Dorkable.| Kim TaeHyung;BTS.

s i e t e.

Llegó el día sábado, un repleto día de estrés y nerviosismo. Mamá y mi hermana decidieron tomar el avión un poco antes para poder arreglar algunos asuntos previa a la instalación de MinHa en China. Eso significaba que iba a estar sola varios días, MiJiun , mi madre, no quería dejarme sola e incluso intentó convencerme de acompañarlas para limar asperezas con Sunggyuk, mi padre, pero me negué rotundamente e hice un escándalo para sacarle esa absurda idea de la cabeza. Yo a él no lo quería oír ni ver; Nunca más.

―Entiendo que te pongas triste y te amo, ¡Te amo mucho! Eres mi hermana mayor. Te amo.―Lo repetí varias veces en un intento desesperado por convencerla de desistir de esa petición.―Pero no puedes pedirme esto, esto no, por favor, no voy a hacerlo.

―JiYoon, conozco a los chicos, si les decía algo iban a comenzar a llorar, especialmente HoSeok, ¡Sabes lo sensible que es!.―Hizo una mueca, echando la maleta azul dentro del auto mientras yo la acompañaba. ―Y si llora HoSeok, Jimin también lo hará y luego Tae-

―Vale, vale.― La corté, suspirando. Tenía razón sobre eso, hubiese sido una reacción lagrimal en cadena.― Entiendo, tus amigos son unos bebés llorones. Pero lo que no entiendo es... ¿Por qué te vas así? Pareciera que estás huyendo de Seúl, de nosotros, de mamá...-

Fue muy rápido, en cosa de dos días iba a estar en China, donde habían costumbres distintas, comidas distintas, gente distinta. Quería pensar que lo hacía por su futuro , porque sabía de lo que era capaz pero algo no me calzaba y no sabía bien qué. Ganó una beca pero estaba segura de que había visto una carta de una universidad prestigiosa de Seúl en la basura, ¿Por qué China entonces? 

― No huyo, hermanita, no lo hago.―Aseguró, tomándome de las manos con su semblante calmo de siempre.― Es una excelente oportunidad y la tomaré. Despedirme nunca me ha gustado y lo sabes bien. ―Eso era cierto, desde pequeña odió las despedidas. Supongo que el hecho de que papá nos dijese "Me voy para siempre" cuando salió de casa nos marcó de maneras distintas. ― Además papá quiere redimirse y eso es genial. Quiero darle un chance y si yo puedo, ¿Por qué tú no?

Eso era simple de responder. Escuchar de él me asqueaba, pensar en él discutiendo con mamá me enrabiaba, ver sus fotos en la habitación de mi hermana me daba ganas de quemarlas, estuve a punto de hacerlo un par de veces... si no lo hice fue por respeto a ella.

―Porque lo odio.-Respondí, seca.― Está muerto para mi, está lejos y muerto. Fin de la discusión.―Sabiendo que no iba a cambiar de opinión, asintió con la cabeza.

―Está bien. Pero sigo pensando que no puedes vivir amargada y reticente con él toda la vida, mi linda Jiyoonnie. ―Acarició mi mejilla con ternura.

―¿Ah no? Pues, mírame hacerlo. ―Entornó la mirada y por un momento me pareció verme a mi misma. Ella y yo si nos parecíamos físicamente , la diferencia estaba en que yo era más delgada y unos centímetros más alta.

―Uh, eres un caso, enana. ― Me abrazó y sonreí correspondiendole mientras pensaba en lo mucho que iba a extrañar a mi hermana.― Trato de darte buenos consejos pero es en vano. ¿Por qué nunca me escuchas? Solo quiero tu felicidad.

―Ah, ya, deja que maneje las cosas a mi manera.― Le pedí, algo hastiada de esa conversación. Mamá en ese momento salía de la casa con otra maleta más pequeña, su bolso y una expresión triste.

― Esta era la última. ― La oí decir.

― ¿Por qué no quieres que las acompañe al aeropuerto?―Traté por todos los medios de convencerla de ir a despedirlas allá, podía llamar a MinBong y así no incluir a sus amigos en el triste panorama pero ambas se negaron.