Un día, como cualquier otro, Nechi estaba tomándose un café, pero eataba intranquilo, se le acababa el tiempo, llegaría su hora muy pronto, y él lo sabía.
Tiempo atrás, le había hecho una petición a una estatua. Quería ser un gato, y se lo concedió. Su sueño era saltar de tejado en tejado para ver la luna y las luces de la ciudad, muy parecidas a las estrellas. Sobretodo vigilar a su familia, porque simplemente le gustaba.
Iba a cumplir los 18 años, y su sueño se iba a hacer realidad.
Al final, los cumplió y, desde entonces, aquel hombre convertido en gato, vigila por las noches desde el tejado.
ESTÁS LEYENDO
Mini'st
De TodoEste libro es una recopilación de historias cortas originales mías (de Tanachii). Trata de temas varios que se me ocurrían en mi tiempo libre y algunas tienen un aire similar, ya que escribo como escribo y eso hace mi 'propio estilo' de cómo ambient...
