Only with you

CAPÍTULO 17

¿Qué? ¿Cómo? ¿Por qué? ¿Zayn ya no está prometido? Eso significa que tengo alguna opción ¿no? O bueno, que puedo llamarlo y... ¿Pero y si me odia? Seguro, seguro que me odia por romper su compromiso. Pero si me odiase seguiría adelante con lo de la boda ¿o no? Bale Marel para, admítelo, no eres lo suficientemente lista como para sacar una conclusión en claro en tan poco tiempo. Relájate.

Bale, empezamos de nuevo. Zayn ya no está prometido, y según Louis, es por mí. Ahora dos opciones, es por mí porque siente algo, o por que me odia. Mi cabeza voló sin previo aviso a aquel odioso martes, aquel martes en el que le dí la espalda al amor. Todabía recordaba perfectamente lo que Zayn me dijo:

"Es solo que... cuando decidí venir a verte para decírtelo, no sabía todo lo que significabas para mí, todos los sentimientos que produces en mí. Pero después de decírtelo y de sentir que te perdía y que lo haría para siempre, me dí cuenta de que me importas más que nada, más que nadie. Por eso estoy pidiéndote esto, sé que para tí también significaron algo esos minutos que nos pasamos mirándonos, porque si nó, no llorarías. Y solo espero que digas que sí, que me esperarás y que lo intentaremos, los dos, juntos."

Y yo lo único que fuí capaz de decir fue no. Una simple sílaba que lo dijo todo, pero que a la vez me dejó sin nada.

Bien, primera pregunta respondida. Pero venga ya! ¿Es que me estaba convirtiendo en retrasada? Para responder una sola pregunta había tardado como una hora entera, ya que ya habíamos llegado a la playa. Sin decir nada bajé de la camioneta y abrí el maletero. Louis y Harry hablában animadamente, supongo que al ver que yo no respondía simplemente pasaron de mí y siguieron hablando entre ellos.

- Has traído neopreno, ¿verdad Marel?- Pregunto Louis quitándose la camisa y quedando en bañador. Tengo que admitir que no estaba mada mal... Puff!! Menudo día pasaría yo entre Harry y Louis! Sonreí e intente pensar todo lo rápido que podía.

- Ee... sí, creo que sí!- Saqué mi bolsa del maletero y empecé a rebuscar hasta que dí con el.- Aquí está!- Me quité la camisa y los shorts y por el rabillo del ojo ví como Louis se quedaba a cuadros. Harry le dio un codazo mientras sonreía y asentía como diciendo que tenía razón. Hombres! Ven un cuerpo bonito y un poco trabajado y ya pierden la cabeza! Me metí en el neopreno y cogí mi tabla.- ¿Vamos chicos?

- Bueno yo no voy a entrar, me quedo en las toallas.- Dijo Harry, que se había puesto unos pantalones cortos como de deporte blancos, una visera negra hacia atrás y gafas de sol de aviador.

- Bueno vale, ¿vamos Louis?

- Claro pequeña!

Los dos corrimos al agua dejando a Harry tumbado en la arena, como nó, mirando su querido móvil.

Había buenas olas, lo admito, pero me quede un rato sentada en la tabla para poder mirar bien su altura y fijarme un poco en las corrientes.

- ¿No vas a coger ninguna?- Preguntó Louis mirando al horizonte en busca de una buena ola.

- Si claro, pero estaba viendo un poco por donde van las corrientes y todo eso, pero tú tranquilo, coge la siguiente, pronto te seguiré!- Me sonrió en respuesta mientras se giraba y empezaba a remar para poder coger la ola que venía. La cogió y se subió a la tabla. La verdad, menos mal que se la daba bien cantar, porque el surf no era su fuerte. Si se dedicaba a esto como hobbie no estaba mal, pero que no intentase pasar de eso, porque futuro, tenía poco. Me reí mientras remaba para coger una buena ola que venía.

Y por fín, después de más de una semana agobiada, sin surfear y deprimida, el final de todo ese sufrimiento vino en forma de ola. Volví a sentirme yo misma, volví a aclarar todas mis ideas. Seguía cabalgando esa ola mientras reí como una loca, literalmente. Menos mal que no había nadie al rededor (obvio), porque sino ya me veía metida en un psiquiátrico. Cuando acabé de surfearla y volví a tumbarme en mi tabla oí algo en la playa, y ahí estaba Harry, saltando, aplaudiendo y gritando como loco. Me reí y me dirigí a donde Louis se encontraba y al llegar el también hizo lo mismo, aplaudía y gritaba como loco y sin previo aviso se me lanzó encima haciendo que los dos nos hundiésemos.