Digimon Gold & Silver ·For Another Day·

Capitulo 3: Mundo Digital

Eran alrededor de las 20:30 horas en la zona central oeste de Japón, la gente aún se mantenía en las calles como cualquier sábado por la noche en Osaka cuando una enorme estática afecto gran parte de las pantallas de anuncios en Dotonbori, así como varios aparatos de la enorme ciudad. Todo seguido de un ligero apagón que duro algunos segundos antes de que todo volviese a restablecer se, a pesar de ser algo extraño que comúnmente no ocurre se le atribuida quizá a un temblor tan natural que no detenía la vida del japonés. Al suroeste de la ciudad un campamento de verano en el que por segundos fue audible el grito al unísono de varios chicos para apagarse casi tan rápido como el ligero apagón. Quienes le escucharon creyeron que se trataba de una broma de mal gusto perpetrada por Naigeru y su compañero inseparable Yagami por las supuestas historias del profesor Ueda, algo que no seria de extrañarse conociendo a ambos chicos.

Mientras tanto en la región de Kantou, justamente en la ciudad de Tokio dentro del barrio de Kōtō justo en Shin-Kiba se ubica el apartamento de la familia Izumi, en donde 3 viejos amigos estan reunidos frente a una computadora portátil.

- Tai... parece que intentar abrir la puertas al digimundo no funciono - dijo Jō a su amigo que miraba con algo de decepción la pantalla
- Algo va mal - comento Kōshirō llevándose la mano al mentón como siempre acostumbraba para intentar concentrarse un poco mas, antes de emitir un juicio exacto
- ¿mmm? - dijo el peli azul volteando a ver a su amigo - ¿porque lo dices Kōshirō? - añadió
- pues... - comento justo antes de ser interrumpido por un molesto Taichi
- Esta porquería ya no funciona... seguramente ya no tiene baterías... después de todo han pasado 24 años sin cambiarse - mirando molesto su digivice, mientras Jō le mira regalándole una forzada sonrisa y Kōshirō escucha atento las palabras de su amigo Taichi que le deja pensando un poco mas
- Tai, dudo que los digivice usen baterías- afirmo no muy seguro Jō
Kōshirō golpeo la mesa con los dedos generando un sonido poco molesto para dar un golpe mas fuerte - Sé que nunca en estos 24 años hemos cargado los digivice, sin embargo siempre funcionaron como Jō menciono. Aunque hay algo que debo darle crédito a Tai, la puerta pareció abrir pero se botó automáticamente como si realmente no lograra aperturar, quizá el digivice no pueda abrirla-

Jō: entonces... estas diciendo que posiblemente la loca idea de Tai ¿tenga sentido?
Kōshirō: es que no lo se... a decir verdad intente en la oficina abrir de igual forma la puerta al digimundo pero me fue imposible, pareció querer abrir pero luego simplemente se apagó la computadora del centro de investigación
Tai: ¿crees que tenga que ver con la anomalía de hace años?
Kōshirō: también pensé en eso, aquella ocasión creímos que el digimundo se había destruido pero en realidad el fenómeno no pudo tampoco ser explicado por completo... estoy temiendo que hayamos pasado algo por alto.
Jō: -se rasco la cabeza, luego se acomodó los anteojos- pues a decir verdad estamos igual Kō, aparte yo solo soy médico y Tai, bueno es Tai
Tai: -entre cerrando los ojos para mirarle acompañado la mirada de un puchero- aún estoy molesto contigo...

Se escuchó el abrir de la puerta acompañado del sonido de una voz femenina que dijo - ¡Ya estoy en casa! -

Kō: Yua - miro su reloj de pulso- vaya que tarde es... - cerro la laptop poniéndose de pie - Bienvenida a casa cariño ¿necesitas ayuda?
Yua: tranquilo puedo con esto sola -mirando en la sala a sus invitados- Kō! no me avisaste que vendría Jō y Tai a casa, hubiese traído un pastel o algo
Jō: no es necesario Yua gracias - saco su teléfono para percatarse de la hora- de cualquier forma ya es tarde -alzo la mirada- chicos debo irme, Gomamon no me a marcado, tengo a Kiron enfermo y solo en casa no quiero que haga alguna tontería, ya saben cómo son los chicos hoy en día.
Tai: -suspiro- ni me lo recuerdes, apenas logre deshacerme de Paris para tener un poco de tiempo con Sora y esta se va a una junta de negocios... -Sentándose en una silla algo molesto-
Yua: -sonrió- escuche que está ayudando con los diseños de una banda de jrock
Tai: si a estado trabajando mucho en esos kimonos, pero a decir verdad no puedo molestarme, es una fabulosa esposa.
Jō: quizá suene mal pero creo que somos los únicos del grupo que no trabajamos en el medio artístico.
Kō: ¿lo dices por el programa de Mimi?
Jō: aaa... más bien por cierto solterón
Tai: eso no es verdad... Tú eres bastante mas popular, sabes todo lo que me cuesta sacarle cita a Agumon o Piyomon, quizá hasta tú seas la causa de divorcio de los matrimonios japoneses, ahora comprendo porque veo tan seguido a Iori en ese lugar.