Yo también quiero deshacerme de mi hermana...

- ¿Y cuál es tu plan?

- Hoy en la noche iré a la alcoba de mi hermana y la mojaré, pero eso no será suficiente... de seguro se ira del reino... y ahí entraras tu... ¿puedes hacer que llueva?

- Claro, ¿pero para qué?

- Para que hagas llover y ella no tenga opción más que rendirse o perecer...

Finn pov'

A la mañana siguiente de que Flama llego, preparo un cereal con leche, y para ella unas ramas secas de sus favoritas. Ella sale de la habitación, pero ahora no trae su armadura como anoche, sino su vestido sin mangas, y trae el cabello cayéndole en la espalda. Se ve hermosa. Mientras desayunamos, hay un silencio incomodo, hasta que yo hablo:

- Creo que tu casa todavía está en el lugar donde la dejaste... Sería buena idea arreglarla un poco para que vuelvas a vivir ahí por un tiempo...

- No puedo ir a lugares donde ya haya estado... Flint me perseguiría eternamente a esos lugares...

- Pero sabe que estas aquí, ¿no?

- Lo dudo. Debe pensar que me refugie en algún lugar y me enfrié completamente, pero por si acaso me buscara para saber si estoy muerta o no.

- ¿Y por qué te quiere muerta?

- porque si sigo con vida, puedo regresar al palacio y reclamar mi trono, además de acusar a mi hermano de traición. Eso no le conviene.

- Bueno... ¿y cual crees que sería la primera orden de tu hermano?

- Quemar el Dulce Reino. Creo que debemos de avisarle a Bonnibel.

- De acuerdo.

Después de terminar de desayunar, salimos corriendo hacia el Dulce Reino para advertir a PB.

May Leen pov'

Vi a Finn salir de su casa con Flama. Al parecer se salvó de la lluvia y de su hermano, pero dudo que fuera hacia el Reino de Fuego, pues tomaron dirección al Dulce Reino. Yo corro a avisarle al tipo tenebroso de fuego. El solo se limita a decir que no importara dentro de poco, pero eso no me da buena espina... Nada que tenga que ver con Flamas me da buena espina...

Flama pov'

Cuando llegamos al dulce reino, no nos dejaban pasar los guardias banana, hasta que salió Bonnibel para calmarlos.

- ¿Qué es lo que pasa?

- ¡Bonnibel! ¡Tú reino está en peligro!

- ¿Por qué lo dices?

- Porque mi hermano trato de apagarme anoche. De milagro me salve yendo a casa de Finn.- Ahora que lo pienso, no sé cómo recobre mi calor... y si el hizo... lo mismo que la otra vez...

- Entonces tendremos que hacer una barrera resistente en lo que tu hermano ataca.

Dicho esto, Finn y yo regresamos a la casa del árbol caminando, paseando por todos los lugares cercanos del camino. En cuanto llegamos, una ninfa de agua salió del estanque, mojándome ligeramente.

- ¡Ouch!

- ¡Ay! Lo siento, no era mi intención...- Dijo en un tono hipócrita.- Hola Finn...- Ahora cambia a un tono como de zorra... algo dentro de mi hace que no confié en ella...

- Ah! Hola Leen... Oye, ¿podrías tener más cuidado? A ella le afecta mucho el agua...- Al parecer Finn no se da cuenta de lo que hace esta chica, pero se sigue preocupando por mi...

- ¿Y quién es ella?- Dice de nuevo con su tono de zorra...

- ¡Oh! Cierto... May Leen, te presento a la princesa Flama...

- REINA Flama, Finn...

- Cierto... Reina Flama...

- Mucho gusto...- Dice extendiendo la mano.

-No creo que sea buena idea que se den la mano...- Interviene Finn apartándola un poco.

- Bueno, ni modo... Por cierto, ¿qué hace una reina en tu casa?, ¿no debería estar en su reino?

- Le hago escolta real. Ella siente que está en peligro, y nunca es demasiado para proteger a la realeza, ¿no?- Dice Finn sin problemas... Qué bueno que no le dijo nada de importancia a esta golfa de agua...

- Bueno... Pero ten cuidado Finn, ella es la que quería espiar en tu casa el otro día...

- Si, lo se...- ¿¡Me vio!? Creí que estaba distraído... Qué pena...- Pero era solo porque quería protección, aunque al último minuto no se atrevió a decirme por pena y se fue... Aunque claro, luego me llamo por teléfono...

- Pues ten cuidado de todas formas... Recuerda que el que juega con fuego, sale quemado...- Se vuelve a meter al charco...

Nos metimos a la casa y después de jugar cartas con Finn, el propone:

- ¡Oye! ¿Tu hermano conoce la mazmorra que encontramos la otra vez?

- No, solo tú y yo sabemos dónde está...

- ¡Puedes usarla como guarida hasta que todo pase! De todos modos destrozamos todo lo que hubiera en ese lugar, ¿no?

- Pues podría ser... De acuerdo, vamos a ver si es bueno para quedarme.

El me guía hasta el lugar, pues la verdad no me acuerdo donde queda, pero me acuerdo de como entrar. Una vez dentro, Finn agarra la antorcha y la enciende con mi cabello. Revisamos la mazmorra, y aunque había todavía unos cuantos esqueletos, los vencimos rápidamente. Una vez que llegamos a la sala principal, empiezo a remodelar mientras que Finn busca algunas cosas que le pido. Todo va estupendamente, hasta que eso pasa...

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No te olvidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora