¡YO QUE TÚ LO SUPERO!

*PROLOGO*

Hoy me desperté más tarde de lo habitual, me estiré y me volví a recostar hasta que recuerdo que día es hoy.

—Will, a desayunar—dice mi madre desde abajo.—

—Ya voy—bajo lo más rápido que puedo hasta la cocina.—

—Sabes que día es hoy ¿verdad?—mi madre deja un plato con tostadas y huevo.—

—Claro que lo sé, hoy es el día en que se decide mi futuro—muerdo la tostada, sabía que pasaría hoy, pero a la vez de estar emocionado estoy asustado, qué pasaría si alguna de las chicas no logra entrar, no podría perderlas, menos ahora que es un paso importante para mi vida y mi futuro, no, no me arriesgaré, haré lo posible por mantener mi cabeza ocupada en otras cosas.—

Hoy es el último día que tomó el auto bus, bueno en realidad el penúltimo pero eso no le quita la importancia.

—Will ¿está ocupado?—pregunta Andrea señalando el asiento junto a mí.—

—No, descuida, no está ocupado—Mi voz tiembla, por qué me e puesto tan nervioso, a si, tal vez porque me e querido declarar hace 2 años y soy tan cobarde que no puedo.—

—Estas muy callado—ella logra sacarme de mis pensamientos.—

—No lo había notado—si claro, esa ni yo me la creía, parecía una momia al lado de ella.—

—Hola Will—siento las voces de las chicas y me relajo, significa que se pondrán a hablar de cosas de chicas y yo podré ponerme audífonos y relajarme por lo que queda de camino.—

—Will pensé que hoy le dirías—Lizzy susurró en mi oído, lo se, pero no puedo, me trabo y después termino por hablar solo estupideces.—

—Si, voy a decirle solo tienes que esperar.—

Al llegar todo era tranquilo, las mismas clases de siempre, no quería irme, han pasado tantas cosas que tal vez hasta me agrada este lugar.

—Señor Grey, su celular—la profesora Marinetti extendió su mano y tuve que pasárselo sino llamaría a mis padres y ya estoy algo grande para eso.—

—Bien como les decía, el gobierno de Lenin y el gobierno de Stalin tienen sus semejanzas, ¿alguien podría decirme la más importante?—en ese momento Lizzy fue la única en levantar la mano, pero señaló a Rebecca, el ser más despreciables de la tierra, solo a los profesores les agrada por sus buenas notas y por qué tiene familiares en esta institución.—

Por fin tocaron la campana y la profesora me entrego mi celular, vi la hora y ni siquiera había pasado la mitad del día, tal parece que se hará eterno, suspire y continúe mi camino hasta los casilleros.

—¡¡¡WILL!!!—Eve venía corriendo hacia mí como si su vida dependiera de ello.—

—No corras por los pasillos, puedes chocar con alguien—en ese momento ella choca con el profesor de matemática.—

—Te lo dije—corrí a ayudarla y claro al profesor también, este, rojo de ira se llevó a Eve con el a detención.—

—Valla tu amiguita no tiene mucha suerte, jajajaja—ríe maliciosamente Rebecca, como es posible que en la tierra haya seres como ella, en ese momento quise golpearla pero me volvería como ella y no quería eso, me dirigí a la sala de biología donde me siento al lado de Lizzy, parecía estar tranquila pero a la vez aburrida de tanto esperar a que el profesor llegase.—

Fui por mi delantal, las gafas para no quedar ciego y algunas soluciones químicas, hoy veríamos el PH de algunos líquidos.

—El repollo hervido huele horrible—me queje y Lizzy comenzó a reír.—