Beginning

3.

Mientras el recordaba cómo había la había visto por primera vez.

Justo esa misma sonrisa mientras ella se arrodillaba frente a una capilla. La capilla de su madre. Estaba hablando con su difunta madre.

Mientras ella conversaba con su madre, escucho el chillido de la ventana a un lado de su casa abrirse, aquel extraño habia abierto las ventanas de par en par para dejar entrar el aire fresco de primavera.

Este sonrío ampliamente cuando la pequeña de una coleta le miro fijamente, levanto su mano saludando y así, fue como se conocieron.

Tiempo después, ese mismo niño jugaba con ella sujetando su mano con fuerza, sudorosa y con una enorme sonrisa en su rostro, ambos corrían por el césped cortado del parque mientras soltaban risas insaciables, tantas, que se quedaban sin aliento. 

Casualmente, se veían todos los días desde ese momento en el mismo parque.

— Hace tiempo que no pasábamos por este lugar –dijo con cierta nostalgia- me trae muchos recuerdos.

Ciertamente, el lugar estaba lleno de recuerdos, tantos que no él no podía evitar sonreír con ternura al recordar a la niña de la coleta alta tomar su mano con fuerza para no caer mientras la empujaba con velocidad.

Ese era el comienzo de todo para los dos, y el final para uno.

— Vamos, -menciono sosteniendo su mano- tenemos que correr.

Pero qué persona tan cruel era él.