IMAGINA DE CARLOS

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Estabas en la boda de tu mejor amiga. Habías ido con Carlos, tu novio desde hacía dos años. Dos maravillosos años en los que te había hecho la mujer más feliz del mundo. Cada día que pasaba le amabas más y cada día a su lado era más especial que el anterior. Estabas emocionada, porque se casaba tu mejor amiga, pero que para ti era como una hermana, ya que llevabais muchos años siendo amigas. Después de la ceremonia, os fuisteis todos al banquete de la boda. Todo fueron risas durante la cena, porque os sentaron a todos los amigos juntos en la misma mesa. Después de la cena, llegó el baile. Cuando bailaron los novios, empezaron a bailar los demás. Carlos te abrazó por la cintura desde atrás. Carlos: ¿Bailamos?Tú: Vale - sonreíste. Era una canción lenta, así abrazaste a Carlos por el cuello y él te abrazó por la cintura. Acurrucaste tu cabeza en su hombro y bailasteis al ritmo de la música. Estuvisteis un rato bailando. Después, Carlos se fue a hablar con el novio que también era amigo suyo y tú te fuiste a hablar con tu amiga. Un rato después, Carlos llegó hasta dónde estabas hablando con tu amiga, te cogió de la mano y te puso en el centro de la pista, le hizo una señal al DJ para que parara la música y todo el mundo se quedó mirando a Carlos. Tú: Carlos... ¿qué haces? - dijiste, nerviosa.Carlos: Quiero decirte algo, aquí delante de toda esta gente - empezó, diciendo -. Llevamos juntos poco más de dos años y quiero decirte que cada día que he pasado a tu lado ha sido más maravilloso que el anterior y que no cambiaría por nada del mundo el haberte conocido - te emocionaste -. Por eso, quiero pedirte algo - se acercó a ti.Tú: Dime - viste cómo se arrodillaba y ya te suponías lo que iba a hacer, por lo que te pusiste a llorar más de la emoción.Carlos: Quiero compartir todos los días junto a ti, quiero que seas la madre de mis hijos, quiero que nos hagamos viejos juntos... ¿quieres casarte conmigo? - dijo, sacando una pequeña cajita donde había un anillo.Tú: ¡Claro que quiero! - se levantó del suelo y tú le abrazaste. Cuando os separasteis, Carlos te puso el anillo y te besó dulcemente en los labios, mientras la gente empezaba a aplaudir. Os separasteis y le hiciste una señal a la gente para que te prestara atención -. Has dicho que quieres que sea la madre de tus hijos, ¿verdad?Carlos: Sí - dijo, un poco confundido.Tú: Pues espero que la vena paternal te vaya saliendo pronto.Carlos: ¿A qué te refieres?Tú: Estoy embarazada, Carlos - sonreíste.Carlos: ¿Qué? - dijo, un poco emocionado. Sonreíste más y le abrazaste. La gente volvió a aplaudir y, después, cada uno siguió a lo suyo porque la música volvió a sonar. Saliste con Carlos fuera para que pudierais hablar mejor. Carlos: Me has hecho el hombre más feliz del mundo, mi amor.Tú: Pensé que no te gustaría la idea de ser padre ahora.Carlos: Me encanta la idea de ser padre. Sé que ahora no podré estar mucho tiempo a tu lado y al lado del bebé, pero intentaré estar lo máximo posible.Tú: Eres el mejor, mi amor.Carlos: Tú me haces ser el mejor, princesa.Tú: Te amo, Carlos.Carlos: Te amo, preciosa - os acercasteis y os disteis un tierno beso. Después de estar un rato más los dos solos, volvisteis a la fiesta, a seguir disfrutando de la noche con todos vuestros amigos.

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