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Positivo. Las líneas silenciosas me gritan a la cara mi peor temor. Venia sintiéndome mal, me caían mal cosas que adoraba comer, ni si quiera soportaba el aroma a huevos revueltos que siempre me había encantado. Marianne fue la primera en notarlo y la primera en obligarme en hacerme el test de embarazo o mejor dicho tres test. Me puse a temblar. Creí escuchar la voz de Marianne desde el otro lado de la puerta pero no podía reaccionar. Lo siguiente que supe es que ella estaba abrazándome. Siempre consolando mis desastres emocionales.

_ tranquila nena no estás sola, Tyler y yo estaremos contigo y con el pequeño frijol_ me susurra acariciando mi cabello.

_ dios Marianne... nunca imagine esta situación, Cameron lejos, mis padres presionándome a casarme con algún idiota de su preferencia y ahora un bebe en camino... no sé cómo voy a sobrevivir..._ murmure entre lagrimas

_ lo harás porque eres fuerte nena, porque eres una fuerza de la naturaleza y una chica hermosa y autosuficiente y que tiene amigos patea traseros_ me dice Tyler desde la puerta y me hace sonreí

_ vamos a tomar algo _ dice Marianne levantándome. Tome las pruebas y las deje en el cajón. Verlas hacia todo más real. Sentándonos en mi sillón Tyler trajo dos cafés y para mí un te tranquilizante.

_¿ vas a decírselo a Cameron?_ pregunto Marianne seria

_ el dejo claro que nunca vio en su futuro una esposa y una familia asi que es algo que tendré que enfrentar sola_ digo pensativa

_ quizás si lo sabe cambiara su opinión, de todos modos creo que deberías hacérselo saber y que él decida al menos sabrás a qué atenerte y no te quedaras preguntándote que habría pasado si..._ dijo Tyler siempre tan centrado

_ sabes estoy de acuerdo con la perra. Creo que deberías decírselo_ dice Marianne sorprendiéndome

_ lo pensare..._ susurre recostándome en el sofá, me sentía agotada y entristecida.

Dos días después tome coraje.ayer fui a hacerme una ecografía que confirmo que estaba de ocho semanas. El tiempo exacto desde que había estado con Cameron la última vez. No podía viajar a Japón porque tenía demasiadas responsabilidades y en estos dos meses desde que Cameron se había ido me concentre tanto en el trabajo que me olvide de mi misma y tome más de lo que podía manejar. Así que Marianne tomo el control y delego algunos trabajos a otros de los decoradores del grupo para aliviarme la presión. Tome aire y calcule la hora en Japón. Cameron había salido de una reunión y no tenía nada mas esta noche así que supuse que estaría en su habitación. Marianne me había conseguido los datos y el interno para no tener que pasar por recepción. Marque el numero con la mano temblando. Respire profundamente mientras conectaba y marcaba el tono

_ Hable_ respondió la profunda voz de Cameron

_ Cameron soy Gwen _ dije y escuche su respiración pesada

_ dime_ dijo secamente

_ necesito decirte algo delicado_ digo tragando la emoción en mi voz.

_ te escucho_ dice secamente de nuevo

_ estoy... estoy embarazada..._ digo con la mayor valentía que puedo, se hace el silencio del otro lado_ ¿Cameron?_ pregunto con miedo a que haya cortado la llamada

_ estoy aquí_ responde frio de nuevo_ no entiendo porque me llamas para decírmelo_

_ estoy de 8 semanas sucedió la última noche que estuvimos juntos_ digo tratando de ponerlo en situación. Silencio de nuevo.

_ no sé qué esperas que haga ¿quieres dinero para abortar o quieres dinero para ocultar que es mío?_ pregunta fríamente de nuevo y mi corazón se destroza un poco mas entonces escucho otra voz en la habitación

_ Cameron cariño ¿vienes a la ducha? me siento sola_ y la rabia me embarga

_ no necesito nada de ti, no quiero nada de ti, solo quería que lo supieras, puedes olvidarte del tema_ digo enfurecida y corto la llamada.

Mis manos tiemblan. El teléfono empieza a sonar pero me desentiendo. Tomo mi cartera y mi abrigo y salgo. No le digo a nadie nada. Solo quiero estar sola y llorar mi rabia para después salir adelante. Mi celular suena. Es Cameron. Mi rabia me impide atender por dignidad. No destruyo mi teléfono porque no estoy en posición de comprarme otro así que rechazo la llamada. Vuelve a sonar y lo vuelvo a rechazar. Ya dijo todo lo que tenía que decir y escuche todo lo que tenía que escuchar.

Todo el amor que sentía por Cameron Collins se transformo en un odio profundo e intenso.