Narra Kai:
Había recibido una llamada muy temprano en la mañana, llamada en la cual se me informaba que era meramente necesaria mi presencia en la compañía, al igual que la que la de todos los demás, era raro ya que mañana era domingo y solía ser nuestro día de descanso, era bastante insólito, en todo nuestro tiempo trabajando en PSC, nunca, absolutamente nunca habían solicitado de nuestra presencia en el día de descanso, por lo tanto aquella petición tan repentina no pudo parecerme más extraña...
Sin más remedio que el de seguir las ordenes que se me habían dado, prendí el televisor de la sala y le subí bastante al volumen, para que me fuese posible escuchar las noticias mientras me duchaba, aquello ya era más que una costumbre para mi, y yo solía ser muy arraigado a ellas, pues creía fielmente que gracias a ellas me había criado con principios y altos estándares de moralidad en el mundo de ahora. Me metí a la ducha mientras escuchaba noticia tras noticia, no parecía haber nada nuevo ni relevante entre los diálogos de los conductores, y verdaderamente no era de sorprenderse últimamente las cosas estaban muy tranquilas, principalmente en los indicies de crimen. Salí justo a los 15 minutos de haberme metido a la ducha, di enormes pasos por el pasillo para aproximarme a mi cuarto y vestirme, pero al pasar al lado del televisor me quede parado unos segundos mirándolo con atención, la chica de espectáculos hablaba de una gran celebridad y de su arribo a Japón, comenzaron con el reportaje y me pareció un poco extraño que la mujer no solo se enfocara en una persona en especifico, sino en varias estrellas para ser exactos, lo cual termino por desconcertarme mucho, me quede ahí un par de segundos más verdaderamente me intrigaba el hecho de saber que una persona podía poner a los medios de patas arriba con solo mencionar su estancia en Japón, para provocar severo alboroto debería de ser alguien muy importante.
Mi teléfono celular comenzó a sonar con fuerza, llamando mi atención y haciéndome volver a la realidad, apague el televisor y me encamine de a mi habitación para comenzar a alistarme, si no seguramente llegaría tarde, y eso no estaba absolutamente permitido para mi, siendo el líder tenía que poner el mejor ejemplo.
Me apresure a llegar a mi destino y como siempre había resultado ser el primero en acudir a la cita, me acomode en el amplio sillón del estudio y me quede mirando fijamente a la ventana, relajándome con el bello cielo azulado. De poco a poco la sala se fue llenando, al poco rato llego Ruki, perfectamente, vestido, arreglado y lleno de vitalidad, para mi desgracia fue el único puntual, ya que paso mucho rato y no veía entrar a ninguno de los chicos...
Comencé a entrar en una desesperación severa al respecto por lo mismo, los demás sin duda se llevarían un buen regaño por su retraso, y para zafarse tendrían que tener una muy buena excusa, o por lo menos una muy creíble. Pasó alrededor de una hora y finalmente entraron esos tres por la puerta presurosos, Uruha venia masajeándose la sien con los dedos, mientras Aoi y Reita echaban chispas del coraje.
-Espero que tengan un buen pretexto para su demora.- Espete seguro mientras Ruki soltaba una risa burlona.
-LA CIUDAD ESTA HECHA UN CAOS...- Argumentaron los 3 susodichos ante mi comentario.
-¿Cómo que hecho un caos?
-No viste en la mañana, la radio, la televisión, LA GENTE, ESTAN VUELTOS LOCOS.- Espeto Reita antes de dejarse caer al sillón.
-Parece que todo el alboroto es por una artista que ha arribado a Japón.- Uruha se coloco a mi lado mientras hacia aquel comentario tan peculiar, era cierto en la mañana había escuchado la noticia, valla no pensé que alguien causase tanto revuelo.
-¿Y alguien conoce a esta dichosa artista?- Pregunte un tanto curioso con respecto al teman, pero todos negaron con la cabeza, suspire un tanto desilusionado, si toda la ciudad estaba patas arriba por una persona, verdaderamente debía de ser muy importante
Uruha se encamino hacia la enorme ventana que daba a hacia la calle, abrió la puerta corrediza solo un poco y prendió su cigarro, se quedo unos minutos bien plantado en el lugar, pero cuando bajo la vista hacia la calle sus ojos se abrieron como platos.
-¿Alguno de ustedes esta metió en algo o sucedió alguna acción de la que tengamos que enterarnos?- Todos le prestamos atención.
-Por supuesto que no, que cosas dices.- Demando Ruki mientras se miraba las uñas.- Levante la mano el que hizo alguna estupidez reciente.
