¡Aléjate Jones! [EDITANDO]

Capítulo 14

Aaron Pov's

  La semana transcurrió más rápido  de lo habitual.

Sin pensarlo ya estaba en la última clase de la semana.

Luego, tendría que ir al entrenamiento de Lacross y sería libre todo el fin de semana o eso era lo que pensaba...

  Al salir del establecimiento fui a los vestidores, a prepararme tanto física como  mentalmente para no sacar mi parte extraña en el entrenamiento y por otro lado para no ahorcar al entrenador por su forma tan especial de tratarnos.

[...]

  Una vez en la cancha el entrenador y su más preciado objeto, el megáfono, nos dijo que debemos correr 30 minutos al rededor de está mientras hacíamos pases con el compañero que eligiésemos a unos 4 metros de distancia el uno del otro.

  Como castigo a los que fallaran, es decir a los que se les cayera la pelota, tendrían  que correr 1 hora más y hacer dos veces los  ejercicios dados por él.

  Una vez cumplidos los 30 minutos, dio la orden de que debíamos hacer 120 abdominales por reloj, 200 flexiones de brazos, para luego correr 10 vueltas al rededor del campus cargando en la espalda a un compañero e ir rotando por cada vuelta.

  Para finalizar el entrenamiento, hizo que tiráramos a la  portería, el primero en lanzar fui yo, que por única vez no destroce la red del palo del portero.

  Cuando pensaba que iba todo bien en el entrenamiento, mis vista se nubló por completo y en lugar de ver el campo de entrenamiento vi a una chica que se introducía en un callejón sin salida, no entendí de que se trataba y seguí con lo mío, pero con el pasar de los segundos  nuevamente aparecieron estas imágenes, pero esta vez reconocí a la chica, era Emma Blake, estaba en peligro.

[...]

Sin dudar ni un segundo más, solté el palo y comencé a correr a la salida, ignorando los llamados del entrenador.

Subi al vehículo y salí lo más rápido que pude al lugar donde había visto a Emma
 

[...]

  Una desesperación indescriptible invadia todo mi cuerpo a medida que me aproximaba al lugar.

Estacione el Jepp justo en la entrada del callejón donde esos tres buscaban a Emma.

Al bajar inmediatamente oí las aberrantes cosas que querían hacer con ella y la ira se apoderó de mi.

  Ella intentó golpear al negro pero éste fue más rápido y le quitó el fierro lanzándolo lejos , el  segundo uno morocho se acercó a ella e intentó tomarla de la cintura.

Es maldita acción fue suficiente como para hacerme intervenir.

- Sueltala. - mi voz sonó como una advertencia más que como un pedido y mis ojos estaban cargados de odio, estos pasaron sobre Emma y dije.

-Sube al auto, ahora- asintió, en sus ojos se notaba lo asustada que estaba.

Justo en el instante en el que comenzaba a dirigirse hacia en Jepp, el pelirrojo la tomó del cuello y la estampó contra la pared provocándole un gran golpe en la cabeza..

No me contuve más y toda la fuerza en mi interior se  descargo contra el mal nacido, a quien empuje con tanta fuerza que voló lejos de Emma, fue a parar  al final del callejón. Me acerqué a ella preocupado y le ayude a ponerse de pie repitiéndole por segunda vez que se suba al Jepp.

Una vez que ella ya se encontraba dentro del vehículo, fui por los dos restantes quienes me doblaban en tamaño, pero eso no me impidió que les diese una buena golpiza a ambos.

Primero me apróxime al tipo de color quien intento golpearme pero fui más rápido y le proporcione un golpe en el estómago derribándolo y dejándolo sin aire en el suelo.  

Cuando iba a darme vuelta para buscar al otro sujeto,  éste me golpeó con una tabla en la espalda, solo sentí como ésta se rompió sin hacerme daño alguno.

Volteé mi cabeza invadido por la ira, con los puños presionados y los nudillos blancos a mis costados.

Sentí como algo en mi interior se removía, como si un golpe de electricidad se extendiese por mi torrente sanguíneo, me di cuenta que algo de mi había salido a la luz, una parte que debía mantener oculta. Y que precisamente se veía reflejada en mis ojos

Esto les causó pánico, podía verlo en sus rostros, ambos levantaron sus manos en señal de rendición, retrocediendo lentamente para alejarse lo más posible de mi e ir a buscar al de cabello rojizo quien intentaba ponerse de pie.

Respire profundo y di media vuelta caminado al Jepp, al entrar, me tome unos segundos para calmarme.

- ¿Te encuentras bien  ?- pregunte observándola con detenimiento.

-...si...- el miedo y la duda  dominan su voz, respiró hondo para luego decir- Gracias-.

- No tienes porque dármelas - dije para encender el motor del Jepp, en el momento en que iba a salir de ese lugar, los idiotas mundiales salían cargando al pelirrojo por los hombros, para divertirme un poco decidí asustarlos amagando con el auto como si fuese a aplastarlos como las cucarachas que son, estos dieron un salto del susto. Hice  marcha atrás para tomar camino a la casa de los Blake...

[...]

Llevábamos algunos minutos en  el auto en completo silencio, hasta que Emma lo rompió y preguntó confundida

-¿Como me encontraste?-se giró levemente a verme.

-Eso no es lo importante en este momento Blake - que se supone que debía decirle "lo vi en  una visión mientras estaba en  el entrenamiento"  no, no iba a decirle eso, si estaba confundida con esa respuesta iba a confundirla más, mi vista seguía en el camino - pero dime... ¿Que hacías ahí a esta hora?- pregunte un poco molesto.

- Volvía de la biblioteca a casa- respondió de lo más segura.

-¿Sola? - dije algo sorprendido y molesto a la vez.

- Si- volteó su cabeza mirando por la ventana,pensando seguramente en lo que había sucedido minutos atrás.

Mientras tanto, yo solo pensaba en si ella habrá notado que algo andaba mal conmigo.

[...]

Cuando me estacione frente al edificio donde vive decidí hablar, ya que ella estaba tan sumida en sus pensamientos que no había notado que ya habíamos llegado.

- Llegamos- anuncié sin apartar la vista del frente,  volteé a verla de reojo y note que asintió con la cabeza dispuesta a bajarse, cuando de repente dijo

- Gracias, otra vez - dijo con la voz un poco cansada.

Me volteé para verla pero las palabras no salieron de mi boca y solo hice un ademán con la cabeza.

Cerró la puerta del auto y salió camino a su edificio. Esperé a que entrara, para asegurarme que estuviera a salvo y recién ahí tomé camino a mi casa

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Emma en multimedia.. 👆👆