Bienvenido Al Infierno

Relato de Helena

¡Esto es genial! Haberme casado con Nick fue lo mejor que me paso en la vida y ahora esto, mudarnos a un lugar tan tranquilo. Cuando nos conocimos yo era doctora en uno de los hospitales del centro de la ciudad, Nick acompañaba a un herido de bala de que había participado en un asalto. Claro que no quedé colgada de él enseguida, yo estaba muy ocupada deteniendo la hemorragia del balazo. Como sea en los papeleos del pobre diablo que estaba gritando en la camilla nos vimos más de cerca y supongo que desde ahí nos enamoramos aunque aún no lo sabíamos. Y ahora solo mírennos, una casa linda y tranquila con un gran jardín lleno de plantas. Simplemente no se podía estar mejor. Solo faltaba socializar con las vecinas.

Eso pensaba cuando oí la puerta.

-¡Hola vecina! Entre las chicas te quisimos dar la bienvenida al pueblo.

-Claro, pasen, pasen.

Invite al grupo de chicas a sentarse en el comedor, todas traían pote con la típica comida de bienvenida (budines, tartas, ensaladas etc.). La que me había saludado primero parecía ser la líder de este "grupo de vecinas"

-Soy Kalem- Dijo la líder- Y ella Rudi- señalo a su costado a la que parecía ser la más mayor de todas- y ella es Raquel- señaló a la que parecía la más joven del grupo.

-Mucho gusto chicas, soy Helena.

El resto de la conversación la verdad que no tuvo importancia, que como era la ciudad, que como era vivir con un policía ese tipo de cosas. Luego seguimos hablando de los demás vecinos, decían no ser chismosas pero parece que estaban muy bien informadas de todo lo que pasaba en el pueblo.

-Y esa casa que está allí es la casa del viejo Joe- Dijo Kalem señalando a través de la ventana a una casa apartada de las demás- es un ermitaño, no sale mucho de ahí y encarga la comida desde la puerta. Se dice que siempre encarga montones de comida enlatada. Es como si quisiera comer lo que come en un mes en un día.

-Para mí sería más el loco Joe que el viejo Joe- Dijo Raquel apartándose de la ventana riendo

-Callate niña, podría ser tu padre- dijo Rudi

-¿Pero no lo es no es cierto?

-Mira, conociendo a tu madre, yo le daría el beneficio de la duda

-No de nuevo- Dijo Kalem separando a Rudi y Raquel que ya se estaban agarrando a las piñas- ¿No pueden estar dos segundos sin pelear? ¿Por qué siempre tengo que ser la más madura de este grupo?

Cuestión que siguieron peleando a las piñas un rato hasta que Kalem decidió que ya era hora de irse (si no podían seguir toda la noche hasta que alguna de las dos callera muerta y era mejor que no fuera en mi casa). Nos despedimos y decidimos volver a vernos otro día. Cuando volvi a ver por la ventana vi a Nick siendo expulsado de la casa del viejo Joe. Parece ser que también quiso conocer a los vecinos por su parte, supongo que ya es hora de comparar resultados.