Yūjin kaigi (Encuentro de amigos)

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*Chio Chio* Briza suave y cantos de los pájaros al mirar a mi alrededor la habitación estaba basía *tin tan* amuletos de metal, mire a todas partes para buscar a Toshizo pero el no estaba ya en nuestra habitación salí de ahí y al entrar al salón del té, mire a aquel que en Tokio se hacia llamar el capitan Sagara, lo mire atenta pero al cruzar sus ojos con los mios inmediatamente la figura infantil de Kyo se reflejo ante mis ojos , sin decir una palabra pase al salón tomando asiento junto a Haichiro mirando de cerca a Sagara que salio lentamente de aquella habitación.

-Ey Sagara ¿a donde vas?- dijo Haichiro

-¿Eh? solo iré a tomar un poco de aire- este deslizo la puerta cuando tropezó con Kondo

-Buenos días ¿Kyo que tal tu mañana?- Al oír el nombre Kyo salí en un dos por tres.

*Tin tan* amuletos de cristal, mi corazón palpitaba, la briza suave y el pánico me consume, el escuchar el nombre que por años me había perseguido, mi querido amigo el que me regalo miles de sonorizas en mis años de infancia *los pensamientos en mi mente me abruman*. Ante mis ojos solo quedaba una mirada llena de tristeza. Si el en verdad era Kyo y sabía que yo había tomado el nombre de mi padre ¿Por que no me había dicho la verdad? ¿Acaso esperaba una invitación? o quizás no me reconoció, de pronto una voz me saco de mis pensamientos.

-Hermanita, ¿No vendras a desayunar ya todo esta listo- La voz pertenecía a mi hermano Toshizo

-Si perdón sentí un poco de nauseas y vine a tomar aire- Después de decir aquello me senté al lado de Haichiro quien me saludo con un beso en la frente.

-Buenos dias Haru ¿Dormiste bien?- dijo seguido del beso

-S-si he dormido bien muchas gracias por preguntar- respondí con rubor en mis mejillas

Mi hermano Toshizo se sento a mi otro lado mientras comiamos mi mirada no podía despegarse de Kyo después de todos estos años los impulsos de abrazarlo con cariño y besar sus mejillas se contenían en mi mente con ello una imagen clara de aquella hermosa escena mientras comía me fui perdiendo en el sendero de mi pensamiento *tin tan* las campanas suenan *tin tan* con una hermosa melodía que dar, mi estancia en Kioto había resultado mejor de lo que esperaba. 

Al terminar de desayunar los chicos se dispusieron a entrenar pero yo me senté en las afueras en uno de los jardines imperiales donde tome tinta y un pincel comenzando a escribir una carta.

Querida Yuka....

Kioto es maravilloso no me sorprendería quedarme aquí para siempre, he descubierto tanto de mi en este lugar, se que no es la primera vez que vengo, pero esta vez no te imaginas todo lo que he pasado he derrotado a todos los samurais 230 roins en un solo duelo todos al mismo tiempo me alegro de a ver venido, la briza es suave y el tiempo cálido mi entrenamiento sin duda esta mejorando, también me ha pasado algo grandioso. Recuerdas a Kyo el chico de la nariz sucia como solías decirle esta aquí también ha sido llamado al igual que todos para formar parte de las resistencias contra la familia Meijin, también he descubierto mi pasado quizás eso te lo cuente después. 

¿Como esta tu esposo? y ¿Tu te encuentras bien?, espero que me escriban pronto saludame a Yahiko dile que no sea un holgazán y entrene duro pronto estare de nuevo con ustedes o quizas traiga a todos a Kioto. Bueno debo irme a entrenar hasta luego.

Tu hermano que te ama.                                                 Yuusuke Haru Hijikata.