-Seguramente Aoi y Reita fueron los culpables en esta ocasión. – Dijo burlón Uruha.
-¿QUÉ?- Gritaron al unisón mientras le ponían una cara de pocos amigos a Uruha.
-Yo no soy el que suele frecuentar el barrio rojo...- Dijo en su defensa.
-A pues quien no te dice que tiene que ver con tu severo problema con el alcohol...- Argumento Ruki a lo que Uruha le cargo completamente la mirada.
-Parece que se te ha olvidado por completo lo de comprador compulsivo...
-¡YA ESTUVO BUENO!- Grite aplacando toda aquella pelea sin sentido.- Tranquilícense todos seguramente es por otra situación no todo es referido a nosotros, no somos el único grupo en la compañía...- Todos se miraron los unos a los otros y Uruha volvió a dirigir su mirada hacia abajo.
-¡POR DIOS!- Grito completamente emocionado.- PERO QUE PRECIOSIDAD DE AUTO ACABA DE LLEGAR.
Todos nos paramos de golpe y nos pegamos a la ventana mirando hacia abajo, ante nuestra mirada, se había estacionado un lamborghini urus que resaltaba por su estructura y el rojo brillante que cubria la carrocería, sin mencionar por la cantidad de autos y motocicletas que lo rodeaban, los reporteros y gente que estaba esperando abajo en el piso se abalanzaron sobre el automóvil como chacales, sin permitirnos ver clara mente lo que ocurría. La puerta del lamborghini se abrió pero nos fue imposible visualizar a la persona que había bajado del mismo, un grupo de gente vestida de negro rodeo a aquel personaje abriéndole camino entre la multitud de reporteros y gente del medio, abriéndose paso a la puerta principal de nuestro edificio...
La puerta de la habitación se abrió, mientras uno de nuestros managers entraba y nos pedía tomar asiento para poder proseguir con lo planeado, obedientemente cada quien se acomodo en un respectivo lugar, la habitación se quedo en silencio, y parecía como si todos estuviésemos ansioso por saber la razón de nuestra presencia en la compañía.
-Les explicare todo con claridad, esperen un segundo...- Dijo aquello y salió de la habitación dejándonos completamente solos con nuestras dudas existenciales en la cabeza...
Narra Mila
La seguridad que me había mandando la compañía me habían sacado de un gran problema, gracias ellos me fue posible llegar sana y segura a mi destino, me sentía completamente aliviada por ello y verdaderamente agradecía, el camino para llegar a la compañía había sido un verdadero espectáculo, sin duda el lugar me había parecido maravilloso.
En cuanto llegamos a la compañía, la seguridad se aproximo al automóvil y me rodearon abriéndome paso entre la multitud de reporteros, a los cuales les contestaba las preguntas de forma rápida y les dedicaba sonrisas sin dejar de caminar, y cuando finalmente atravesé las puertas del edificio, la seguridad se quedo perfectamente alineada en las puertas, yo seguí mi camino y subí un par de escalones para tomar el elevador, sostuve bien mi bolso de mano, y cuando las puertas del elevador se cerraron me examine en el enorme espejo el cuerpo, mi vestido, mis zapatos, mi cabello, mi maquillaje, mis manos, todo estaba completamente perfecto. Llegue al piso cuarenta y las puertas volvieron a abrirse, había llegado a mi destino, inhale hondo antes de bajar del elevador y comenzar a caminar para hacer mi presentación, el momento había llegado al fin, y no podía sentirme más ansiosa por conocer a la banda.
Narra Kai:
Al poco tiempo la puerta se abrió, para que todos nos quedáramos mudos de golpe, mis ojos se posaron en un par de zapatillas rojas que poseían un fino corte y estilizaban los pies de maravilla, subí la vista por sus largas piernas admirando el vestido negro un tanto moderno que poseía aquel cuerpo femenino tan bien formado y lo que parecía ser una modelo de talla internacional había ingresado a la habitación con una sonrisa de oreja a oreja, ante nuestra expectante mirada...
Parece que esto esta comenzando, los gazettos deben irse acostumbrando para no solo estar a la vista de todo Japón, sino del mundo entero, por que valla que Mila tiene carrera, y más de lo que creen...
¿Les gusto el capitulo?, dejenme su valioso voto y comentario al respecto...
Besos enormes y abrazos asfixiantes...
Atte:Jane Soto
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Mrs. All American (The gazette)
FanfictionMila Heard nos llevara de la mano, en su travesía al volverse represéntate internacional de una banda japonesa, rompiendo las fronteras del mundo para abrirles paso en la feroz industria del espectáculo mundial, nadie duda del talento de Mila para h...