Yato adquiere una nueva Shinki que desplaza toda la poca atención que tenía Yukine.
Así que éste empieza odiarla, todo parece normal, pero ¿Qué pasa cuando su carácter comience a afectar sus peleas contra los ayakashis y que Yato prefiera pelear con...
-¡HIYOOOORIIIIII!- Gritó Yato al ver que Hiyori era tomada de la pierna por un ayakashi.
-YATO AYÚDAME!!- Respondió ésta al ver que no podía zafarse.
-HIYORI, LO PRIMERO QUE TE DIJE ES QUE NO TE METIERAS EN PROBLEMAS JUSTO CUANDO YUKINE ESTÁ CON KAZUMA, PERO NUNCA ME ESCUCHAS, IDIOTA- Dijo Yato enojado saltando rápidamente hacia el monstruo que era parecido a una rana mutante, intentando salvar a Hiyori quien estaba de cabeza.
-LO SIENTOOOO, SOLO AYÚDAME- Decía Hiyori desesperada.
-JUSTO CUANDO YUKINE ME TRAICIONA, ¡¿QUE PUEDO HACER?! SOY UN DIOS INÚTIL- Yato se pegaba a sí mismo.
-SÓLO PIENSA RAPIDO ANTES DE QUE ME COMA IDIOTA- Gritaba la chica a punto de ser devorada.
-AGUANTA HIYORI TE SALVAREEEE- Yato dijo al ver a un espíritu de la nada.
-Una chica y al parecer tiene la edad de Yukine, maldición ¿Por qué siempre me encuentro con espíritus jóvenes? Pero todo sea por Hiyori, AQUÍ, SIN DESVANECERTE TE AFERRAS A TU VERDADERO NOMBRE- Empezó a decir Yato enfrente del espíritu.
-YO TE HARÉ MI SIRVIENTE Y TE OTORGARÉ UN NUEVO NOMBRE, TU NOMBRE SERÁ MI SEGUIDOR, COMO REGALÍA DERIVARÁS DEL SONIDO, OBEDECE MI ORDEN Y CONVIÉRTETE EN MI SHINKI- Yato trazó el kanji.
-¡TÚ NOMBRE ES AMA! ¡COMO SHINKI, AMAKI! VEN AMAKI- Y pronto como dijo eso el espíritu se convirtió en un shuriken.
Yato lanzó el shuriken hacia el ayakashi perforándolo, tan pronto como el arma regresó hacia el, lo volvió a lanzar destruyendo al monstruo.
El Dios saltó para agarrar al Hiyori a tiempo.
-No vuelvas hacer esto idiota- Le reprochó a la chica.
-Yo sólo quería dar un paseo bajo la lluvia- Respondió ésta.
-Tienes suerte de que yo, EL GRAN DIOS YATO, estuviera aquí para salvarte- Fantaseó Yato.
-Casi muero!!- Reclamó Hiyori.
-Pero no lo hiciste, además ¿No crees que me debes algo?- Yato sonrío travieso.
-Pff, aquí están tus cinco yenes- Hiyori sacó el dinero de su cartera.
-¡SÍ! MUY PRONTO SERÉ MILLONARIO- Gritó Yato celebrando.
-Espera Yato, ¿no acabas de tener un nuevo shinki?- Preguntó la chica.
-Oh cierto, su nombre es Ama, como persona Amane- Sonrío al ver al shuriken transformándose en una chica.
Tenía el cabello rizado y rojo con ojos ámbar, no medía mas de 1.60 y al parecer tenia 14 años.
-Soy Yato, tu maestro, te llamé del otro mundo para convertirte en mi shinki, te permitiré permanecer a mi lado más tiempo que un familiar- Se presentó formalmente el Dios bajo la lluvia intensa.
-Oh, así que eres mi nuevo amo- Respondió un poco tímida Amane.
-Ponte esto Amane, no quiero que te enfermes- Le dio su chaqueta para protegerse de la gotas que caían sin césar.
-Gra-gracias amo, pero tu te enfermaras- Señaló el aspecto un poco descuidado de Yato.
-POR FIN ALGUIEN QUE ME APRECIA Y NO RECHAZA MI CHAQUETA LLENA DE SUDOR, digo, ehm MI CHAQUETA ESPECIAL, AMANE ERES MI FAVORITAAAA, NO ME IMPORTA ENFERMARME AHORA-Yato abrazaba a Amane como si no hubiera un mañana.
Hiyori río.
-Chicos, podemos ir bajo el mismo paraguas hasta la casa de Kofuku, traje el más grande que tenía en casa- Opinó Hiyori al ver que la lluvia no iba a parar.
-¿Es-estás segura?-Preguntó Amane con inocencia.
-¡Claro! Vamos- Y así fue como se fueron apretujados bajo el paraguas de Hiyori ya que Yato no dejaba de contar lo "asombroso" que era.
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