Unicornios.

~África Johnson~

I cannot hide what's on my mind, I feel it burning deep inside...

No puedo esconder lo que hay en mi mente..., la música, una vez más, tiene razón, no la puedo contradecir, es tan sabia... .

No llevo mucho más de una semana aquí y cada vez la actitud que tiene Ethan como forma de enfrontar la vida va a peor. Eso me desanima.

Esto no es fácil para mí. Acabo de venir a Utah por razones personales, no conozco este sitio y en vez de recibir ayuda escucho gruñidos y aún así intento estar positiva pensando que podría ser peor.

Never gonna change my mind...

De pronto la melodía se para en seco y abrí los ojos como un búho - sí, ya lo sé, de nuevo la comparación con búhos, que se le va a hacer, me parezco a uno, ¿nunca se han identificado con un animal?-.
Cuando lo que tenía en frente se iba nitidando y cobrando forma, voy encajando cosas, veo que tengo su cara en frente de mí.

-AAHHJJ!!- chillé, y por lo visto como una loca endemoniada por que después gritó él.

-AAHH!! ¡¿Pero que haces?! Son las 7:00 de la mañana.

-Lo siento, tu cara asusta- estaba molesta, no sabéis lo que es despertar de un sueño profundo y de repente abrir los ojos y ver un rostro que no es lo primero que quieres ver para empezar tu día.

Después me di cuenta que no había mencionado lo de la norma de no chillar, ni se me ocurrió decirlo.
Pero sí que pregunté.

-¿Qué mierdas hacemos aquí levantados a las siete?

-Instituto.- de nuevo ese tono frío y cortante. Algún día cambiaré ese tono, aunque sea lo último que haga en este año.

Tan rápido como escuché esa palabra me levanté, me preparé el desayuno, y mientras se calentaba me fui al baño a vestirme y a peinarme, después me tomé mi tazón de leche con colacao mientras él se tomaba un café tranquilamente. A continuación me puse el material pensado para hoy, cogí un chicle de hierbabuena y au.

Todo eso en diez minutos, superad eso nenas.

Me dispuse a salir de ese piso pero como siempre tiene que haber algo o alguien que lo impida.

-¿No necesitas que te lleven?- preguntó con una sensación de superioridad y de prepotencia.
Para ser sincera, esa pregunta había sonado como si me tratase como a una niña pequeña. Y me fastidió bastante dado que yo no era ninguna.
Y yo, como tengo tanto orgullo, cosa que tengo que cambiar, decidí pasar de él e irme aunque no tuviera ni la más remota idea de cómo se iba, ya vendría alguien del país de Nunca Jamás para guiarme hacia Caxton.

-No. Gracias.

***

-Perdone! ¿Sabe usted que autobús te lleva a Caxton?-oí decírselo a alguien. Giré la cabeza y vi a la chica rubia (y más baja que yo) del otro día.
Ella no pareció percatarse de mi presencia porque quizás todavía no sabía que estaba allí.

*un aplauso para mi cerebro por favor*

Como yo también estaba interesada en ir al Caxton, cuando ella terminó de conversar con el individuo, me acerqué por detrás para preguntarle lo mismo.

-Perdone.- y antes de que pudiera empezar a formular mi pregunta, pegó un bote de susto.-« Siento mucho haberla asustado, no era mi intención.» eso era lo más adecuado para decirle después de haberle asustado, pero en vez de eso, mi esponjita rosa decidió que tenía que reírme y ella pareció molestarse, no la culpo, yo también lo habría hecho.