EASE. (Gay) [Editando]

V

«Tell me all of the things that make you feel at ease»

("Dime todas las cosa que te hacen sentir en paz")

Me acuesto de vuelta en mi cama con la intención de volver a dormir, aunque mi cerebro parece seguir procesando información o algo, ya que no logro concentrarme para hacerlo. Intento relajarme y cerrar los ojos, pero mi mente tiene otros planes y comienza a reproducir imágenes no muy deseadas, así que decido escuchar música y leer un rato para recuperar el sueño y distraer mi mente.
Conecto mis audífonos al celular y pongo nuevamente la música en modo aleatorio, luego saco mi libro del cajón al lado de mi cama y enciendo la lámpara que se encuentra al centro de ambas camas.
Comienzo a leer, centrado en las letras del libro en mis manos, pero lo dejo cuando mi celular está cerca de quedarse sin batería, coloco el separador en la página que me quedé y al dejar el libro en la mesita escucho la voz de Asher.

—No puedes dormir, ¿huh?-pregunta con un tono muy tranquilo.

—No, parece que no.

—Lo lamento.

—No es tu culpa, está bien.-respondo, aunque en realidad, en mi mente no está nada bien, y es su culpa.

—Cuando yo era pequeño y no podía dormir, mi mamá siempre lograba que lo hiciera. Si quieres, puedo intentar ayudarte...

—Uhmm.... yo, no estoy seguro, Asher, en serio, estoy bien.

—Puedes decirme Ash, es más cómodo. Y aunque no estés seguro te ayudaré, será mi forma de agradecerte por lo de hace un rato.

—De acuerdo.-acepto su ofrecimiento aún con dudas.

—Bien, ¿listo?-asiento como respuesta y luego continúa.-acuéstate y ponte cómodo, deja todo a un lado, tus preocupaciones, tus miedos, tus inseguridades, tus secretos, tus problemas, todo aquello que te moleste, déjalo de lado por un momento y relájate.

Apago mi celular con batería casi nula y lo pongo a un lado junto con todo lo demás. Me centro en él, toda mi atención se va a lo que dice.

—Ya que estés cómodo, cierra los ojos y no pienses, escucha mi voz y concéntrate en eso nada más, si hay más ruido, no lo escuches, ignóralo. Ahora, imagina todo aquello que te hace sentir tranquilo, tu familia, algún lugar que te guste, lo que sea que te haga sentir bien, relajado, tranquilo...

Su voz comienza a oírse lejos, como si con cada palabra que dice retrocediera, pero no es así, estoy seguro.

—Imagina que ese lugar en el que piensas es aquí, estás en una habitación, tu habitación, sólo estás tú allí, sólo estamos nosotros aquí, imagina que por un momento, todo está bien. No hay nada de qué preocuparse. Todo estará bien. Aún si tu mundo se desvanece, todo estará bien después, alguien te ayudará a armar tu mundo de vuelta...

Las palabras dejaron de ser claras y comprendí que realmente me había ayudado. Ahora puedo dejarme llevar por los sueños...