capitulo 4: Pequeñas discusiones

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La chica no se movió de lugar.
-¡Muévete de una vez, idiota!-volvió a gritarle ruki

-¿Qué pasó?-balbuceo la joven bastante desorientada

-¡En serio! Por enésima vez quítate del medio estas deteniendo el tráfico

El vocalista la vio pararse a su lado mientras aún sonaban las molestas bocinas, su subió a su automóvil y lo aparcó fuera del camino de los demás.
Volvió a bajarse apoyándose en la puerta, dando un gran suspiro, sacó las gafas de sol que tenía adentro del auto y se las puso, si esa chica era una fan seguramente ya lo habría reconocido.

Ella lo estaba mirando con atención y el le hizo una seña para que lo siguiera, viéndola de cerca la joven era un poco más baja que el, cabello rojizo y ojos celestes.

-¿eres idiota o que?-.

-¿disculpa?-dijo ella

-estabas parada en medio de la calle, ¡Por tu culpa casi te atropelló!-el pelinegro volvió a elevar la voz

La joven abrió la boca y se quedó unos segundos así como si estuviera analizando lo que le diría al cantante.

-lo siento-lo dijo como si fuera una pregunta

-y bien un autógrafo bastará para actuemos como si nada hubiera pasado-.

-¿Qué?-pregunto con una cara de desconcierto

Suspiro y decidió terminar con esta situación de la mejor manera posible, la chica lucía triste como si estuviera a punto de llorar, pero según ruki ella estaba fingiendo.

-bien un autógrafo y trecientos yenes.
Suficiente para ti- trato de sonar calmado ya que había perdido la paciencia hace muchos minutos atrás

La joven abrió la boca completamente sorprendida y a la vez se sintió ofendida.

-no necesito el dinero de un desconocido-dijo ella con la mandíbula tensa

La ignoró y busco un lápiz junto con un papel en la guantera de su auto, para acto seguido plasmar su firma en el. Sacó los billetes justos desde su billetera y le tendió su mano derecha con la firma y el dinero.

-no quiero eso, viniendo de alguien como tu-. Lo miro directamente a los ojos

El vocalista se dio cuenta de que la chica no era una fan, pero aún así le siguió insistiendo.

-puedes subastar mi firma por Internet, de seguro te darán una buena cantidad de dinero por ella-.

La chica lo miraba con una expresión sería, miro hacia otro lado ignorando al pelinegro.

-rápido, no tengo todo el día-dijo el, al ver que la joven no aceptaría las cosas que le ofreció metió el dinero y la firma en el bolsillo de la chaqueta de cuero que poseía la pelirroja.

Ruki miro el rostro de la chica quien desprendía enojó por sus poros, en cierto modo ver a la chica a punto de estallar en rabia le hacía sentir satisfacción, una pequeña sonrisa traviesa surco los labios del vocalista.

Volvió a su auto sin mirar atrás deseando nunca volver a encontrase con la pelirroja, aunque ella no deseaba lo mismo.

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Llegó un cuarto de hora más tarde de lo solicitado a la ps company, y al entrar rápidamente a la sala de ensayos pudo ver que ahí estaban aoi y kai, este último tenía una cara extremadamente sería para el gusto de ruki.

-matsumoto, acercarte tengo algo que preguntarte-dijo kai

De seguro estaba enojado con el vocalista ya que cuando lo nombraba por su apellido significaba que algo hizo mal, se acercó al líder preparándose para un sermón.

-donde está yukio-pregunto el castaño claro

-la despedí-contestó con simpleza

-¡Como que la has despedido!¡Te has vuelto loco!-kai había estallado en enojó-yo contrato asistentes y tu las despides

-no necesitamos una asistente personal kai-respondió el cantante

Kai iba a volver a reclamarle pero aoi lo detuvo diciéndole que se relaje y respire.

-me estoy cansando takanori matsumoto, ya es el quinto contrato que anulas-gruño el líder ignorando las palabras del segundo guitarrista-¿Cuál es tu problema?

-no quiero una asistente kai-respondió ruki mirándolo con coraje- no necesito una

El castaño apartó la mirada masajeando sus sienes, mientras que aoi contemplaba la escena como si fuera el fin del mundo.









True Promises [The Gazette]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora