Capítulo 5

27 2 0
                                    

El que lea esto capaz se confunda o quizá se sienta identificado y piense como yo, o capaz que nadie lea esto y estas escrituras queden en una caja y cuando sea anciana las encuentre y las lea, o esto puede terminar quemado o en la basura. Yo esto no lo hago por la fama, ni por moda ni nada de eso, sino que lo uso como ayuda, como una descarga para sentirme mejor y poder expresar libremente mi pensamiento y mi sentir. Agradezco a la vida por tener la capacidad de escribir y razonar porque si no escribiría quizá no tendría forma de hacer mi propia terapia y conocerme a mí misma.

Las letras fluyen y el tiempo se acorta cada vez más, apoderándose de mi mente y de mi razonar, realizando en mí una sensación inexplicable pero aunque quizá no sea creíble, real.

Veo y siento cosas que no se si existen, si son parte de la realidad o simplemente están dentro de mí.

Adolescentes perdidos en la droga, que no pueden vivir de manera sobria y ponen como justificativo que la realidad no es agradable; no se dan cuenta que su realidad, esa que dejaron en manos de la droga, es muchísimo peor que la verdadera realidad.

Metas que te propones y no las logras porque te rindes a la mitad del camino, personas que quieren hacer una cosa pero hacen otra para no ser discriminado y ser aceptado. Cosas sin sentido como estas, cosas que la sociedad formó, vidas que el hombre destruyó.

Me despierto, siento que no puedo respirar, pero aún lo hago. Las personas me miran de arriba abajo sin conocerme, pero yo sí las conozco. Hoy me doy cuenta que el peor enemigo que podemos tener es uno mismo, hoy me doy cuenta que soy mi propia enemiga.

La vida a veces es como la matemática, a veces si te equivocas en un mínimo detalle arruinas un todo, en la matemática se puede arreglar borrando y volviendo atrás para arreglar el error, en la vida eso no sucede.

Mucha injusticia junta, enfermedades terminales para aquel que no la merece. Pero un día me puse a pensar porque la gente se muere, sea por una enfermedad o no, y llegué a la conclusión de que todos tenemos una fecha de vencimiento, que todo tiene un fin, si no tuviéramos este límite ¿Que sería de nuestra vida?, quizá nos convertiríamos en asesinos, delincuentes, o cosas peores cuando no lo somos.

Personas sufriendo, gente inocente muriendo. Las personas que hacen o hicieron el mal nunca se dan ni se dieron cuenta que luego de su diversión la van a pagar, nunca se dieron cuenta que después de lo bueno siempre viene lo malo. Hoy disfruto como personas causantes de mi sufrimiento, sufren.

Si yo soy mi propia enemiga, lo contrario a mi seria mi mejor amiga? Es increíble como la mente se engaña a sí misma, ya que nosotros somos nuestra mente.

DementeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora