capitulo 7

2.2K 164 13
                                    

Era una noche magnifica donde se encontraban en el la habitación del rubio, él mismo dormido y su amada Sakura velando su sueño, aún se sentía muy cansada pero la angustia era mas grande, se sentía tan bien que le asustaba, se sentía tan patetica de no sentir culpa ni remordimiento al momento de enteregarse a Naruto.

"Idiota, ¡¿por qué hace mucho no me dejaste de amar?! Después de como me he comportado a lo largo de los años; mi capricho por el amor de Sasuke, mi relación y mi ruptura con él, aún después de eso, siempre me soporta as sabiendo que podías hasta morir en el intento de hacerme reír... solo a un idiota como a ti, se le ocurre enamorse de mi."

Justo con esos pensamientos, se recargo en el pecho del joven mientras intentaba reconciliar el sueño; cuando ya estaba a punto, sintió una mano en la cabeza acariciandola suavemente, ella fingio estar dormida, él solo la acomodó en un postura que pudiera verla, la acarició suavemente en el rostro mientras que la veía con ternura y posteriormente beso su frente susurrando -me alegro que no fuera un sueño- y sonrió de alegría mientras Sakura se ruborizaba y antes que por eso la descubriera de su inocente mentira.

-Naruto- le susurró abriendo sus ojos suavemente.

-¡Ah, Sakura! Lamento haberte despertado, pero... eres realmente hermosa cuando duermes-mencionó inocentemente. -Bueno, no es que quiera decir que no lo eres despierta, sino que bueno, jamas te había visto dormir desnuda con tu consentimiento.

-¡¿pero qué...?!-suspiró. -Bueno, ya no importa ahora.

-¡Enserio!-se impresionó. -¡Vaya, Sakura-chan! ¿entonces tampoco importa el que halla robado varias veces tu ropa interior?-pregunto mas relajado.

-No tampoco impor...-abrio los ojos con sorpresiva molestia. -¡¿qué hiciste qué?!

-No, nada solo era una prueba- rió nerviosamente.

-Menos mal- le volteó la cara con molestia, pero al poco tiempo de dicha acción, Naruto la guió de nuevo a mirarlo de frente para besarla tiernamente.

-Naruto-le susurró poco después de haberse separado aún hipnotizada por el beso.

-Gracias por volver mi sueño realidad, Sakura-chan-la abrazó, recargandose en su pecho mientras ella por instinto lo dejo acurrucarse, rodeándolo con sus brazos, para después quedar dormidos de nuevo.

EN CASA DE INO

Se encontraba en su casa un rubia molesta y deprimida, despierta a las altas horas de la noche con solo una gruesa bata que le cubriera cuerpo, comiendo helado hasta morir.

"Estúpido y sensual Sai" se sirvió una pequeña porción de helado de fresa. "Como pudo haberme dicho eso, es decir, tengo un cuerpo envidiable y los hombres están a mis pies; pero ¿qué me acueste con todos? ¡no! ¡tampoco soy tan...!" Fue interrumpida de sus pensamientos por el timbrado a su puerta. "¿quién podrá ser a estas horas? Se cuestionaba en su mente, timbrarón de nuevo.

-¡Ya voy!-gritó la rubia, guardando la pequeña porción de helado que se habia servido en el refrigerador, para tomar lo que restaba en el bote para disponer a comerlo después de atender a su visita, que había timbrado dos veces más.

-¡¿por qué es tanta la arrogancia a que habra la...?!- dijo una vez abriendo la puerta, sin terminar su pregunta por la sorpresa de quien la visitaba.

-Buenas noches, Ino-san- le sonrió.

-¡¿tú?! ¡¿pero todavía tienes el descaro de venir a saludarme y encima con esa sonrisa de estúpido que es mas falsa que los pechos de Tsunade-lo apuntó furiosa.

-Bueno, no solo vine a saludarte, también vine a disculparme por haberte llamado... pues ya sabes-intento mostrar pena.

-¡¿y crees qué con eso te perdonaré! ¡pues te equivocas!-se cruzó de brazos.

El Donante MisteriosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora