Encontrando la tarde contigo [CREEK]

Capitulo 4: Objetivo del día

Me dirigí al "trabajo" con un objetivo en mente después de casi semana y medía de pensar en lo mismo: Aclarar las cosas. Después del espectáculo de ayer, no pude dejar de pensar en las cosas que he hecho con Tweek sin compromiso. Hemos hecho cosas que no son de amigos. Y nosotros no somos específicamente "amigos", no se ni siquiera a que se le puede llamar lo que "somos".

¿Por qué debemos encasillarnos en cada cosa que hacemos?

Lo quería, si, pero también quería a mis demás amigos.

Toda la tarde me mantuve alejado de la mirada de Tweek, que tan nerviosa podía dañarte de tan verdes que sus ojos eran. Canicas mojadas a la luz de una lámpara al atardecer.

-¡Craig, un cliente!- me despertó de la cursilería el señor Tweak con su timbre amable. Inconscientemente me gire a ver a mi "novio" listo para que le entregara el condenado papel.

Pase tragando saliva mi nerviosismo y sin decir una palabra, le entregue el estúpido papel. Me miro con un dejo de confusión, será por el hecho de estar ignorándolo más de lo normal. Después de fijarme en sus ojeras moradas, me retire pensando en la reacción que podría tener al dejar de ser novios. Era como cuando los niños se casaban en el Kinder sin saber siquiera lo que la palabra "matrimonio" era; De esa manera me sentía justo ahora.

Tweek siempre fue inmaduro, a pesar de sus paranoias por prácticamente cualquier cosa, nunca había mostrado curiosidad, rechazo e incluso aceptación en esta "relación" que el pueblo nos había hecho consumar, simplemente no lo hacía al menos en mi cara. Pero yo sabía siempre lo que pensaba, lo que sentía. Lo sabía todo de el.

También podría ser, que yo soy el inmaduro aquí.

No había rastro de Matt o Trey. Mejor para mi, cada vez que venían me hacían pensar cosas que no quería.

Pero eso significaba que mientras más temprano acabáramos, más tempano hablaría con Tweek. Y aunque no lo admitiera, me daba cierta turbación tenerlo frente.

-Señor Tweak- interrumpí al hombre que lavaba los platos, había entrado a la cocina.

-¿Qué pasa?- sin dejar de mirar los platos, parecía no importarle mucho lo que le pidiera

-¿Puedo adelantarme con Tweek?- la monotonía en mi voz era evidentemente tentada por la tensión de mi cuerpo. Dudaba de lo que iba a hacer.

-Claro- contesto simple haciendo su labor. Dejándolo, me dirigí a donde su hijo, paciente que esperaba a su padre.

-Vamos- hice un ademán con la cabeza a señal de irnos

-Pero...

-Nos adelantaremos. Tu padre lo sabe- mi vocabulario se vio afectado incluso, vaya sorpresa

Me hizo caso y decidió acompañarme, salimos juntos de la cafetería con el aire meneando la abundante cabellera de mi compañero. Después de unos días, acostumbraba irme lo más tarde posible, dependiendo de los clientes; cuatro, seis, ocho de la noche... Hoy eran las 8:00 PM, y las estrellas habían hecho su trabajo de pintar el cielo. Oh, eso de leer antes de dormir me esta afectando.

Caminamos por la acera más iluminada, que conducía al parque principal de South Park. Solo, a causa de la poca población-

-¿Q-Qué hacemos a-aquí? !GAH!- la confusión era obvia en su rostro, miraba a todos lados levantando su naricita. Justo como un cuyo.

-Solo sentémonos...- me dejé caer en el columpio más elevado, obviamente cediéndole al rubio el que se ajustara a su tamaño.

Separados únicamente por dos cadenas que sostenían los columpio. Estuvimos un rato con la vista al suelo, elevándonos y llenándonos del chirrido que hacían los metales.

El ascendía más alto cuando yo aumentaba la velocidad. Quería empezar una guerra que sabía era su intención al ver la risilla tímida que dejaba escapar de sus labios.

Sin mirarlo, empecé a elevarme mas rápido riendo sin querer. Era inevitable ocultar que nos estábamos divirtiendo al arrojar carcajadas, unas más graves que las otras. Su cabello se revoloteaba con el viento que el mismo provocaba, pareciendo estar bajo el agua cada vez que sus ropas se unían al baile de sus hilos dorados.

Vi su rostro sonriente con las mejillas rosadas y estas contagiaron las mías.

¿En realidad quería dejar ese puesto especial que me unía a Tweek? Días pensando sobre el.

No pensaba en el como pensaba en mis amigos. Yo quería abrazar a Tweek como Matt y Trey, besarnos como mis padres, hablarnos como Romeo y Julieta, vivir como mis abuelos; Siempre.

Dios... ahora era tan claro como el agua.

No sabía si con Tweek estaría toda mi vida, pero esta noche deseaba adueñarme de el por lo menos lo que restaba del día.

Mis risas se habían detenido durante esos pensamientos haciendo dudar al menor que yo por solo meses.

-¿C-Craig?- no quería escuchar su voz, porque sabía que me encendería los sentidos

Me levante de mi lugar con un solo objetivo, esta vez, diferente al que tenia por la mañana: Besar a Tweek.

Esta vez dejare de pensar donde encasillarnos, solo nos quería juntos sin importar los demás.

Me miraba confundido al caminar hasta estar frente a el, no entendía, o simplemente no quería pensarlo.

Suspire sintiendo el calor de su cuerpo cuando se paro de inmediato, había rozado nuestras ropas ahora que nuestros cuerpos estaban más cerca que nunca.

Podía tener una vista "HD" de su rostro blanquecino que no ayudaba en nada en calmar los latidos de mi corazón

Aproxime mi labios a los suyos, solo tenía que agacharme un poco.

Al estar casi tocándose nuestras bocas, ocurrió lo que hizo frenar mis pensamientos.

Si, Tweek Tweak había rechazado mi beso.  

Wow, tardo mucho en subir pero... no creí que tuviera unas cuantas visitas. Gracias por los comentarios c: Recomendaciones, criticas, mensajes "x"... Todo me hace feliz :D