Solo "Te Protejo" -ADAPTADA- Leam Paynock | •TERMINADA•

S I X

-¿No te da miedo?-preguntó.

-¿Qué?

-Que te haya querido desde los 12 años, tú teniendo 9. Lo único que quería contigo era protegerte, esperar a tu lado a que crecieras. Cuando volví casi me da un infarto. Eras una hermosa joven de 16 años, tan valiente e inteligente. Ni en mis 4 años de universidad vi a alguien tan hermosa. Agobiabas mi mente, me confundías cada vez más.

-Pero ahora sé cómo te sientes. Y para que no lo dudes, yo también te quiero... También me confundes Liam, pero no me importa, - volví a besarlo.

Continuamos besándonos por unos minutos, que a mí me parecieron una vida.

-Lee Lee, si no nos separamos ya, tendrás que vivir sin mí de nuevo -Me separe de inmediato y lo vi con ojos muy abiertos. –Harry me matará si llega y nos encuentra así... De hecho me matara en cuanto se entere.

-No tiene por qué saberlo-asegure- Esto no es de su incumbencia, solo nos concierne a ti y a mí.

-Es tu hermano...

-Mi hermano sí, pero ya no soy una niña y ya no puede decidir por mí, Liam...Te quiero, ¿tiene que importarte lo demás?

-No realmente-admitió el, con una sonrisa y volvió a besarme dulcemente.



Los días que siguieron a ese fueron un poco... extraños.

Liam y yo tratábamos de pasar tiempo juntos pero sin que nadie se diera cuenta. Él se ofrecía a llevarme a la escuela por la mañana y en las tardes a mi clase de baile, ya no me quedaba en el estudio hasta las 8, salía a las 6 y después nos íbamos juntos. Llegábamos a mi casa y nadie sospechaba nada, ni les parecía extraño.

Liam me cuidaba todo el tiempo, me decía a cada minuto que era hermosa y lo mucho que me quería. Aun así a veces el sentimiento de culpa lo golpeaba y se sentía como el peor de los amigos por estarle haciendo esto a Harry.

"Estoy corrompiendo a su hermanita"-me decía después, con una sonrisa.

Casi un mes después de su llegada, y apenas una semana después de "estar" juntos Liam se compró un departamento. Había decidido quedarse a vivir en la ciudad permanentemente... Me pidió que le ayudara a escoger y decorar su nuevo hogar y así lo hicimos...

En las tardes pasaba tiempo con mi hermano, mientras yo estaba ensayando. Aunque ya llevábamos una semana "juntos" aun no le había permitido ver mi baile. Y digo que estábamos "juntos" por qué no podía darnos otro título, no éramos novios, él no me lo había pedido.

Tres noches antes del show Liam se había retrasado un poco en ir por mí así que estaba platicando con Justin. Estábamos riendo, mientras el me "reclamaba" por haberme alejado tanto durante esa semana. El me tomo del brazo y me abrazo fuertemente.

- Leigh-Anne -escuche la voz dura de Liam y rápidamente me separe de Justin.- Vámonos.

-Liam, ¿que...?

-Vámonos -me repitió mucho más duro y comenzó a caminar hacia su nuevo auto.

Me despedí rápidamente de mi amigo y corrí para alcanzar a Liam.

-Liam...-lo llame, pero él me ignoro- Liam, ¿qué diablos te pasa?

El me volteo a ver y su mirada me congelo... era como me vio la primera vez hace casi un mes.

-Liam-me acerque a él y le rose la mejilla con mi mano-Liam, háblame.

-No hay nada de qué hablar.-me aseguro.

Suspire y acomode un poco mi chamarra.

-Justin es solo un amigo...tú lo sabes.

-No, lo que sé es que Justin y tú se quieren y que él tiene tu misma edad.

-A ver, en primera: Si, quiero a Justin, pero como mi amigo, como un AMIGO nada más...y en segunda: ¿Qué diablos tiene que ver la edad en todo esto?

-¡Tiene mucho que ver! Tienen la misma edad, pueden vivir las mismas cosas juntos y seguro que Harry no te pondría tanto pretexto.

-¡Pero yo te amo a ti! ¡Entiéndelo de una maldita vez, Liam!- me acerque a él y lo bese. El correspondió inmediatamente.-si eso no te demuestra lo mucho que te amo, no sé qué más hacer-le dije, al alejarme.

Liam tenía una hermosa sonrisa plasmada en el rostro.

-Lo siento...me comporte como un idiota celoso, perdóname -

-Solo no lo vuelvas a hacer.



Algunas horas después Liam y yo nos despedíamos en la puerta trasera de mi casa. Sabía que nadie usaba esa puerta a menos que fuera para sacar a pasear a los perros así que no había peligro de que alguien nos descubriera...

Liam me tenía abrazada de la cintura y sus labios acariciaban los míos dulcemente.