Capítulo 03.

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Sky entra a la casa de Justin, encontrándose con todas las luces apagadas, dándole a entender que su novio ya debe de estar durmiendo. Comienza a caminar lento, tratando de no hacer ruido, pero su propósito de no hacer ruido falla en el momento que se tropieza con unas cuantas cajas. Gruñe, ya frustrada por eso, y enciende la luz, frunciendo el ceño al ver que con lo que ha tropezado son maletas y no cajas.

Y así, con el ceño fruncido, dolor de pie por el golpe y la gran duda de a quién le pertenece todas esas estúpidas maletas, sube a la habitación de su novio.

Todo rastro de enojo, dolor y duda desaparecen de su ser al encender la luz de la habitación y ver a Justin dormir como un ángel, porque eso es lo que él es: un ángel.

Camina hacia el lado de la cama donde él duerme y se sienta en el suelo, a contemplarlo, a guardar todos los detalles de su bello rostro en su mente.

—¡Oh mi dios! ¡Se ha rapado! —susurra, asombrada.

Muerde su labio inferior mientras que comienza a acariciar la cabeza rapada de Justin. Las rastas que tenía antes le encantaban, aunque a la vez le disgustaban, pero ahora lo ve rapado y mentiría si dijese que no le gusta, porque le encanta como le queda.

—¿Te gusta? —pregunta en un susurro el oji-miel, tomando por sorpresa a Sky.

La castaña le mira, encontrándose con una pequeña sonrisa en el rostro de su novio.

—Me encanta —admite, con una gran sonrisa—. Creí que estabas dormido —se pone de pie para poder subir a la cama, bueno, más bien para poder sentarse en el regazo de Justin, admirando lo hermoso que se ve desde ahí.

—Estaba descansando la vista —bromea, tomando de la mano a su hermosa novia y entrelazando sus dedos—, ya sabes, para poder admirarte aún más.

Sky suelta una gran carcajada, acto que hace sonreír a Justin, hace varias semanas que no se reía tan naturalmente de algo que él dice.

—Shh... Charlotte está durmiendo en la habitación de al lado.

Y esa frase es suficiente para que la sonrisa desaparezca del rostro de Sky, dando paso a un ceño fruncido, otra vez en lo que va de la noche.

—¿Y qué mierda hace ella aquí? —gruñe, tratando de controlar sus ganas de comenzar a golpear todo, absolutamente todo.

—Ella ha discutido con su padre y no tiene donde quedarse, no tiene nada. Llegó aquí prácticamente pidiéndome alojo y no pude negarme, ella es una de mis mejores amigas —explica el oji-miel, bastante nervioso.

—Tú eres mío —se inclina para poder besar sus labios—, eres mío y no te comparto con nadie, ¿okey? —comienza a besar el cuello del castaño, sabiendo que es su debilidad— Y no creas que no me he dado cuenta de la manera en la que ella te mira —ahora muerde y lame el cuello de su novio, con el propósito de dejarlo marcado.

Justin no dice nada, simplemente suelta varios gemidos y toma la cadera de Sky para hacer que se mueva, frotando su intimidad contra su pene, completamente excitado. Algo que solo ella logra en un par de segundos.

Sky suelta una risita al notar lo excitado y desesperado que está Justin. Rápidamente ataca sus labios, a la misma vez que comienza a moverse, por cuenta propia, sobre la erección de él.

Entre besos y caricias, comienzan a sacarse la ropa, hasta que quedan completamente desnudos y bastante excitados.

—Quiero que me folles como si no hubiera un mañana —susurra Sky, en el oído de Justin, antes de morder su lóbulo.

Y, como todo lo que la castaña le pide al oji-miel, se cumple. Porque para Justin, los deseos de Sky son órdenes. 

¡Espero que les guste! 

Voten y comenten que me hacen feliz <3.

Abusive GirlfriendDonde viven las historias. Descúbrelo ahora