Era una linda mañana en la ciudad de Solaris, el sol entraba por la ventana de una joven, su cabello rubio, caia por su almohada desordenado.
Ella empezó a abrir los ojos, color esmeralda, y sonrió al ver el hermoso día que le esperaba hoy, en su primer día de clases.
-un nuevo día...todo saldrá bien, Rapunzel...no te pongas nerviosa, has practicado toda la noche tu presentación...¿que pude salir mal?.-se decía a ella misma.
Se lento de su cama para ir ver a su familia.
-hija...ven a desayunar.-dijo su madre al verla parada en la puerta.
-¿Hiccup no se a levantado?.-pregunto al ver la ausencia de su hermano.
-no...seguro y no tardará.-dijo su madre con una sonrisa.
Mientras tanto en la habitación de un chico castaño, ojos verdes, y nervioso.
-okey...tranquilo...todo saldrá bien, ¿no lo cres amigo?.-dijo el chico dirigiéndose a su gato, el cual estaba posado en su cama.
-me estoy volviendo loco, chimuelo.-dijo tocándose la frente.
El gato sólo maullo y se bajó de la cama para dirigirse hacia la sala de la casa.
-genial...hasta mi gato me ignora.-dijo para si mismo
Vajo las escaleras y se dirigió a la cocina, en la cual vio a su madre y su hermana.
-buenos días.-dijo sentándose al lado de su hermanita.
-buenos dias, hijo.-dijo su madre dándole el desayuno
-¿estas nervioso?.-pregunto la rubia
-algo...es la primera vez que nos mudamos y cambiamos de escuela.-
-tienes razón...pero era necesario, papá necesitaba ese aumento.-dijo
El sólo asintió y se dedicó a comer su desayuno en compañía de su hermana.
***
En la casa de los Olveran-Fost, un chico comenzaba a levantarse.
-otra vez a la escuela.-fue lo único que dijo
Salto de la cama directo a la ducha, cuando acabo se vistió los más apropiado para la escuela, que era unos jeans, una camisa azul y sus zapatos blancos.
Bajo corriendo a la sala para encontrarse con su madre y su prima.
-buenos dias.-dijo llegando a su lugar.
-buenos dias, hijo.-dijo su madre con una sonrisa.
-hola, primo...estas mas entusiasmado hoy más que nunca.-dijo Mérida
-si..., siento que será un día genial.-dijo sonriente.
-muy bien, niños coman antes de irse.-dijo la madre de Jack.
Todo estaba bien cuanto a las dos familias, los chicos estaban entusiasmados por la escuela, unos más que otros.
Los hermanos Corona, terminaron de alistarse cuando oyeron el claxon del camión escolar.
Ellos se miraron entre si, y suspiraron, había llegado la hora de ir a la escuela...su nueva escuela.
Salieron cuando su madre término de decir "suerte" el camión abrió más puertas y subieron, todo el estruendo que se oía cesó cuando todos los vieron, ellos inexpertos votaron por sentarse juntos, en la parte de atras había dos asientos desocupado, ellos caminaron por el corredor y llegaron.
En frente de ellos se encontraban dos chicos uno albino y una pelirroja.
Todo el viaje se la pasaron callados, la hermosa chica rubio sólo se dedicó a mirar por la ventana mientras su hermano sólo jugaba con sus manos.
-todo va a salir bien, Hiccup.-le alentó su hermana
El volteo a verla y ella lo veía con una sonrisa de confianza, sólo le devolvió el gensto y dijo.
-¿que tal si cometo el ridículo?¿o si ago algo torpe?.-pregunto
-no pasará nada.-dijo
-¿sabes?, Extraño a Hiro y Willbur.-ahora toda su atención estaba en sus zapatos.
-yo también extraño a Violetta y Ariel.-dijo volviendo a ver a la ventana.
Recordar a sus antiguos amigos la ponia triste...y más al recordar a su ex-novio Flinn.
Volvió a la realidad cuando el camión del colegio freno en frente de la Instituto llamado Disneyworks.
Todos bajaron tan rápido, que sólo quedaron los hermanos Corona y otros dos chicos.
Rapunzel iba tan distraida que no se dio cuenta hasta que choco contra otra persona.-lo siento.-se apresuró a decir la rubia.
-no hay problema,...eres nueva ¿verdad?.-dijo la chica
-si...soy Rapunzel.-dijo tendiendo la mano
-Anna.-dijo la chica castaña.
-un gusto Anna...y ¿me podrías orientar?.-dijo sonrojada
-claro...ven te llevaré con el director.-dijo feliz
A Rapunzel le calló bien enseguida deseaba que su hermano tuviera la misma suerte que ella.
Un chico castaño iba viendo todo atento...tratando de no cometer una tontería que lo marcará toda su vida escolar.
El calló, todos se le quedaron viendo y se rieron cuando el chico estaba dispuesto a levantarse, vio una mano tendida afreciendole ayuda.
Alzó la mirada y se encontró con una mirada de confianza, era una chica, pelo negro, el fleco cortado en pico, y iba vestida con un vestido negro.
-¿necesitas ayuda?.-dijo
-no sabes cuánta.-dijo
Se levantó con la ayuda de esa chica.
-me llamó Mavis.-dijo tendiéndole la mano.
-Hiccup.-de igual modo
-nuevo...se nota a kilómetros...¿a donde ibas?.-dijo feliz.
-a la dirección por mi horario...mi hermana se perdió de mi vista.-dijo apendo.
-tranqulo...vamos yo te llevo.-dijo
Hiccup estaba feliz había conseguido una amiga.