Esta parte está escrita por hemxmo1996 🌞Michael recordaba perfectamente como conoció a Luke ; fue un día de invierno en el cual tenía mucho frío pero este se fue en cuanto lo vio. No lo conocía, nunca antes le había hablado pero aun así sentía muy dentro de él una extraña atracción, un deseo de estar a su lado, sentía que eran el uno para el otro. Y no se equivocó.
Tres años, dos meses y un día duro su relación, una relación perfecta. Pero todo tiene que acabar en algún momento. Ya no recuerda por qué terminaron, es como si todo lo que transcurrió en ese tiempo se haya borrado de su memoria. El psicólogo le dijo que sufrió una amnesia retrograda, eso significa que algunos de sus recuerdos preexistentes se han perdido, le dijo que su mente bloquea ese tiempo transcurrido para no evocar algo traumático. Lo único que logra recordar es el sentimiento de melancolía, siente que le derrumbaron su mundo y ya no podrá volver a reconstruirlo.
De eso ya han pasado tres años, dos meses y un día. Tres años en los que Michael no ha podido recordar nada pero tampoco ha podido olvidar, tres años de dolor, de angustia, de llantos por las noches, tres años sin esperanzas.
Pero hoy por primera vez en mucho tiempo se encontraba feliz, estaba completamente feliz, una felicidad inexplicable y lo irónico es que se encuentre así justo hoy, justo el día que decidió acabar con su vida. Ya tenía todo planeado, incluso anotó los planes en su agenda hace ya un año, anotó la fecha exacta, el día exacto, el lugar exacto. Nada podía salir mal.
Michael sonrió de lado y se miró al espejo por última vez. Lucía fatal, su cara estaba demacrada: ojos rojos producto del llanto interminable y con ojeras, cara delgada por no comer lo suficiente y pelo desteñido. Decidió hacer algo con su aspecto, no podía permitir que vieran su cadáver en estas condiciones.
Se duchó, perfumó y tiñó el cabello azul –el color favorito de Luke-. Durmió las ocho horas necesarias para lograr borrar esas molestas y horribles ojeras, se vistió con su ropa favorita. Ya estaba listo.
Toco sus labios tratando de recordar como se sentían sobre los de Luke, trato de revivir el mismo sentimiento que tuvo a su lado. Pero no lo logro, no logro sentir nada. Acaricio su cabello tratando de recordar cuando Luke enrollaba los dedos en este, pero aún no sintió nada. Quería más que cualquier otra cosa en el mundo sentirse a su lado, quería poder abrazarlo y preguntarle por qué, por qué su relación tuvo que terminar tan pronto, por qué algo tan perfecto tuvo que finalizar.
Lloro por última vez mientras miraba la hora "Ya es el momento" pensó, "Hoy es el día, no puedo arrepentirme"
Bebió media botella de whisky mientras se daba un baño, idéntico a los que se daba con Luke. Encendió velas alrededor de la tina y puso música relajante. Sonrió, por fin se sentía en calma. Tomo una pastilla, cinco pastillas, diez pastillas y ya comenzó a perder la cuenta hasta que el envase se acabó.
Se comenzó a sentir algo mareado. Tomo una navaja y corto sus muñecas viendo como el liquido rojo manchaba en agua, pero no lograba sentir dolor, solo paz. Sentía que estaba flotando en la nada y luego sintió que caía a través de un agujero oscuro y mientras daba su último aliento recordó todo, recordó los suaves besos de Luke, recordó sus hermosos ojos azules, más azules que el cielo de primavera, más azules que un lago sin inmundicia. Y recordó la razón de su rompimiento y lloró. Lloró por ser tan insensible al olvidarse de la muerte de Luke y centrarse solo en la suya. Recordó las palabras de él pidiéndole que siguiera su vida, que fuera feliz y diciéndole cuando lo amaba. Recordó como murió, recordó el funeral, recordó todo.
Deseó dejar lo que estaba sucediendo, deseó no haber cometido esta estupidez, deseó cumplir lo que le prometió a Luke y seguir adelante. Pero no pudo, de un momento a otro todo se volvió en completa oscuridad y acabó.