CAPITULO UNO

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Alice Jones

— Pero, ¿que diablos? — dije viendo que mis
malditos jeans favoritos ya no me quedaban.

Busque en mi armario, saque un jeans negro y me lo puse combinado con unos converse negros, una blusa negra que decía Nirvana, 
Mi chamarra simple negra y para finalizar aplique un poco de labial rojo en mis labios.

Salí de mi habitación, hacia la cocina en busca de algo para comer, ignorando a todo y cada uno que se interpusiera en mi camino.
Llegué a la cocina, todo iba marchando bien hasta que mi según "madre" empezó a bombardearme con sus malditas preguntas de ¿Por qué no usas un lindo vestido rosa? ¿Por qué siempre andas de rara? ¿Por que no puedes ser como las demás chicas de tu instituto?

Pero maldita sea, yo sólo quiero ser yo —
Pensé en el momento que terminó de formular su última pregunta.

Camine por las calles de California, una mañana cualquiera, con mi Iphod a todo volumen.
Llegué a la parada de autobuses y subí a uno, me senté hasta el fondo viendo como subían y bajaban las personas. Baje y camine hasta las puertas del instituto.
Me tocaba lengua, admiraba a todos aquellos presentes en la clase, hasta que él entró.
Ojos cafés claros, cabello castaño oscuro algo revuelto, alto, delgado, tez blanca.

— Es lindo — Pensé

Todo el mundo empezó a murmurar, que ¿Quien era el? O esas cosas.

— Silencio, por favor, clase — dijo la maestra Thompson. —
Ahora el es su nuevo compañero, por favor cariño, dinos tu nombre —
Dijo la muy perra, giñandole un ojo.

— Hola, mi nombre es Edward Lee, amo los videojuegos, escuchar música, andar en patineta, y leer libros.

— Prácticamente, el es yo, ¡pero en hombre! creo que no estaría mal hablar con alguna persona en la escuela después de mucho tiempo — Pensé

Edward camino hasta sentarse a un lado de mi, y bueno yo simplemente opte por ponerme mis audífonos y reproducir mi música.

[…]

— Hola — dijo Edward al tiempo que se sentaba al frente de mi en la cafetería

No le conteste.

— Parece que no me hablaras — guardo silencio
— Bueno lo haré yo, Mi nombre es Edward Lee Horan, creo que ya sabes mis hobbits, vengo de Inglaterra, no tengo novia, y tengo que confesar que de todos en aquel salón tu fuiste la única que captó mi atención y no se por que si no hablas — Se hecho a reír muy fuerte que logró llamar la atención de algunas personas y maestros.

— Suspire — Me llamo Alice Jones Cox, me gusta lo mismo que a ti, yo nací en Nueva York, pero a los 10 años me mude aquí, no tengo novio pero tampoco me gustaría tenerlo, no, no me llamaste la atención como yo a ti y bueno no hablo simplemente por que prefiero mil veces escuchar música o leer — dije sin más y di un mordisco a mi sándwich

— Sabes, eres una chica impresionante, que te parece si hoy en la tarde salimos.
— dijo con una sonrisa de oreja a oreja

— No creo, no me gusta salir mucho — dije sinceramente y es que las personas no me agradaban tanto.

— ¡Oh, por favor! Necesito a una guía para conocer este lugar, esta ciudad. O acaso ¿quieres que el que podría ser la única persona que entre a tu corazón muera en el intento de explorar una ciudad? — Me reí un poco por aquella expresión y el solo me miraba con una sonrisa de lado.

— Maldición — hable con derrota
— Lo haré, te acompañare en tu aventura para conocer esta ciudad.

Entonces el se paró, y prácticamente corrió hasta mi lado, me abrazo y alguna chispa se encendió en mi vida.

Prohibido Suicidarse En Primavera Donde viven las historias. Descúbrelo ahora