El Comienzo

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Todo es rutinario para mi, me levanto, tomó el desayuno, me ducho, me pongo mi uniforme y camino hasta el Instituto, la misma historia de siempre, repitiéndose una y otra vez, de lunes a viernes...

Mis únicos acompañantes, durante el camino al Instituto son mi par de audífonos, pero vamos ¿¡Que más puedo pedir!?. Combinando mi gran imaginación con el poder de "Welcome To The Jungle", imagino un mundo de caos y destrucción, donde los zombies abundan en todo lugar, entonces al sonar esa canción, entró yo, manejando un Jeep lleno de sierras, mientras a toda velocidad corto zombies...

Hasta que llego al Instituto donde es "prohibido" utilizar audífonos, a pesar de mi imaginación un poco infantil, yo soy uno de los mejores estudiantes del Instituto, tengo notas excelentes, una capacidad de deducción muy buena y claro una imaginación capas de todo, bueno aunque todas las cosas geniales están por dentro no?

Por fuera...Bueno...por fuera soy una persona, mido 1.75, no soy muy alto, estoy pasado un poco de kilos, pero bueno no se notan, no estoy obeso, mi cara bueno... lo que se ve a través de la inmensa capa de acné que la cubre, es un poco amorfa, aunque he pensado que sin todo este acné, sería guapo...
Bueno, pero ese no es el caso.

En el Instituto vamos de 7:00am a 17:00, una jornada larga y repetitiva, cansada pero un tanto divertida, ya que junto con Leo y Tony, hacemos reír a los demás de nuestro grupo, nosotros no somos muy populares, pero yo conozco a casi todo el noveno grado, ya que soy tan "sociable" que de una u otra manera los conozco.

Leo, Tony y yo tenemos dos amigas de confianza Jane o Mini como acostumbramos decirle y Rosie, la gran rosie, juntos somos un grupo de perdedores, que no hacen más que reírse de todo a todas horas, pero para mi esa diversión acaba a las 17:00, la hora de ir a casa...

Por eso cada vez que puedo pasar tiempo con mis amigos los disfruto demasiado, ya que no soy sociable y no hablo con nadie además de ellos, en el Instituto soy el "nerd" al cual todos los profesores piden favores, lo cual me acojona demasiado, ya que gracias a eso siempre estoy ocupado.

Al salir del Instituto, mi camino a casa es largo, por lo cual muy aburrido, pero eso no importa gracias a la música, que me acompaña, ya se suena demasiado deprimente que después del Instituto mis únicos amigos sean mi par de audífonos, pero bueno, siempre terminamos acostumbrandonos a todo, no?

Mi vida fuera del Instituto es muy solitaria y aburrida, al llegar a casa, ya está la comida preparada, así que ceno, luego tomó una ducha, hago las tareas, juego videojuegos y por último, mi favorito, encerrarme en mi cuarto en esa profunda y pesada oscuridad, pensando, imaginando y obviamente escuchando música...

Siempre al final de la misma rutina, yo me quedaba dormido, nunca recordaba lo que soñaba siempre era lo mismo de siempre... pero esa noche ocurrió algo que nunca vi llegar.

Esa noche soñé, pero era un sueño muy real, me veía a mi mismo, observando delicadamente al mundo, y como lentamente se volvía mas peligros, yo me encontraba en un edificio muy alto, al parecer era un hotel, había una televisión en la cual transmitían las noticias y en el noticiero hablan sobre cómo el agua cada vez iba disminuyendo más y más, de pronto senti ganas de ir al baño, por lo cual me dirigí directamente al cuarto de baño, en el había un espejo donde vi mi reflejo, y pense, si tan solo esta mierda se quitara de mi cara... y Puff la mierda de acné se fue... no podía creerlo la verdad me veía muy apuesto, de pronto en las noticias dijeron algo que me impactó mucho:

-Noticiero: Noticia de última hora, muchos jovenes han sido encontradas muertas a lo largo del territorio, lo más extraño es que murieron mientras dormían, ¿que será lo que ocurre?¿y porque sólo afecta a los adolescentes?, veanos en nuestra próxima edición en el canal 9...

Al terminar el noticiero extrañamente desperté, y aún mejor era hora de alistarse para el Instituto, me senté al borde de mi cama a razonar sobre lo que había soñado esa noche, no podía creer lo real que había sido ese sueño, ni tampoco lo apuesto que me veia sin la mierda de acné.

-Pero bueno, ya va siendo hora de levantarse -pense

Me dirigí directamente al baño donde al entrar hay un espejo, me miré y seguí mi camino hacia la ducha, pero había notado algo muy raro... el acné en mi cara había desaparecido.

-Por dios! No podía creerlo -pense, y que pasaría si todo en el sueño es real?, Naaaah -dije
Sólo es otros sueño mas, esto es solo una gran coincidencia.

Pero lo que yo no sabía, era que nunca en mi vida había estado tan equivocado.

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