-¿Si soy lesbiana? La verdad es que no lo sé, o sea, no te voy a negar que ese beso me encantó y de que me quedé con ganas de más, pero sabes que me gustan los chicos. –Su expresión era un enigma.
-Bien... Si recuerdo bien tu último novio Marcos...
-Carlos. –La corregí.
-Sí, eso, como sea. El punto es que ese tal Carlos se quiso acostar contigo y tú no quisiste ¿por qué? Porque a la niña le dio asco. ¿Sabes? No lo había visto de esa manera, pero ahora que lo pienso todo parece encajar.
Joder, sabía que no tenía que contarle todo.
-Em, bueno, acabábamos de cenar y comió mucha cebolla. -¿En serio Andrea? ¿Cebolla?
-Oh, eso no me lo dijiste, entonces si te lo pasó. –Vaya, Lena era menos inteligente de lo que creía.
-¿Cómo te diste cuenta de que eras lesbiana? Nunca me lo dijiste.
-En realidad no fue tan difícil. Desde que era pequeña nunca vi a los niños como algo más, algunos se me hacían muy monos, pero no como para andar con ellos. En cambio, a las mujeres siempre las vi de esa manera, veía una película y siempre me fijaba más en la protagonista, en si era bonita y cosas así. Al principio pensé que era normal, pero crecí y me di cuenta de que no. –Terminó de contarme Lena.
-¿Entonces siempre lo supiste?
-Sí, se podría decir de sí. ¿Y qué hay de ti?
-¿De mí? No lo sé. Siéndote sincera, hubo un tiempo en el que te me hacías muy bonita. –Debo dejar de decir cosas sin pensar, bien, esto se pondrá raro.
-¿Bonita? Por favor, yo estoy hermosa. –En ese momento hizo un movimiento con la mano y terminó como un emoji, el de la mona esa que tiene una mano como que doblada, ay no sé como explicarme.
-Claro, claro. –Me reí.
-Si una noche quieres comprobar tu sexualidad, solo dime, para eso estamos las amigas ¿no? –Oh mierda, eso no me lo esperaba.
-Lena, tenemos un trato. –Le dije intentando sonar normal.
-Lo sé, lo sé, solo estoy jugando, relájate.
-Y si lo quisiera comprobar sería con la nueva...
Vale Andrea, contrólate, no eres lesbiana, solo fue un beso, dicen que todos a esta edad experimentan algo así.
-Andrea, te he perdido.
-Lena, me gusta la nueva.
-No me digas...