Heart With Thorns

Capítulo #2: "Frio Corazón"

"Yo no elegí cruzarme en tu camino, y no quería que te cruzarás en el mio. Simplemente diste vuelta todo"

Había llegado a su salón y diviso un solo asiento vacío. Oh bueno si había mas vacíos pero de un solo lado y siempre fue demasiado tímida como para entablar una conversación. Tomo su cuaderno de la mochila, era tan viejo que las hojas ya estaban amarrilentas. Comenzó a dibujar unas margaritas. Ese cuaderno era el recuerdo de su abuela, la cual falleció hace 3 años. Le había contado que ella también lo utilizo para dibujar y quiso continuar con aquel uso. Todos los bancos comenzaron a llenarse, menos el de su lado. Pensó que era una cuestión obvia, nadie la conocía allí. Y además quien querría hablar con una pobretona como ella.
Ya había llegado su profesor y su lado continuaba vacío.

"Señorita Deeben, venga a presentarse por favor" Oh dios nunca se había presentado. Paso al frente del salón un poco nerviosa y titubeante. "Soy Amy Deeben y mm tengo 18 años" Tuvo la cabeza gacha todo el tiempo. Los murmuros comenzaban a molestarle ya.

"Muy bien señorita Deeben sientese. Si es todo lo que tiene para decir." Camino rápido hasta su asiento. Se abofeteaba ella misma por se tan tímida. Se escucho una puerta abrirse fuertemente y una respiración agitada. Era un chica rubia de cabello largo que venía despeinada y la ropa desacomodada. "Tamara Woods ¿Que escusa tiene el día de hoy?" Rodeo los ojos desesperado parecía que no era poco común esa situación.

"El autobús no pasaba" Sonrió inocentemente. Luego de varios revoloteos de ojos mas y miles de escusas la dejó pasar. Se acerco así el único asiento vacío que había en todo el salón. "Oye ¿Puedo sentarme aquí?" Le susurro un pequeño "Claro" la muchacha era muy animada a comparación de ella. Coloco sus cosas en el asiento y se quedo observándola un tiempo. "Hey, ¿Eres nueva verdad? ¡Oh! Soy Támara Woods. Bueno ya debes saberlo por lo de recién supongo"

A las personas en algunas ocasiones temían siquiera sentarse en las mesas que estaban a su alrededor. Tenia un aura negra indestructible a su alrededor. La única persona que logro irrumpir el aura de Andrew es Chris. Christian Butler otro ricachon heredero de una gran empresa de instrumentos musicales, "Parquer" el nombre de su bisabuelo. Era alguien igual a Andrew, los mismos pensamientos, ideas y enfermizo egoísmo. Pero uno se creía superior al otro. No se creían tan siquiera parecidos. No eran amigos por conveniencia pero compartían un par de ideas y eso los unió en un principio.

"Me entere que hoy alguien te enfrentó, ¿Verdad?" Lo miro con una ceja en alto. Realmente era innecesario preguntar su cara lo decía todo, tuvo un disturbio. "Valla, tiene agallas el que lo hizo."

"Si, si las tiene." No lo miro desde que se sentó con el. En lo único que continuaba su atención era en el libro y en su café amargo. "Bueno supongo que no me conoce. Es nueva o tal vez hoy recién aparece en la universidad. No lo se."

"La única chica nueva que a llegado hasta ahora es Amy Deeben." Como presidente del centro debía saber quien entraba o salia de allí. Tenían excelentes notas ambos, hasta por eso competían "No te preocupes. No es nada pesado, una chica ordinaria." Chris tomo un papel de una carpeta azul y comenzó a leer. "Becada, huérfana y..." No lo dejo que terminara de leer ya se sentía demasiado furioso.

"Suficiente ya se como hundirla." No lo dejo terminar de hablar, no permitiría que una cualquiera le quitara su orgullo. "Quien se cree esa, ya vera"

"Por cierto, me entere que afrontaste al gran Dollovan." La miro burlona pero con una pizca de seriedad que ella noto. "Valla que agallas tienes"

"No son agallas. Solo es coraje por como me trato." Fruncio el ceño realmente molesta. "Se cree el rey del universo o que le sucede." Amy dio otra mordida a su sándwich. Consiguió que le dieran una tarjeta para almuerzos gratis en la cafetería.

"Es comprensible que te allás defendido y todo eso. Pero tren cuidado Amy." ¿Cuidado? ¿A que se refería? "Me refiero a que Dollovan hace mucho con tan solo mover un dedo. Su padre a aportado mucho dinero a la universidad para eventos, reparaciones y todo eso, y como no quieren perderlo le cumplen todos los caprichos a sus hijos."

"¿Hijos?"

"Hijos. Son dos hermanos Andrew y Jade. Oh Dios, Jade es un cielo, un ángel pero no se puede decir lo mismo de su hermano." Suspiro suavemente y bebió un poco de la malteada que tenia. "Hace ya un año, Jeremy Visser era el rival de Andrew Dolovan. Cuando ocurrió su conflicto mas grande entre ambos, expulsaron a Jeremy. Aunque el no allá tenido el mas mínimo de culpa de lo que sucedió. Fue notorio que fue un pedido que pasase aquello, porque Jery tenia un gran promedio y una conducta excelente." Se limito a no contestar, no podía creer que hubiese alguien tan malvado en el mundo. "Ups y no te dije lo de Rose, ella era una empleada de la cafetería. Un día el vino a pedir un café, y cuando Rose se lo llevaba a su mesa se lo volteo encima. Fue un accidente tonto pero le costo en trabajo. Además de haberla dicho miles de barbaridades ese dia , ella fue despedida a la semana de allí." No contesto nuevamente, no sabia tan siquiera que decir sobre aquello. Támara no dejo que contestará y ya volvió a hablar. "Oye se que es apresurado pero, ¿Me acompañas hoy en la tarde al centro comercial? No quiero ir sola y tengo que comprar un regalo." Hizo un puchero a lo que de río. Era tan agitada y alterada, no se detenia un segundo.

"Lo siento tengo que cuidar a mis hermanos."

"No importa traelos" Toco la campana y se levantó rápidamente y le estiro su mano. "¿Vamos?" Susurro un si entre dientes y camino junto a ella. Vio al muchacho sentado en el otro lado de la cafetería. ¿Porque su corazón era tan frío? ¿Que lo hizo así?

"¿Que tanto piensas?"

"¿Que persona tiene el corazón para hacer todo eso?"

"Andrew Dollovan, cariño."