Soy Más Fuerte Que Tú (HTF FanFic)

Capítulo 12: Batalla De Sentimientos

Asomé mi cabeza por la única ventana que había en la casa de Splendid, ¿Cómo pretendía que llegase al suelo?

-¿Estás seguro que no quieres que te ayude? - Dijo intentando ahogar una risa.

-No. - Dije seco, pero miraba abajo, y veía lo alto que estaba, no podía bajar de otra manera, y menos con esta herida que me estaba destrozando. - ¿Lo haces aposta?

Cuando me giré para mirarle, pude ver cómo se tapaba la boca evitando reír, sin ningún éxito.

-Te juro que no. - Dijo, ya, sin evitar reír.

Me aparté de la ventana y seguido de esto, Splendid salió a fuera, me miró y me tendió la mano para ayudarme.

-Anda, ven. Con esa herida no creo que vallas muy lejos, puedes hacerte más daño aún.

-¡Qué no necesito que me ayudes! - Dije sonrojado, pero estuve pensando durante unos segundos que igual si era necesario que me ayudase, no era plan de quedarme allí más tiempo, así que, mirando hacia otro lado, le di la mano para que me ayudase.

-¿Qué te costaba hacer esto desde el principio? - Me dijo con una sonrisa y me volvió a cargar en brazos, odio cuando hace esto...

-¡D-da igual! ¡Sólo déjame abajo!

Cuando ya estuvimos lo suficientemente cerca del suelo, me bajé bruscamente por mi cuenta.

-Mira... Es mejor que no nos volvamos a ver... - Le dije mirando hacia otro lado.

-Es mi trabajo detenerte. - Me dijo serio.

-Pues... Por lo menos olvida lo que "sientes" por mi. - Seguido de decir esto me dispuse ir camino a mi casa. Splendid estuvo unos segundos en silencio y manteniéndose en el sitio donde estaba, mirando al suelo.

-Lo intentaría. Pero no puedo. - Parecía como si cada vez hablase más serio. - Te quiero, y no puedo cambiarlo.

Me detuve, pero no le respondí, ni siquiera me giré para mirarle. Ambos éramos enemigos, ni siquiera sé por qué se enamoró de mi. Aún pensando en eso, seguí caminando, pero él me agarró del brazo, deteniéndome.

-¡Ya te lo he dicho! ¡No podemos ser ni amigos! - Le grité, y me solté bruscamente de él.

-¿Tú me quieres? - Me preguntó con un tono algo triste.

-¿Qué...? - Pregunté extrañado.

-¿Tú también me quieres, cierto?

-¿¡Cómo puedes decir... - De pronto, el punzante dolor de mi herida volvió, y eso que ya me había olvidado de esta.

-¿E-estas bien...? - Me preguntó preocupado.

-P-por esto... No deberías ayudarme... - Dije algo dolido. - Si no quieres que todos empiecen a odiarte y despreciarte... Mejor olvídame...

Después de decir esto seguí caminando, no vino en mi ayuda, sólo se quedó en donde estaba. No deberíamos estar haciendo esto, somos enemigos. No sé qué pretende con todo esto... Si tan sólo pudiese deshacerme de él de alguna manera...

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