Santiago PoV's
Una vez dentro del Museo nos dimos cuenta de algo, a pesar de que probablemente la entrada fuera gratis, no había casi gente además de nuestra clase.
-Bueno chicos, no os separeis de vuestro compañero de asiento. Yo me iré a fumar e ignorar vuestras tonterías. Adiós. -Dijo el profesor al mismo tiempo que se iba
-Yo creo que él ya iba fumado -Susurro Andrés en mi oído.
Rápidamente le golpee con fuerza, pues me había asustado. No me lo esperaba.
Comenzamos a caminar por todo el Museo, burlandonos de lo mal hecho que estaba todo. Podría decirse que daba miedo.
-Oye, ¿Donde se fueron las chicas? -Pregunte al ver que ya no estaban.
-Quizás esos hombres les secuestraron -Dijo, gritando básicamente.
Uno de los dos se volteó al escuchar eso, dándose cuenta que nos referiamos a ellos. Él golpeó el hombro del chico que iba junto a el, probablemente le dijo eso. Cuando el hombre se dispuso a dar la vuelta yo agache la cabeza, evitando contacto visual.
Agarré con fuerza el brazo de Andrés, para después irnos de aquella parte del Museo.
-Te ves tierno sonrojado. ¿Por qué te avergonzaste?
-Seguro que piensan que somos idiotas.
-¿Acaso les conoces?
-Claro que no. Pero no quiero que la gente piense mal de mi.
Hubo un silencio que duró unos pocos segundos.
-¿Por qué te afecta lo que los demás digan?
-No sé. Bueno, continuemos viendo el Museo.
-Yo quiero seguir por aquella parte.
-Vamos por allí mejor -Dije señalando otra parte del Museo.
-No.
Él agarró mi brazo, jalandome y llevandome nuevamente donde antes. Una vez allí, ambos chicos seguían dados la vuelta.
-Eres un idiota Andrés.
-Gracias. Yo también te amo.
Andrés comenzó a caminar en dirección a los chicos, o hombres.
Yo rápidamente fui detrás de él, pero por un error me tropecé. Logrando que él y aquellas dos personas se dieran la vuelta.
-Santiago, ¿estas bien?
-¡Claro que si -Dije levantándome, intentando que aquellos dos dejarán de mirar.
Obviamente evite cualquier contacto visual al levantarme.
-¿Santiago?
Esa voz me era realmente conocida. Levanté la cabeza, observando a alguien que no esperaba ver.
--
ESTO ES DEMASIADO CLICHÉ.PERO ES MUY ADORABLE.
CONTINUEMOS
--
No podía moverme. ¿Realmente era él?
Pensé que nunca volvería a verle.Cerré mis ojos con fuerza al sentir una lágrima recorrer mi mejilla. Estaba nervioso.
Unos brazos me rodearon. Logrando sentir un calor familiar.Abrí mis ojos al segundo de separarnos.
-No entiendo nada.
-Yo menos.
David se dio la vuelta, observando al chico que estaba detrás de él.
-Oh, este es Santiago, mi... Un con... -Noté como su voz era triste- No sé lo que es.
Andrés se puso a mi lado.
-¿Os dejamos solos? -Pregunto Andrés.
-No hace falta. Él es mi padre...
-Santiago... Legalmente no lo soy.
-Claro que si. Legalmente o no, después de todo, tu junto a Sergio me habéis criado.
Gire mi cabeza, observando como Andrés miraba confuso.
-Espera. ¿No vivias con tu padre?
-Luego te explico.
Noté como David quería decir algo. Pero una voz lo interrumpió.
-¡Vamos, todos al autobús! No aguanto este museo.
Era el profesor.
-Debes irte...
Negué con la cabeza.
¿Como me voy a ir? No quiero separarme de mi padre.
ESTÁS LEYENDO
Olliepan: (Segunda Temporada)
Fiksi PenggemarQuizá este sueño continúe. Quizá el murió. No tengo ni idea, pero es mi sueño sea real o no. -Sergio.