A Miranda le gustan las chicas, como a mi, eso significa que es probable que no me rechace si me llego a declarar ante ella. Pero es que no se si sienta algo por ella, sólo me gusta porque es bonita y es pelirroja, no me tengo que dejar llevar por eso, tiene que gustarme por lo que es, ¿Julieta en que estas pensando?
-Entonces nunca has tenido novia?
-Mm no. Me estaba confesando a una chica que la conozco hace menos de 24 horas.
-Vaya, yo he salido con algunas chicas, nada formal.
-Debe ser genial. Dije abrazando mis rodillas.
-No tanto, genial es cuando estas con alguien que te hace sentir cosas de verdad sabes, cuando sabes que esa persona jamás te va a traicionar, cuando te sientes especial junto a ella. Sonrei y la mire a los ojos, joder son tan profundos. Siento que puedo ver a través de ella, es tan transparente.
-Tienes razón, me encantaría que alguien me haga sentir todas esas cositas en la barriga sabes.
-Lo sentirás.
(...)
Desperté porque sentí algo pesado removerse en mis piernas, de pronto deje de sentirlo, me levanté y no había nada, gire y vi a Miranda durmiendo en el suelo, mierda dormí en el sillón y ella en el suelo, que idiota soy. Vi algo negro y pequeño moverse hacia la cocina, di un paso y asomé la cabeza por la ventana, no se porque pero sentí la necesidad de hacerlo. Camine hacia la cocina y no había nada, estaba empezando a asustarme. Me senté en una de las sillas y mire hacía donde estaba Miranda, y por el rabillo del ojo volví a ver algo negro correr por el pasillo. Fui hacia donde se fue sin ver que demonios era esa cosa, un cosito negro entró al baño, era algo como una ¿cola de cerdito? No se, tome una almohada y entre sigilosamente al baño, no había nada. Corrí la puerta para ver tras ella, y grité como nunca.
-¡AAAAH PERO QUIEN CARAJOS ERES!!?! Me tape la cara con la almohada, cuando me calme un poco volví a mirar y el perrito me miraba con la cabeza hacia un lado. Sonreí ante mi estupidez y levante al perrito, lo acaricie y reí.
-Perdón por asustarme perrito, es que eres un poquito feo. Volví a reír y me senté en el piso. -Por cierto, como te llamas?
-Ginebra. Gire rápidamente y vi a Miranda despeinada, apoyada en la puerta sonriendo. -Perdón si te asusté, buenos días.
-No pasa nada, bonito nombre. Miranda acarició a Ginebra y yo sólo la mire. -Buenos días bonita.
(..)
-Julieta se puede saber donde demonios te metiste esta vez?
-Estaba en el centro comercial y vi a una chica que conocí en el aeropuerto, me acompaño a comprar una cámara y luego me invito a dormir a su casa eso es todo. Me senté en la mesada y tome una galleta.
-Deberías haberme avisado Julieta, estaba preocupada. Asentí mientras masticaba mi galletita y mire a mi madre. -Por cierto, hoy vendrá tu padre e iremos a inscribirte en la escuela.
-Para que? Dije con la boca llena, mi mamá me fulmino con la mirada y yo sonreí.-No quiero ir, ve tu.
-Irás quieras o no, además también debo anotar a tu hermana.
-A Elena?
-Tienes otra?
-No lo se, anda a saber si en uno de sus viajes de negocios papá preño a algunas gatitas. Dije marcando la frase "viaje de negocios"
-Julieta basta de tonterías.
-Elena ya va a la escuela? Esta aquí?
-No, aún está en preescolar. Si está en su cuarto durmiendo.
-Que pequeñita. Dije burlandome, mi madre volvió a fulminarme con la mirada y yo bufe.
Me baje de la mesada y fui a la habitación de mi hermanita. Abrí la puerta y me acosté a su lado mirando la bola de pelos que estaba allí.
-Eli levantate ya o me tumbare arriba de tu estúpido gato.
-Basta Julieta déjame nomir. Dijo con dificultad lo cual causó que me riera y que ella me empujara. -Y a el tambien.
-Vamos levantate, te llevaré por un cupcake quieres?
-Siii!! Pero de vanilla.
-Esta bien será de vanilla, dije pronunciando mal la palabra como ella. Hoy tenía ganas de pasar todo el día con mi pequeñita, así que le invitaría un snack.
-Mamá! Iré con Eli a la pastelería! Dije gritando para que me oyera.
-Esta bien, pero vengan antes de la una.
-Meno mamá. Respondió.
*Ginebra en multimedia*
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En la mente de Julieta (EDITANDO)
Teen FictionEn la ciudad de Granada, España. Se encuentra Julieta Amelí, una adolescente despreocupada de la vida social y rebelde sin causa. Conoce a Miranda, en una cafetería y queda completamente enamorada de ella...¿Será capaz de aceptar lo que siente?¿Mira...