37 MINUTOS

capitulo 2

Llego el día del partido nacional y estaba muy nervioso, pero a la vez también muy contento, no dormí casi nada la noche anterior, pero eso no me impidió poder ir al partido que tanto esperaba desde hace mucho tiempo. Comenzó el partido y todo iba bien, ganamos el primer tiempo con tres goles arriba del otro equipo, pero en el segundo tiempo mi rendimiento ya no era el mismo, me dio un fuerte dolor de cabeza que me tiro, pausaron el juego y me llevaron a la banca y le dije a mi entrenador que solo fue un golpe de calor y una pequeña deshidratación por el calor que hacía, -que continúe el partido -dije -, el entrenador me dijo que sin mi iba a continuar y le hice caso, íbamos perdiendo entonces pedí un cambio y entre a jugar. Me dio un fuerte dolor de cabeza, pero no dije nada, solo seguí jugando, por suerte logramos recuperarnos y lo ganamos. Estaban celebrando, pero no me sentía muy bien y le dije a mi mama que nos fuéramos a nuestra casa, solo quería descansar. Llegamos a casa y me subí a mi recamara a dormir, dormí un largo tiempo que mi mama se preocupó y subió a hablarme

-Carlos, ¿todo está bien?

Preocupada que no le contestaba decidió abrir la puerta y me estuvo tocando hasta que me desperté y llorando le dije

-Mama me duele mucho mi cabeza-Tocándome la cabeza y llorando-
-No te preocupes Carlos, mira solo tomate esta pastilla y veras como más tarde se te quitara este dolor de cabeza- dándome la pastilla y un vaso de agua-
-Gracias mama, te amo mucho

Me tome la pastilla y me quede otra vez dormido toda la noche, al despertarme al otro día para ir a la escuela mi madre me pregunto si ya me sentía mejor a lo que le conteste que sí, desayune y me fui a mi escuela.

En la hora de receso nunca me daba hambre porque solo quería irme a jugar futbol, dieron el toque para entrar a clases de nuevo y antes de entrar a mi salón la chava que me gustaba me agarro de la mano y me dijo

-Carlos, que buen partido el de ayer, pero solo quería preguntar si ¿te encuentras bien? -preocupada me lo dijo-
-Gracias Mariana por preocuparte por mí, y sí, me encuentro muy bien-nervioso le conteste-

Me metí a mi salón y comenzaron las clases y yo solo pensaba en Mariana, como fue que se preocupó por mí, ¿acaso le gustare también? Solo pensaba en ella.