Después de escribir la carta la di a un mensajero real para que la llevara, al instante de darcela tome mi espada y comencé a entrenar en el mismo jardín donde había escrito la carta, mi energía no se comparaba a la de ningún otro momento en la vida *Tin tan* sonidos de campanas el campo estaba abierto *shif shaf* roces de las espadas al abrir los ojos me encontré a Haichiro quien había detenido mi suave deslice, me retaba a un duelo amistoso *tin tan* amuletos de metal, la concentración llegaba a mi mente y con ella, mis movimientos constantes y directos,  Haichiro era un digno oponente los roces de las espadas se volvían constantes y nuestros movimientos rápidos, a la larga de nuestro combate los demás roins incluyendo a Kyo y a mi hermano nos observan desde el barandal del primer piso, Hachiro lanzaba movimientos constantes a su alrededor, mientras yo trataba de mantenerme en armonía interna con mi espada su estilo de espada era algo que aun no había podido estudiar correctamente y esta era la ocasión, sus movimientos eran finos y constantes al igual que rápidos, mi estilo el Hiten Mitsurugi no era suficiente para vencerlo necesitaría usar otra clase de estilo en combate, mientras esquivaba sus golpes recordé algo salte para quedar fuera de su alcance, deje mi espada de un lado mientras el continuaba en posición de ataque, tome una nueva arma una espada con la empuñadura mas larga y corrí hacia el, mientras el emperador había llegado a presenciar nuestro entrenamiento.

-Bien Haichiro basta de juegos con esto te vencere ¡¡Estilo Tamiya- Ryu¡¡- Al gritar eso tome la empuñadura de mi espada que había distraído a Haichiro permitiéndome darme la victoria en aquel duelo amistoso donde rasgue su armadura, y este callera 

-Bien echo Haru- Al instante los aplausos y exclamaciones dieron su lugar   mi victoria me sentía mas que orgullosa incluso el emperador volvió a reconocer mi posición como samurai. Me sentí honrrada por aquellas exclamaciones cuando mi nuevo oponente se coloco enfrente de mi caminando con una mirada fria en los ojos.

-Bien Haru es mi turno- dijo mi hermano Toshizo para ponerce en posición de ataque.

Al verlo respire hondo tome mi espada y cerre los ojos comence a mentalizar el campo de batalla convirtiendo en uno con mi paz interior y mi espada, *Tin tan* amuletos de metal y briza suave de verano al mirar a Toshizo empuñe mi espada colocandome en posicíon de ataque y al abrir los ojos me dirigí directamente a el con fuego en los ojos y determinación en el corazón comenzamos una nueva batalla *shif shaf* el colpeteo de las espadas era aun mas constante que con Haichiro comencé a aumentar la velocidad de mis golpes al igual que el, una rafaga de aire creada con la espada nos rodeaba *tin tan* amuletos y campanas que nos rodean. Ante mis ojos los movimientos que yo lanzaba se comenzaron ha hacer torpes a comparación de los de mi querido hermano, un golpe tras otro solo pude defenderme mas no atacar era claro que mi hermano era el mejor samurai de kioto pero aun asi no me iba a dar por vencida aun que estuviera al vorde de la muerte, continue mis ataques sin precición pero cuando me preparaba para usar el Hiten Mitsurugi Toshizo revelo su tegnica.

-¡¡Estilo Yagyu Shinkage!!- al decir esto el rose de la espalda irio mi hombro derecho y me saco volando chocando contra el arbol-

-V-Vaya hermano eres fuerte- Sonrei tocándome el hombro que no tenia mas que un golpe y un gran moreton.

Después de aquellos entrenamientos en la tarde al meterse el sol me curaba el brazo tal como mi padre me había enseñado. Cuando llego Kyo o mas bien el capitan Sagara.

-Permiso- dijo desde afuera

-Pase-dije aun vendandome dando la espalda a la puerta puesto que tenia mis senos completamente al aire

-Hola Haru te traje esto de parte de Haichiro- dijo refiriendose a un bello kimono de seda corto

-Gracias dejalo ahi dije para ponerme mi camisa- Cuando Kyo me miro se sonrojo totalmente -Oye Sagara ¿sera posible que tu seas el hijo del primer capitan Sagara?-

-Claro mi padre era el capitan lo sabes tu eres Haru Yuusuke hija de su superior no es así y...-

-En realidad mi nombre es Yuusuke Haru Hijikata - Este al oírme solo suspiro

-Ya veo entonces no eres quien creí-

-En realidad si lo soy yo, Kyo es un gusto verte- sonrei y lo abrace con lagrimas en los ojos 

Esa noche fue una que jamas podría olvidar tranquilidad, sake, un amigo y miles de anécdotas que contar una noche como esa es de las mas valiosas que quisiera conservar el resto de mi vida.





Tragica canción de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora