4 de Julio

Capítulo 8: Verano de amor.

Se apoderaba de Alejandra eso a lo que llaman amor. La velada en el cine fue indescriptible... mágica. Pasaron los días y Carlos fue a la casa de Sebas, ya que a Ale le tocaba estar ese finde con su padre. Era el cumpleaños del pequeño Sergio, hermano menor de Candela, quien cumplía 7 años.

            -¡Bueno, Alejandra! No te quejarás. ¡El lote que os disteis en el cine! Un poco más y os quedáis secos. -rió Carlos.

-Sí... Y lo haría una y mil veces más. Cómo lo amo.

-Se veía venir, Ale. Desde que os vi tan juntitos en el autobús del concierto en Ávila me olí algo.

-Y bendito autobús, jajajaja.

-Al menos, el amor te sonríe.

-¿Qué pasa, Carlitos?

-Es que yo... -comenzó a tartamudear- Yo-yo... también estoy, ya sabes... enamorado. Jo-jo... qué corte.

  -¡Uy, uy! ¡Cuenta, cuenta!

-Eres la primera a la que se lo cuento, así que estate calladita... es que-que yo... me gusta... Estela. Sí, la hermana de Vicky.

-¡Qué dices! ¡Era la última que me esperaba! ¡No te pega nada!

-Habló la que está enamorada del mayor enemigo que ha tenido nunca en el conservatorio... Las cosas del amor...

-¡Sh! No me hagas sentir mal. Pero de verdad... ¡Tú y Estela! ¡Ay, que os como! ¡Qué fuerte!

Esa misma noche Carlos se quedó a dormir en la casa. Al día siguiente habían quedado para callejear por Madrid. Ya que Carlitos sabía tanto de la familia de Jaime, puesto que su hermano era novio de Eva, podría enterarse mejor de cómo era esa familia. Ella estaba muy interesada en saber sus costumbres, en saber sus opiniones, en saber cómo vivían... quería integrarse en esa familia tan amplia.